Celebra una década de enseñanza la Universidad Loyola del Pacífico

 Xavier Rosado * “Somos un sistema inserto en otro más amplio, somos un proyecto que ha ido conformándose con el cambio” dijo el rector de la Universidad Loyola del Pacífico, Mariano Ignacio Alonso Marcos durante la celebración del décimo aniversario de esta institución ante representantes de asociaciones civiles, maestros, alumnos y colaboradores de la ULP y del presidente municipal de Acapulco, Zeferino Torreblanca Galindo.Después de una misa de acción de gracias, por el aniversario, se dio la bienvenida y se presentó el informe de actividades del rector.“Hace 10 años, con ocho aulas, comenzamos esto que muchos llamaron una locura que recibió el aliento, pero también la mirada expectante del entonces gobernador Francisco Ruiz Massieu. Teníamos cinco licenciaturas que alcanzaron su registro ante la SEP en 1994”, recordó en su discurso Mariano Alonso.“Como institución académica, iniciamos nuestros primeros pasos con la Ibero y poco a poco fuimos haciendo nuestro propio camino, siempre en el análisis comparativo y con el apoyo de esa institución con la que compartimos nuestro ideario”, leyó el rector.Especificó que una de las acepciones que aclara lo que se debe entender por calidad particularmente en la educación y no como parámetro mercadológico es que “la calidad es la concordancia entre el ejercicio de una virtud y el ámbito en que se ejerce”.“No podemos crear una calidad artificial, ni anhelar una universidad que no abra los ojos a lo que su contexto le exige, si somos artificiales, estaremos cancelando la oportunidad de establecer el diálogo entre el profesional y la sociedad que es, a fin de cuentas, lo que puede esperarse de la misión universitaria”, dijo casi al final de su discurso. Hizo también referencia a la frase célebre de Miguel de Unamuno: “Somos hijos de nuestro pasado, pero también padres de nuestro futuro”.Para el décimo aniversario de la universidad, se mandó a hacer un logotipo cuya figura principal es un faro, Alonso explicó que su significado es que la luz del faro da una dirección, un punto a seguir, pero que aún así deja libre la decisión al capitán el rumbo que tomará, así también, la universidad marca los parámetros pero da libertad de elección al alumno.También entregaron reconocimientos a 60 benefactores y patronos de la universidad, entre los que se encuentran particulares y empresas que han contribuido al desarrollo de la universidad.Presentaron, asimismo, un audiovisual en memoria de los benefactores y se reconoció a colaboradores de la institución que cumplieron cinco y 10 años de antigüedad en la institución.A las 22 horas empezó un coctel de celebración en el campus. Entre los presentes en la ceremonia se encontraban el presidente de Enseñanza e Investigación Superior de Acapulco, A.C. (EISAAC), Luis Walton Aburto y el presidente del patronato de la universidad, César M. Bajos Valverde.