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Ganan pozolerías a restaurantes de la Costera en el primer juego del Mundial

Mariana Labastida

Poca gente se observó en los bares de la avenida Costera para ver el primer partido de futbol del Mundial Brasil 2014, mientras que las pozolerías poco a poco se fueron llenando después de las 4 de tarde, así pues la transmisión del juego de Brasil contra Croacia, dos rivales del grupo de México, no fue tan llamativa para los fanáticos acapulqueños.
A las 3 de la tarde, en los bares de La Diana al parque Papagayo se veían apenas grupos no mayores a 10 personas viendo el primero de los partidos que se jugarán durante el mes como parte del Mundial.
Tampoco los restaurantes, que programaron los televisores de plasma para la trasmisión en vivo, se observaron llenos, mientras que las pozolerías que se encuentran en la zona de playa Papagayo y El Golfito tampoco tenían muchos comensales; “sí tenemos reservaciones pero como cada jueves, después de las 4 es cuando se empieza a llenar”, dijo un mesero.
En algunos bares se vio a peatones que desde afuera veían la transmisión del partido, aprovechando que las pantallas daban a la calle y el sonido era alto para no tener la necesidad de entrar al establecimiento y consumir, y se conformaron con verlo recargados un tubo o barra mientras que otros estaban parados con los brazos cruzados.
En otros lugares estaban ocupadas casi el total de las mesas, pero no por personas sino por una persona o parejas que no mostraron mucha emoción cuando Brasil metió el primero de los tres goles.
En el Zócalo Movimiento Ciudadano colocó una pantalla donde se veía el partido con ayuda de un proyector, y un encargado de un puesto de discos pirata los auxilió con el audio que iba desfasado porque era el de la pantalla de televisión que tenía en el puesto y la imagen era mejor que la que se emitía por internet. La pantalla fue colocada frente a las escaleras de acceso a la Dirección de Reglamentos y Espectáculos para que fueran ocupadas como gradas para sentarse, y sólo siete personas hicieron la escala para ver el partido.
Los propietarios de algunos negocios en la playa, como Elodia Sánchez, optaron por poner una televisión para los clientes, luego de que en días anteriores le preguntaran si la pondría. “Si no hago eso ahorita estuviera solo aquí”, dijo la comerciante.

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