Mantiene en el olvido el INAH las ruinas arqueológicas de Tixtla, denuncian

* Fueron descubiertas desde 1986

De la corrresponsalía; Tixtla * Descubiertas hace 16 años por una cuadrilla de trabajadores que abrían una brecha, las ruinas arqueológicas donde se asentó parte del pueblo de la cultura olmeca, se encuentran en completo abandono.

En lo alto de un cerro se encuentra semidescubierta una pirámide y hacia abajo hay vestigios de otras construcciones milenerias y que con el paso del tiempo han sufrido deterioro a causa de la mano del hombre.

Las ruinas fueron descubierta en 1986, durante el trenio municipal que encabezaba la alcaldesa priísta Julia Jiménez Alarcón cuando varios peones y albañiles que con pico, pala y maquinaria pesada abrieron un camino que conduciría a la comunidad de Metlalpa.

Entre la gente del lugar se dice que durante la llegada de los españoles los indios que habitaban este pueblo cubrieron de tierra sus templos sagrados y todo lo que ellos consideraban como valor.

Y es que temían que en cualquier momento los europeos llegaran al lugar para robarles sus cosas de valor. Por eso las cubrieron de tierra.

La zona donde se encuentran enterrados los templos, mide más de cinco hectáreas que, obviamente con el paso del tiempo ya tiene dueño y son utilizadas para las siembra de maíz, frijol, calabaza, chile verde y jitomate.

Pero estas tierras tienen dueños, y desde hace más de 10 años han estado reclamando al gobierno federall que les pague la indemnización por la expropiación.

Para llegar a este lugar, primero se tiene que tomar la carretera Tixtla-Apango y en el trayecto, se tiene que tomar una desviación por una brecha y caminar hacia arriba unos dos kilómetros.

A los lados del camino uno se encuentra con plantíos de maíz, calabaza o chile verde. En lo alto, se encuentra semidescubierta una pirámide que no cuenta con ninguna protección. Solamente hay una cerca de alambre de púas que se encuentra semidestruida.

“Eso (cuando fueron descubiertas las ruinas arqueológicas) fue durante el gobierno de la profesora Julia (Jiménez Alarcón); nosotros aquí sembrábamos maíz, pero luego de que se metió aquí el gobierno para supuestamente investigar esta pirámide y ver lo que hay allá abajo; ya no nos dejaron trabajar y nos dijeron que nos iban a pagar o e reponer con otra pedazo de tierra”, señaló, Pascual Tolentino Colmenero, uno de los dueños de las tierras.

El campesino de baja estatura, sombrero de palma y huaraches de correa, cuenta que un trabajador del ayuntamiento de Tixtla al echar una “palada” tocó algo duro y después fue descubriendo una hilera de ladrillos. “Vio que eso no era normal y junto con los demás trabajadores dieron aviso a las autoridades para que vinieran a investigar.

Indicó que a ellos les comunicaron que tendrían que ir a Chilpancingo, “y allá nos dijeron (los del Instituto Nacional de Antropología e Historia) que el terreno no nos los iban a quitar, sino a pagar, pero es hora que no nos han dado nada y tampoco nos compraron otro terreno”.

“Nosotros no queremos que nos den dinero, mejor que nos den otro terreno porque de allí nos podemos mantener y dar de comer a nuestras familias”, expresó.

Acompañado por su hermano Santiago, Pascual, dice que al principio, cuando recién fueron descubiertas las ruinas arqueológicas, “vimos mucho movimiento de gente que venía aquí para realizar excavaciones, pero después y hasta la fecha ya nadie viene”.

Dice que hay una persona que fue designada por el INAH para que vigile todos los días la zona, pero que este trabajador va solamente una vez a la semana.

“Nosotros somos los que las cuidamos (las ruinas) porque venimos aquí todos los días en este lugar, y nos percatamos de que no pase nada”, expresó el campesino.

Pero por lo que está pugnando la familia Tolentino, es de que el gobierno les asigne otro terreno para poder sembrar: “porque con la poca tierra que nos dejaron no nos alcanza para poder mantenernos”.

“Nosotros tenemos las escrituras donde se señala que nosotros somos los legítimos propietarios de estas tierras, incluso una copia de estos papeles los tiene el gobierno desde hace más de 10 años y aún no vemos nada claro”, externó el labriego quien aparte de dedicarse a sembrar maíz, cabalazo, chile y jitomate también tiene su fabrica de mezcal.