En peligro de extinción a mediano plazo la población de cocodrilos de Ixtapa

* Tamacú, un osado entrenador que se encarga de cuidarlos en el estero de Playa Linda

 Maricela Santos, corresponsal, Zihuatanejo * Aunque no hay datos exactos sobre el número de cocodrilos que subsisten en los manglares que hay alrededor de Ixtapa-Zihuatanejo, en este destino turístico se han reducido drásticamente las áreas naturales en que habita esa especie.Por tal motivo, los cocodrilos tienen que salir de su hábitat en busca de condiciones más propicias para su subsistencia, pues en el estero que acondicionó el Fondo nacional de Turismo en Playa Linda, este animal carece de áreas de anidación y alimento, además de que no existe un contro adecuado de la calidad del agua.El atoyaquense Roberto Ríos Piza, mejor conocido como Tamacú, quien se ha hecho famoso por entrenar a esos animales exoticos, calcula que hay un millar de cocodrilos en el estero de Playa Linda y la Laguna del Negro –incluyendo especies maduras y recién nacidas–, pero sólo ha entrenado a 47 en los 20 años que lleva a cargo de este punto de atractivo turístico. Por lo anterior, podría hablarse de una sobrepoblación de la especie en el estero, pero según datos oficiales del director de Medio Ambiente y Recursos Naturales de Zihuatanejo, Arturo Pérez Quiroz, en el lugar sólo hay 183 cocodrilos.Pero no es el único lugar de este binomio de playa en donde vive la especie, pues se calcula que hay 17 cocodrilos en la playa La Ropa, de Zihuatanejo, en el estero cercano al hotel Paraíso Real y que hay 26 ejemplares más en el club de golf Palma Real.Aunque no hay datos oficiales de la existencia de la especie en otros puntos, Tamacú asegura que también hay cocodrilos en la Marina Ixtapa, en donde, durante su construcción, se trasladaron algunos al estero de Playa Linda, mientras que el resto se distribuyó en distintos esteros de la Costa Grande y algunos más a zoológicos estatales.A pesar de que no está confirmado, el decir popular de los azuetenses habla de una matanza de la especie durante la construcción del desarrollo turístico Marina Ixtapa, y de la existencia de la especie en ríos cercanos y en el canal principal, rumbo a la playa La Madera.

