Exigen campesinos de Petatlán una planta tratadora de aguas negras

Brenda Escobar

Petatlán

Campesinos y productores de mango del ejido Petatlán, en ese municipio mostraron a funcionarios de los tres órdenes de gobierno el nivel de contaminación de los principales cuerpos de agua; demandaron la atención urgente para la construcción de una planta de tratamiento de aguas negras o algún proyecto alternativo, ya que la contaminación está provocando problemas de salud en los humanos y los animales.
Ayer, representantes de la Secretaría de Desarrollo Social federal (Sedesol), de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), de la Secretaría de Salud estatal (Ssa), de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semaren), así como de la Dirección de Ecología municipal, se reunieron con los ejidatarios, con quienes hablaron del interés de los tres niveles de gobierno por atender la grave contaminación del agua en este municipio.
El productor de mangos Benjamín Verboonen Rodríguez, les reprochó a los funcionarios que hasta después de 25 años que personalmente ha denunciado la contaminación de la laguna La Espundiosa, “hasta ahorita se estén dando cuenta de que tenemos un grave problema, cuando por años y años los productores de la zona de esa laguna hemos sido afectados y al gobierno no le ha interesado”.
Reprochó que derivado del escurrimiento de las aguas negras del drenaje de toda la ciudad de Petatlán sólo se han beneficiado dos personas, “una es la tía madre del ex presidente municipal José Antonio Armenta Miralrío, quien durante su administración cobró una cantidad millonaria porque una olla de drenaje le afectó sus tierras y la otra es la viuda del ex presidente municipal Oliver Vargas Blanco, suegra del actual director municipal de Catastro, a quien le pagaron 600 mil pesos al ganar una demanda contra el gobierno municipal”.
Asimismo, señaló que el alcalde priísta José Albino Lacunza Santos, “lejos de hacer una obra que le agradezcan los petatlecos, se puso a hacer una red de drenaje a la altura de la escuela secundaria Quetzalcóatl, que descarga directamente en la laguna del difunto Rubén Ortiz, por el camino a la virgen, y que era la única laguna que quedaba sin contaminar, ahora ya está recibiendo el excremento de todos los habitantes del sur de Petatlán”.
Otro campesino dijo que la contaminación del río Petatlán está afectando a las reses de muchos ganaderos, algunas de las cuales se han muerto y otras han mal parido o están enfermas por beber el agua contaminada de ese cuerpo de agua, pues recibe de manera directa las descargas de aguas negras completamente crudas, ya que en la ciudad no hay una planta tratadora.
Agregó que el rastro municipal y los rastros clandestinos también descargan en los arroyos, y que en esos lugares diariamente son sacrificados animales enfermos y éstos se destinan para el consumo humano.
Un campesino más dijo que en la misma cuenca del río, pero a la altura de la comunidad Río Chiquito, el drenaje descarga directo y en los últimos años, los habitantes de este poblado padecen de enfermedades gastrointestinales y de la piel, principalmente los niños y niñas “porque los niños hacen buches con el agua que cae llena de cagada”.
Las ejidatarias Olipitia Enríquez Trujillo y Hermelinda Benítez Gutiérrez, ambas vecinas de la colonia Las Flores, en la cabecera municipal, denunciaron que ellas y decenas de familias de ese núcleo poblacional son afectadas directamente por las descargas de aguas negras que de manera directa hacen los militares del 19 Batallón de Infantería al arroyo El Mezón.
Doña Olipitia dijo que los militares tienen un tubo del drenaje que sólo llega hasta una de las bardas que dan al arroyo y de ahí, el agua sucia va a parar al río Petatlán; aseguró que la situación de la contaminación del arroyo ha sido bandera política para cuanto presidente municipal, han entrado a la administración, pero que una vez que están en el cargo se olvidan del compromiso que hicieron con los habitantes de esta colonia.
Agregó que el más reciente es el alcalde Lacunza Santos, a quien le solicitó apoyo para la construcción de un muro de contención, pues su casa colinda a escasos metros del arroyo y en temporada de lluvias éste se desborda e inunda su casa con las aguas negras del drenaje clandestino de los militares, “lo único que me dio ese señor fueron dos bultos de cemento, qué hace uno con esa clase de apoyos cuando él le aseguró a toda la colonia que iba a arreglar esa contaminación”.
Luego de escuchar éstas y otras quejas respecto a la contaminación de los ríos y lagunas, los funcionarios y los campesinos hicieron un recorrido por el río Petatlán; observaron la descarga directa de aguas negras en la comunidad Río Chiquito, ahí platicaron con unas menores de edad quienes les dijeron que a ellas les han salido granos en la piel pero que de todos modos siguen bañándose en el río, “nos metemos un ratito y luego nos salimos”.
También recorrieron la laguna La Espundiosa y la laguna Valentín, donde constataron el grado de contaminación que ambos cuerpos de agua tienen; los funcionarios formaron un comité que le dará seguimiento a las acciones de recuperación tanto del río como de las lagunas.