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Afecta a indígenas de La Montaña alta el bajo precio del café en el mercado libre

Sergio Ferrer

Espino Blanco

Campesinos indígenas de La Montaña alta, que vendieron su café a un empresario privado en la búsqueda de un pago más justo y ante el riesgo de que se humedezca por las lluvias y pierda aún más su valor, reconocieron la necesidad de la creación de una organización colectiva de cafetaleros en la región.
Desde el sábado, tráileres bajo supervisión de un comprador de Oaxaca, acopiaron grano de café capulín en comunidades de San Luis Acatlán y posteriormente en Espino Blanco, municipio de Malinaltepec.
Se conoció que en Espino Blanco plantearon la compra de entre 25 y 30 toneladas del grano, por lo cual agricultores de diversas comunidades me’phaa, entre éstas Tenamazapa, Tlapayoltepec, Xochiatenco, llegaron en vehículos con sus costales.
Un productor, quien prefirió omitir su nombre por temor a represalias, denunció en entrevista efectuada el lunes que organizaciones como La Luz de la Montaña, venden el producto en noviembre y diciembre a precio elevado y cuando terminan la producción de la parte baja, disminuyen el precio del café para que les paguen una migaja a los productores de la parte alta.
Aseguró que el café de La Montaña baja tiene mala calidad y en sus parcelas “reina la broca (plaga que se come el grano)”; mientras que en la parte alta, el frío y la altura no permiten la entrada de la broca, aseguró el campesino.
Agregó que en la parte baja usan químicos y en la parte alta “se chapona, se usa machete y garabato por eso no hay contaminación; es el producto que buscan en el mercado las compañías”.
Una mujer comentó que les anunciaron que estaría la compra del café a 18 pesos el kilo, “es muy  poquito pero hay que sacarlo si no se remoja con las lluvias”, dijo.
Finalmente, las organizaciones cafetaleras establecieron un precio a la compra de 15 pesos el kilo.
En otra crítica a una de las organizaciones cafetaleras que tienen sus oficinas en San Luis Acatlán, el productor aseguró que las carteras de clientes se las reparten sólo las personas de la parte baja y por más capacidad que tenga una persona de la parte alta le coartan el derecho porque “se manejan millonadas”, si alguien de la parte alta se “destaca” le acumulan delitos y pueden llevarlo hasta a la cárcel, relató.
El hombre pidió dar a conocer la situación para que los funcionarios y políticos se den cuenta. Recordó que luego de la desaparición del Instituto Mexicano del Café surgieron organizaciones que explotan al campesino.
Una de las soluciones que plantearon los caficultores fue la organización colectiva, que los pueblos de La Montaña alta consoliden su organización y hagan conciencia porque varios son compadres o tienen relación con los “casiquillos” de la parte baja que ejecutan la explotación del hombre por el hombre.
Los productores ratificaron la necesidad de formar un grupo propio con gente preparada para que los de la parte baja hagan su negocio y en la parte alta busquen el mejor mercado, “tenemos conocimiento de que el producto se entrega a empresas que le sacan jugosa ganancia”, indicó uno de ellos.
Aseveraron que indagarán la posibilidad de conocer a otros empresarios y otros precios para superar la deficiencia que ha prevalecido, es decir, entregarlo directamente al empresario y continuar buscando un avance para evitar que al campesino que trabaja a marcha forzada se le continúe explotando.
Al parecer, el comprador se retrasó el lunes en la compra por cuestiones bancarias. Uno de los transportistas indicó que ellos sólo se encargaban de transportar, pero que miró con tristeza como hay coyotes que le dicen a la gente que venda a bajo precio para ganarse millones de pesos con cuatro o cinco toneladas.
El transportista criticó que en México siga vigente la explotación de grupos de personas que viven de los pobres, comparó la situación de las dietas de diputados y senadores ante el campesino que ni siquiera tiene sueldo fijo.
El Instituto Mexicano del Café (Inmecafé) desapareció en 1989, posteriormente, el precio del grano se sujetó al mercado libre; el gobierno federal no creó otras instancias para subsanar la extinción del instituto y las trasnacionales se distribuyeron los mercados.
Según información en la red, Inmecafé se encargó de fijar un precio mínimo al café, vigiló que productores tuvieran mercado de exportación. El precio del café a nivel internacional ocasiona la crisis o leve estabilidad de los cafetaleros
Los principales productores de café en México son los estados de Chiapas, Colima, Guerrero, Hidalgo, Jalisco, Nayarit, Oaxaca, Puebla, Querétaro, San Luis Potosí, Veracruz y Tabasco.

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