Juan Carlos Moctezuma R.

Ayer a México le tocó sonreír enmedio de un diluvio de proporciones bíblicas y a España sufrir una goleada de características épicas.
En el caso de la oncena mexicana, se encontró con un eqipo africano tan dividido como los 200 grupos étnicos que conforman a Camerún.
Samuel Eto’o parecía el cansado patriarca de una estirpe destinada a una pronta extinción en la primera etapa del torneo.
Finalmente los europeos funcionaron (Dos Santos, Guardado y, especialmente, Herrera) como se esperaba de ellos, ayudados ingentemente por el Gallito Vázquez en el control de la media cancha.
El cuadro lo completaron un sólido tridente defensivo, también con experiencia europea (Márquez, el vilipendiado Maza y Moreno), y el lobo solitario del gol en que se ha convertido Oribe Peralta, un delantero que define un partido en un segundo, como ayer, en el momento de más necesidad, nos lo hizo recordar.
La lluvia, uno de los temas que siempre han estado a la mano de los equipos nacionales para justificar las derrotas, ahora resultó anecdótica gracias al excelente sistema de desagüe del estadio de las Dunas, en Natal.
El equipo que sí se disolvió entre las cañerías, pero de otro estadio, fue el campeón España.
Ayer se encontró con una versión reeditada de la Holanda a la que hace cuatro años venció en la final de Sudáfrica.
La noche de gloria de los atacantes Robben y Van Persie, fue inversamente proporcional a la que padeció el arquero y capitán español Iker Casillas.
Holanda fue un vendaval que a ratos nos hizo recordar a la Naranja Mecánica que de la mano de Rinus Michel en la banca y Johann Cruyff en el campo, revolucionaron el futbol a mediados de los setenta.
Sin embargo, la derrota se debió más a los errores de los españoles, del Chino Silva, del propio Iker, del inadvertido Costa, pero tambien del santón Vicente del Bosque que reaccionó a la hecatombe con la rapidez de una tortuga aletargada.
¿Acaso atestiguamos ayer el fin de una monarquía futbolística que coincide con el término del tiki taka catalán y con el cambio de poder en la realeza de ese país?
El Mundial apenas empieza. El misterio se nos develará en unas semanas más.