El entrenador de cocodrilos

 Tamacú se inició en el entrenamiento de cocodrilos con un ejemplar sacado furtivamente de Chiapas hace aproximadamente 23 años al que llamó Zaguiño (bautizado así en honor del jugador de futbol Zague, en ese entonces perteneciente al equipo de futbol América y de quien Tamacú se reconoce como fiel seguidor, pues casi siempre porta la playera de ese equipo). Sin embargo fue tres años después cuando empezó a recorrer las principales calles de Zihuatanejo con él sobre la espalda.A Zaguiño (un cocodulus morelette) lo liberó en el estero de playa Linda cuando ya medía casi dos metros de largo.Ahora Tamacú puede llamar a los cocodrilos por los nombres de jugadores americanistas de futbol, para que salgan a comer los cien kilos de desechos de pescado que recolecta en el mercado principal de Zihuatanejo, labor por la cual cobra un salario de mil 270 pesos quincenales en el ayuntamiento azuetense.Ríos Piza tiene una historia singular. Nació hace 64 años en El Paraíso, de Atoyac, y cuenta que un día salió a cazar algo para comer con sus hermanos y se le apareció un viejo con barba, quien después se identificaría como el santo de los animales: San Jorge, y dice que desde entonces empezó a cargar serpientes o “animales exóticos” que no le hacen daño.Tamacú –quien hizo una exhibición de su capacidad de adiestramiento de cocodrilos al gobernador René Juárez Cisneros, en su última gira por Zihuatanejo, cuenta que en los únicos cinco años de instrucción primaria que cursó en Atoyac tuvo como profesor a Lucio Cabañas Barrientos, y asegura que estuvo durante el mitin para exigir la expulsión de Julissa Paco Piza, movimiento seminal que, tras la masacre de Atoyac, desencadenaría años más tarde la guerrilla.Narra que por su habilidad para correr –que le mereció en 1970 un campeonato de 51 metros planos– se encargaba de distribuir cartas e invitaciones a asambleas en la sierra de Atoyac, y que en 1936 se golpeó con la rama de un árbol y a consecuencia perdió el ojo izquierdo.A Tamacú se le encuentra por lo regular vestido con el uniforme del América y una banda amarilla en la cabeza; monta sobre sus hombros a los cocodrilos –que no pasan de los dos metros de largo– y viaja diariamente en un triciclo de Zihuatanejo a Ixtapa, cargando los cien kilos de pescados que le da hasta en la boca a los cocodrilos del estero de Playa Linda. Es padre de tres hijos mayores de edad y trabaja como vigilante del Centro de Estudios Técnicos e Industriales.Es delgado, usa el pelo largo hasta los hombros, tiene pocos dientes y cuenta incluso que ganó un premio durante una feria cuando se caracterizó como Rey caníbal.Tras la exhibición que le hizo al gobernador en su pasada visita, en la cual le pidió que le ayudara a hacerse una cirugía dental y otra para recuperar estéticamente el ojo que perdió, Tamacú recibió un aviso de que el próximo sábado le entregarán una cuatrimoto para trasladar el pescado a los cocodrilos, asimismo fue requerido la semana pasada por el director del hospital general de Zihuatanejo, para hacerle una valoración médica de las dos solicitudes que le hizo al mandatario estatal, pues ya había dado órdenes de que lo atendieran.Dijo que el pasado 5 de junio –Día Mundial del Medio Ambiente y también su cumpleaños– nacieron unos 200 cocodrilos en el estero de la playa Linda, y estima que de estos sobreviva a penas 40 por ciento por la natural depredación de la misma especie. Dice que en los 20 años que ha cuidado este estero, ha aumentado el número de cocodrilos, especie que, asegura, no es agresiva.El entrenamiento de los animales lo hace desde que miden 10 centímetros, jugando con una varita en su boca, para después sustituirla por su dedo o por su brazo, dependiendo del desarrollo del animal. El entrenamiento que hace no es profesional, pero suele organizar exhibiciones en temporada de vacaciones o para algún funcionario, como la que ofrecerá el próximo sábado para el alcalde de Zihuatanejo, Jorge Allec Galeana.En ellas, Ríos Piza se monta arriba del cocodrilo, le mete la mano entre las fauces, hace que le pongan la mandíbula en su antebrazo y los hace salir por su nombre del estero para que coman pescado.Nunca lo han mordido ni atacado –dice– y cuenta que esta especie nunca ha atacado a ningún turista, a pesar de que les avientan botellas y alimento en el estero, lo que además de contaminar el área podría provocarlos.

 “No hay recursos para controlar la población”: Pérez Quiroz

 Por su parte el director municipal de Medio Ambiente y Recursos Naturales de Zihuatanejo, Arturo Pérez Quiroz, dijo que debido al desarrollo turístico se han limitado las áreas naturales de los cocodrilos; “se están haciendo hoteles, mercados de artesanías, campos de golf y desarrollos turísticos que reducen drásticamente las áreas naturales de estas especies”.Negó que haya sobrepoblación de estos animales en los esteros de la playa Linda, La Ropa y hasta la Laguna del Negro, que calcula tiene más de 50 hectáreas para albergarlos, pero dice que no hay recursos para controlar la especie y que ha sido con el apoyo de Fonatur que se logró cercar el área.El segundo proyecto de crecimiento de Fonatur en Ixtapa –agregó– plantea una nueva delimitación de la zona de los cocodrilos directamente en la Laguna del Negro, de la que el estero de la Playa Linda forma parte.Aunque un estudio elaborado el año pasado por la dependencia que encabeza, habla de candiciones desfavorables para la especie en el estero. De ello Pérez Quiroz dijo que la especie, cuando abandona el área, es por migración natural, pero que se pretende hacer “un santuario con fines ecológicos, más que un cocodrilario con fines comerciales”.Tras minimizar cualquier versión de sobrepoblación del estero, confió en que los cocodrilos regulan su crecimiento de manera natural al devorarse entre ellos “no por que sean carnívoros, sino como resultado de una conducta territorial”.Negó la versión popular que habla de una matanza de estos animales, y que durante la construcción de la Marina Ixtapa hubo una reubicación de cocodrilos que se llevaron a la playa Linda y a distintos esteros de la Costa Grande, en la cual participó el Tecnológico de Zihuatanejo.“No sé de una matanza de cocodrilos, sé de los que han muerto accidentalmente en temporada de celo a manos de otros cocodrilos, o atropellados por algun autobús cuando migran en busca de cuerpos de agua propicios para su supervivencia …no son animales de una sola zona, se meten al mar, se van a una laguna o se salen a buscar otras lagunas, y en sus rutas de migración tienen que atravesar la carretera de la playa Linda que es donde frecuentemente los matan”, dijo.También declinó hablar de la posibilidad de venta clandestina de la especie, o de que esté amenazada o en peligro de extinción, a causa de las limitaciones a su entorno natural provocado por el desarrollo turístico.Para el encargado de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), AntonioValdivia Zúñiga sí existe una sobrepoblación de la especie y se requiere mejorar sus condiciones en el estero de la playa Linda, aunque recientemente Fonatur presentó una propuesta de manejo en la segunda etapa de desarrollo turístico de Ixtapa como parte del Plan de Desarrollo Urbano Regional del Municipio, y de esta dependencia federal.Cuenta que la sequía que afectó a Zihuatanejo provocó que los cocodrilos salieran de su hábitat, y que recibieron llamados de vecinos aledaños a la zona de ríos alertando sobre la presencia de cocodrilos grandes frente a sus viviendas, pero dice que cuando acudieron no los encontraron y que con las lluvias se cree que regresaron a sus lugares acostumbrados.

