Mireles: la falta de aplicación de las leyes acentúa el deterioro ecológico

Ossiel Pacheco * El diputado perredista Esteban Mireles Martínez aseguró que la destrucción del medio ambiente en Guerrero se acentúa porque no se aplican las leyes que hay en materia ecológica, así como por la falta de coordinación entre las dependencias del gobierno federal, estatal y municipal.El legistador participó en el foro Demos a la tierra una oportunidad, organizado por la Semarnat, el gobierno estatal y el ayuntamiento, debido a la celebración del Día Mundial del Medio Ambiente. El acto se llevó a cabo en el Cabildo del puerto.El también presidente de la Comisión de Recursos Naturales y Desarrollo Sustentable del Congreso del Estado señaló que el gobierno estatal “se excluye” en lo relativo al aprovechamiento de los bosques, “dejando a voluntad del gobierno federal el manejo y sin considerar que provoca el deterioro de los recursos forestales, el suelo y la biodiversidad”.Como parte de su ponencia La legislación ambiental en Guerrero, Esteban Mireles dio a conocer las leyes federales que regulan la protección al ambiente: La Ley General de Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente, la Ley General de Vida Silvestre, la Ley Forestal, la Ley Federal de Aguas Nacionales, entre otras.En tanto que –agregó– a nivel local está la Ley del Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente del Estado de Guerrero, la Ley del Sistema Estatal de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento y la de Protección a los Animales.Afirmó que las condiciones de deterioro que persisten en la entidad “son resultado de la falta de aplicación de esta abundante normatividad”.Esteban Mireles expuso que en Filo Mayor y en La Montaña, son las partes serranas con alto grado de marginación y abandono institucional, “situación que ha sido aprovechada por los madereros para ofrecer servicios, obras mínimas y recursos económicos que nunca tienen correspondencia con el valor de su madera”.“Esto es una práctica común en las comunidades pobres, por esta razón el 70 por ciento de los ejidos son rentistas: el único recurso que obtienen es partir de la venta de su madera y están excluidos de emplearse, e incluso de vigilar que el maderero extraiga exactamente lo convenido”, aseguró.Comparó que en Guerrero hay condiciones similares a las de Oaxaca para que se dé una masacre como la del ejido de Agua Fría, por la existencia de añejos problemas agrarios que han entorpecido el desarrollo. “Hay conflictos por los límites, la duplicación en la asignación de tierras o por la falta de la ejecución de resoluciones”.Señaló que otro factor es que ante la desregulación en el sector forestal, el estado dejó al juego del libre mercado el precio de la madera, lo que ha provocado que el maderero o industrial obtenga esta materia prima casi regalada si el ejidatario o comunero lo permite.