Podrían estar rasurados los archivos de Lecumberri, opina Tita Radilla

Francisco Magaña, corresponsal, Atoyac de Alvarez * La vicepresidenta de la Asociación de Familiares de Detenidos Desaparecidos de México (Afadem), Tita Radilla Martínez, consideró que los archivos de la represión de la llamada guerra sucia, abiertos de manera oficial el martes por el presidente Vicente Fox, pueden estar ya rasurados para proteger intereses de algunos políticos.

La defensora de los derechos humanos se refirió así a los 61 mil archivos del Palacio Negro de Lecumberri, con 8 millones de fichas de las extintas Dirección Federal de Seguridad y la General de Investigaciones  Políticas y Sociales.

Radilla Martínez, señaló que conocía de la existencia de los archivos de la represión que están en el Archivo General de la Nación, pero dijo que la presentación oficial le tomó por sorpresa, y no se lo esperaba.

Dijo que el hecho de abrir los archivos es importante pero también indicó que es necesario que se abran los registros personales de los ex presidentes y principalmente los de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), para conocer quienes estuvieron al frente de las instituciones y corporaciones nacionales y se les enjuicie.

Expresó que los indicios de material gráfico que se pueden llegar a encontrar en los archivos serán de gran importancia para las investigaciones de los familiares, porque se puede llegar a encontrar fotografías de los desaparecidos.

Por ello dijo que no comparte que sean primero las autoridades las que accedan a la información ya que eso se puede prestar a otra rasuradita, para proteger a los políticos que tienen que ver con la guerra sucia, aunque dijo que los familiares de los desaparecidos ya saben quiénes son los responsables, pero son importantes los testimonios que pudieran encontrarse.

Indicó que no tienen fecha exacta para acudir a informarse en los archivos de las más de 450 desapariciones forzadas del municipio de Atoyac y de los casi 600 casos que se tienen registrados en la entidad.

Destacó la promesa de presidente Vicente Fox de que se castigará a los responsables, pero dijo que la promesa de indemnizarlos antes de conocer los resultados de los expedientes no es su interés, “es conocer el paradero de nuestros familiares”, dijo y recordó que en 1993, les quisieron indemnizar pero aclaró que ese no es su objetivo, es conocer dónde están y qué hicieron con ellos”.