Apoyo decidido a las campañas locales del PRD, anunció Rosario Robles

* Propone que los candidatos sean ciudadanos reconocidos por la sociedad y que sean designados por métodos transparentes * Plantea cuidar los distritos electorales en los que el PRD es “altamente competitivo” * Voto a los mexicanos en el extranjero, otra de las prioridades

Hugo Pacheco León, enviado, Ciudad de México * En la apertura del Séptimo Congreso Nacional, la presidenta nacional del PRD, Rosario Robles Berlanga, criticó los recortes presupuestales, urgió a la unidad de los perredistas, propuso una política de puertas abiertas, abogó por métodos transparentes para nombrar a los mejores candidatos, y anunció “el apoyo decidido a las campañas locales que se realizarán en varios estados de la República”, incluido Guerrero. En una relación de temas de interés directo de los guerrerenses, en la inauguración de los trabajos del Congreso Nacional, Robles criticó la política del gobierno de Vicente Fox hacia los indocumentados mexicanos, a quienes en lugar de defender suscribe “incondicionalmente” el acuerdo de seguridad fronteriza para ayudar a Estados Unidos a contener la migración, y hasta ahora “no ha elevado enérgicamente su voz para protestar por la resolución de la Suprema Corte de Justicia de Estados Unidos que violenta los derechos laborales y humanos de los migrantes mexicanos”, 800 mil de los cuales son guerrerenses, sobre todo de los municipios de la Zona Norte del estado como Taxco, Iguala, Ixcateopan, Cocula, Teloloapan, Apaxtla yt Acapetlahuaya; de varios más de La Montaña y de Tierra Caliente. La presidenta nacional del PRD criticó asimismo los recortes presupuestales –que han afectado programas asistenciales y de infraestructura en Guerreero–, pues además de que fueron ejecutados de manera unilateral por el Ejecutivo, han impactado sobre todo los rubros de educación, salud, seguridad social, así como los fondos de apoyo a los estados y municipios. Y la pobreza de más de 60 millones de mexicanos “sigue siendo una realidad lacerante”, como se ve en estados como el nuestro.

Marcó entonces lo que es la principal línea política-electoral para el PRD de aquí a las elecciones del 2003, incluyendo los procesos locales como el de octubre aquí en el estado. Los perredistas, dijo, deben “actuar de manera organizada, con una propuesta clara a la sociedad, con estrategia y prioridades, con audacia y, sobre todo, con una política de puertas abiertas y generosa que permita que muchos otros que luchan por un México democrático se sientan otra vez atraídos y representados por el PRD”. Planteó entonces que se necesita promover como candidatos a ciudadanos identificados por la sociedad, cuidar los distritos electorales en los que el PRD es “altamente competitivo”, definir la política de alianzas, “que por supuesto excluye al PRI y al PAN”, promover una reforma electoral para incluir las candidaturas comunes, y hacer realidad el voto de los mexicanos en el extranjero. Además, señaló la necesidad de diseñar una estrategia que les permita marchar hacia el norte y penetrar en esta región del país. Y dio tareas:  “La unidad del PRD es indispensable en esta perspectiva, por lo que de manera inmediata nos daremos a la tarea de recorrer los 300 distritos electorales federales, instalar mesas de concertación de nuestros dirigentes y militantes para realizar un diagnóstico de cada uno, posibles alianzas, encuestas en distritos prioritarios, agendas regionales y locales, y definición clara y transparente de las mejores candidaturas, así como el apoyo decidido a las campañas locales que se realizarán en varios estados de la República”. Aunque, enfatizó, “ninguna estrategia electoral tendrá éxito si nuestro partido no refrenda su compromiso con las aspiraciones sociales y democráticas del pueblo de México”.

Los trabajadores, los campesinos, los indígenas en la agenda del PRD

En la agenda del PRD propuso que es fundamental el tema indígena, exigiendo un México pluricultural y pluriétnico, y una ley apegada a los acuerdos de San Andrés Larráinzar y a la iniciativa de la Cocopa. Igual es la de los trabajadores “que quieren un empleo estable, salarios dignos, y democratizar el mundo del trabajo. La de los campesinos y productores rurales que quieren seguir produciendo en sus tierras, apoyos por parte del gobierno y sobre todo democracia también en sus organizaciones”. También señaló que la agenda implica luchar por “una nueva economía sustentada en la promoción de las inversiones que generen la ampliación del mercado interno, la elevación de los ingresos de los trabajadores de la ciudad y el campo, de la capacidad productiva del trabajo social y el incremento del bienestar popular”.