No hay entendimiento entre gobierno y quienes protestan, admite Vargas

Zacarías Cervantes, corresponsal, Chilpancingo * Los bloqueos, manifestaciones, marchas y plantones que se han realizado en Chilpancingo y Acapulco en los últimos días “debemos entenderlo como un fenómeno natural” que no significa que estemos enfrentados gobierno y sociedad; “esto no es resultado de un enfrentamiento social”. El subsecretario de Asuntos Políticos del gobierno del estado, Jesús Vargas Vargas, definió así las protestas que prácticamente han colapsado las ciudades de Chilpancingo y Acapulco en los últimos días. Entrevistado después de atender a los dirigentes de la Organización Campesina de la Sierra del Sur (OCSS) que por tres días han realizado bloqueos a las calles de esta capital y a la Autopista del Sol en demanda de atención a sus demandas, el subsecretario reconoció que el gobierno estatal no atiende las demandas por las “limitantes presupuestales”.

El funcionario dijo que “el limite” del gobierno estatal es del orden de los 16 mil millones de pesos que se ejercen en Guerrero por recursos federales, estatales y municipales; esa es la capacidad de respuesta financiera y no alcanza para satisfacer las necesidades de educación, de obras públicas, vivienda, de asistencia social, construcción de vías de comunicación, proyectos productivos”. Pero además indicó que el 95 por ciento de los recursos que maneja el gobierno estatal son federales y que estos tienen una normatividad “clara y precisa” y que también esto frena la respuesta a las organizaciones sociales, porque es una normatividad que se debe de cumplir “y la gente pobre no ve la respuesta a sus demandas en términos de normatividad por eso se desespera pero no quieren aceptar esa normatividad que es impuesta por el gobierno federal”. Vargas, que regularmente es quien atiende en una primera instancia las demandas de las organizaciones sociales, definió que “el fenómeno de las marchas y bloqueos es por la pobreza” y por ello mismo reconoció que “todas las demandas de las organizaciones son justas”.

Agregó que la pobreza “es tan desesperante, tan agobiante que lleva a las organizaciones a movilizarse, pero los limites que tiene el gobierno del estado son presupuéstales, tiene recursos limitados”, insistió.

–Pero parece ser que lo que más molesta a los integrantes de las organizaciones es que no se cumplen acuerdos que firman los funcionarios con ellos, ¿que al firmar los acuerdos no piensan en las limitaciones presupuestales?, –preguntó el reportero.

–En las minutas que se han elaborado, se establecen compromisos futuros acordes a las posibilidades presupuestales, pero eso es lo que no se lee con precisión; cuando el gobernador firma un documento la gente piensa que es una respuesta positiva, por eso dicen que ya se los resolvió el gobernador, pero eso no significa una solución sino que él ya está enterado y que se le puede dar una respuesta negativa o positiva dependiendo de la capacidad presupuestal del gobierno del estado, pero muchas veces la gente no entiende esos mecanismos.

En ese sentido señaló que existen deficiencias en la interlocución entre los pueblos, las comunidades y las organizaciones con las instancias de gobierno. Dijo que no hay  “capacidad de entendimientos mutuos”; de lo contrario dijo que los dirigentes entenderían los límites del gobierno, como el gobierno entendería la sensibilidad de las demandas apremiantes de las organizaciones”.

–¿Eso significa que estamos condenados a vivir estas protestas durante todo el sexenio?

–No estamos condenados porque esta es una evolución; son condiciones sociales, políticas, económicas y sociales y no estamos condenados de ninguna manera a eso; lo que estamos viviendo es una etapa sociales en donde las comunidades y las organizaciones se están movilizando más porque tienen razón en sus movilizaciones, lo que pasa es que tenemos que irnos educando, tanto el gobierno, los líderes y la gente para entender los mecanismos de planteamientos de peticiones y entender las limitantes del gobierno.

Y en esta “una nueva sociedad que protesta”, el subsecretario de Asuntos Políticos del gobierno estatal dijo que debe contar con “liderazgos responsables y capaces”, porque agregó que “esto también es una evolución; los líderes tienen que ser más eficientes, inteligentes, menos radicales, ya no pensar que las demandas tienen que ser un juego de luchas y de fuerzas. No se trata de eso, tiene que haber una correlación de dialogo e inteligencia para que no se vea como un enfrentamiento social”. Y es que para el funcionario las manifestaciones se dan “por diversas demandas y por diversos conflictos” tanto entre grupos de organizaciones como los transportistas, como por demandas propias de los grupos sociales al gobierno estatal. Por ello informó que el gobierno actúa en acciones tanto de conciliación entre las organizaciones y los grupos que tienen conflictos entre sí, como también, para resolver las demandas que se plantean al gobierno del estado a través de las diferentes dependencias por los grupos y organizaciones.

Señaló que cuando en estas protestas se violentan los derechos de terceros se actúa a través de la Procuraduría de Justicia del Estado “pero lo que no vamos a hacer es utilizar el garrote; este no es un gobierno de garrote, es de conciliación, de atención de apertura y cuando las instancias de procuración de justicia tienen que actuar lo harán siempre pero cuando haya una querella”.