Arzobispo: han asesinado y desaparecido a quienes aportaron pruebas al caso Posadas

Ossiel Pacheco * El arzobispo de Acapulco Felipe Aguirre Franco señaló que hay un plan para ocultar y destruir pruebas y testigos en aras de hacer ver que fue un crimen perfecto el asesinato del cardenal Juan Jesús Posadas Ocampo, ocurrido el 24 de mayo de 1993. Entrevistado al término de la misa dominical que ofició en la catedral de Nuestra Señora de la Soledad, el prelado católico se refirió al noveno aniversario del asesinato del arzobispo de Guadalajara. “Toda la sociedad mexicana está inconforme por la falta éxito e eficacia en la promoción de justicia y aclaración de este caso”, dijo. “Falta mucho por investigar, hay bases para investigar, para darse cuenta de lo que hay atrás del asesinato del cardenal Posadas. Ha habido ocultamiento y destrucción de pruebas, para que resulte un crimen perfecto, en ese sentido, hay un plan para ocultar los sucesos por todos los medios posibles”, dijo.

Indicó que lo anterior está confirmado por la subprocuradora de la PGR, María de la Luz Lima Malvido, quien reconoció que hay ocultamiento y destrucción de las pruebas, “debe haber apertura a los documentos probatorios que existen para que los organismos legítimamente y legalmente autorizados puedan presentar las pruebas”. Y pidió la protección necesaria para las personas que aporten pruebas dado que ha sucedido que han desaparecido y asesinado a quienes han aportado pruebas para esclarecer el homicidio del purpurado de la Iglesia católica. Retó al ex procurador Jorge Carpizo a presentar pruebas en contra de Sandoval Iñiguez en el sentido de que ha sido el arzobispo de Guadalajara, quien ha obstaculizado las investigaciones, “el cardenal nunca ha hablado con el ex procurador, él representa la inconformidad del pueblo católico de México, dolido por el asesinato de un cardenal”, defendió. Por otro lado, Aguirre Franco confirmó que el documento final del Encuentro Nacional de Sacerdotes Indígenas efectuado en días pasados en Ometepec, va a ser entregado a las autoridades oficiales, en un afán de servir a los indígenas, “por nosotros no tenemos nada que esconder”.

En el Encuentro Nacional de Sacerdotes Indígenas la Comisión Episcopal de Indígenas (CEI) acordó llamar a los legisladores federales y locales a tomar más en cuenta las aportaciones de los pueblos indígenas, ya que estas leyes hasta ahora nos parecen más restrictivas de sus derechos que promotoras de su desarrollo. Asimismo se acordó construir una Iglesia autóctona con un nuevo rostro indígena, por lo cual, la evangelización, el ritual católico, las misas, cantos y la liturgia de la Iglesia va a llevarse a cabo en los idiomas de los pueblos indígenas. Y en su homilía convocó a los católicos a participar en una multitudinaria concentración para los festejos de jueves de Corpus Christi la tarde del próximo 30, para lo cual van a llevar a cabo una procesión de católicos de las diversas parroquias que va a partir del Asta Bandera, para llegar al Zócalo porteño.