 La reducción del hábitat

 El cocodrilo es una especie protegida por la NOM ECOL 059-1996 que enfrenta la reducción de su hábitat por el desarrollo urbano, pues en la carretera de Playa Linda es frecuente que sean atropelladas en el asfalto cuando salen del estero o que se les vea nadando por las noches a la orilla de la playa en pleno proceso de migración, según un estudio del Departamento de Proyectos Ambientales del municipio.En este estudio se señala que el cocodrilo (cocodylus acutus) enfrenta riesgos de extinción a mediano plazo “se espera la reducción de al menos 20 por ciento para los siguientes 10 años o tres generaciones, basados en observaciones directas o disminución de su área de ocupación y la calidad de su hábitat”.

Y es que este estudio –del que obtuvo copia El Sur– comienza señalando que el humedal de la Laguna del Negro ha sido susceptible a afectaciones y deterioro por que la basura y el desmonte de la zona obstruye el drenaje natural, además de que el pantano “sirve como tiradero clandestino” en época de secas.El área es afectada por el relleno de sus zonas aledañas con residuos de desarrollos turísticos en construcción, “presenta varias deficiencias: se encuentra deteriorado principalmente por la abundancia de sólidos en el agua, la baja concentración de oxígeno, espacio reducido, insuficientes áreas de anidación, escasez de alimento, robo de huevos y especies, atropellamientos frecuentes en las carreteras, desconocimiento de sus rutas de traslado, alteración en los patrones naturales de alimentación, pánico y mala fama de los cocodrilos entre la población”.El estero de Playa Linda se mantiene de las descargas de aguas tratadas de Fonatur “por lo que vale la pena mantener el control de la calidad del agua porque presenta algunas muestras de eutroficación en la laguna como turbidez, suelo anóxico y desprendimientos de acído sulfúdrico”, dice el estudio.También se reconoce en el documento  la comercialización de la especie en las comunidades de Pantla y San José Ixtapa como mascota o artesanía al turismo; sin embargo se estima que esta actividad puede controlarse debido a que no es la principal actividad económica de la región, sino que se da de forma esporádica y furtiva.“En Ixtapa Zihuatanejo se reportan frecuentemente por parte de los operadores turísticos, la presencia de cocodrilos dentro de sus instalaciones, solicitando el retiro inmediato del animal. En muchos lugares los mismos empleados estan acostumbrados a lidiar con estos animales… la conducta hacia los cocodrilos motivó que la laguna fuera bordeada con malla ciclónica y que se colocaran letreros de alerta al turista sobre la peligrosidad del cocodrilo para que se mantenga lejos de ellos y no se introduzca a la zona protegida”.El estudio indica que durante la construcción de la Marina en 1990 se tuvieron que modificar las áreas donde vivían los cocodrilos de mayor tamaño y reconoce que de los 207 que había en el lugar murieron 40 en huevos y 17 de ellos en edad madura.Los cocodrilos durante este traslado fueron maltratados con las los implementos que utilizan los pescadores, los tiempos de retención para el transporte o incluso al momento de la liberación según la información proporcionada por Gabriel González Robles quien encabezó esos trabajos con el financiamiento de la actual Semarnat. Los cocodrilos se trasladaron a el estero Colorado en la comunidad de El Reparo en la Unión; 25 se llevaron al zoológico de Chilpancingo, y el resto al estero actual.El estudio reconoce que la zona de Playa Linda ha sido perturbada por al construcción del hotel Qualton, el embarcadero, el mercado de artesanías, la avenida que conecta hacia Ixtapa, la ciclopista que rodea el cerro de La Hedionda y la desembocadura al mar de la laguna… la introducción artificial de Tilapia entre otros.