Necesitamos mayor comunicación con nuestros asistentes: Ramos Rizo

 Adalberto Valle * Para el representante del arbitraje mexicano en el pasado Mundial 2002, Felipe Ramos Rizo, el uso de la tecnología para mejorar el rendimiento de los silbantes tiene estar enfocada en un principio, en mejorar la comunicación con los jueces asistentes.En entrevista con los medios en el marco de la Convención de Arbitros que se realiza en Acapulco, Ramos Rizo dijo que la FIFA debe hacer las pruebas necesarias para aprobar métodos y que los jueces tengan el menor margen de error, ayudado por los antes conocidos como abanderados y el cuarto oficial, con la posibilidad de hablarse entre ellos durante el partido y no sólo comunicarse mediante señas.Sobre su participación mundialista, que englobó tres juegos dirigidos –Francia ante Uruguay, Eslovenia frente a Paraguay y Brasil contra Inglaterra en cuartos de final-, además de dos partidos como cuarto oficial –la inauguración entre Francia y Senegal, además del juego por el tercer sitio en que Turquía derrotó a Corea–, el silbante de 39 años, aseguró que no le queda ninguna “espina clavada”, por no haber estado en el partido final.“Estoy súper satisfecho por el reconocimiento que se le hizo a México y a Felipe Ramos Rizo”, en referencia a dirigir partidos de la talla de la considerada como final adelantada entre Brasil e Inglaterra, en el que expulsó a Ronaldinho por una fuerte entrada.

“Estoy convencido de que mereció la tarjeta roja”, añadió.

Respecto al error más grave que tuvo en el Mundial, al no echar de la canchar al uruguayo Darío Silva por una falta similar a la del francés Thierry Henry, quien si vio la tarjeta roja, expuso que no ha visto el video, aunque acepta que se equivocó.“Platicando con el visor y con el mismo (Edgardo) Codesal me han dicho que también era expulsión. Lo que pasó es que en ese momento volteo a ver otra cosa y no aprecié la jugada”.Acerca del porqué no estuvieron en el Mundial asistentes mexicanos, Ramos Rizo aseguró que estos tienen el nivel para ser considerados los mejores del mundo, “pero desafortunadamente no hubo lugares”.Entorno a la polémica en que se vio envuelto el silbante de Egipto Gamal Ghandour, quien dirigió el juego entre Corea y España, comentó que “no podría decir nada de mis compañeros, yo fui uno de los que estaban ahí”.“Lo que sí me duele es todo lo que se habló del arbitraje, las críticas, que algunas fueron infundadas. Claro que hubo fallas y no se pueden tapar. Pero se trató de pisotear al árbitro. Así es esto, vivimos en esto y a veces hay que soportarlo”.Añadió que el jugador que más lo impactó, sobre todo por su forma de dirigirse hacia él y su personalidad, fue el brasileño Roberto Carlos, mientras que calificó al silbante italiano Pierluigi Collina –que dirigió la final- como el mejor, aunque recordó que hay otros de gran nivel como el colombiano Oscar Ruiz.

 El lugar no sólo se gana en la cancha

 Respecto a la labor de Edgardo Codesal dentro del ambiente arbitral en la FIFA, Felipe Ramos Rizo manifestó que “es muy importante que alguien nos brinde el apoyo ante la FIFA”.“Esto no sólo se gana en la cancha, también se necesita que alguien esté apoyando”.Agregó que tras la renuncia de Codesal a la Comisión de Arbitraje de la FIFA “ojalá vengan beneficios para el arbitraje” y no consecuencias negativas para México, puesto que “es de los mejores a nivel mundial y el mejor del área” en este rubro, “no se puede prescindir del arbitraje mexicano” recalcó.Además, optó porque haya continuidad y Edgardo Codesal se mantenga al frente de los silbantes nacionales.“Cuando el arbitraje entró en baches fue porque no hubo continuidad y ahora que la hay, espero que no se vaya”.En lo personal, después de haber dirigido una final del certamen futbolístico en los Juegos Olímpicos de Sydney 2000 y ahora participar de forma importante en el evento de Corea y Japón, Ramos Rizo dijo que le resta seguir superándose para ser de los mejores “porque no me siento el mejor árbitro mexicano”.“Sólo trato de hacer cada vez mejor mi trabajo”.Reveló que no sabe si llegará a otro Mundial.“Toca el turno de pensar en el torneo local, preparame y dirigir bien”.