Periódico con noticias de Acapulco y Guerrero

De precampañas en los cafés y reuniones para la foto

Aurelio Peláez * La política del PRD va como nunca a los cafés: que a Alberto Mojica se le vio amarrando una alianza con Carlos Alvarez; que Félix Salgado y Zeferino Torrelanca van a respaldar a Mojica; que Alberto López Rosas se va a quedar solo; que López Rosas amarra alianzas con ex priístas; que este miércoles, Félix, Zeferino y López Rosas se van a dejar ver en público para dar constancia de que en el PRD existe vida institucional.

Ayer, en el restaurante California, sobre la Costera, donde va un buen de acapulqueños, se dejaron ver los precandidatos del PRD a la presidencia municipal, Alberto Mojica Mojica y Carlos Alvarez Reyes. Los acompañó el presidente del Frente Cívico de Acapulco, Fernando Donoso, y el jefe de prensa de Mojica, Julio Zenón Flores.

Reunión para la foto, que busca que la prensa lo constate, dé cuenta y tome nota, sin mayores explicaciones.

El encuentro es promovido por Mojica, que ha convocado a otras dos reuniones para la foto, en la vieja tradición de la escuela priísta. Ya se quiso dejar ver con López Rosas, y después con Carlos Alvarez. El esquema es simple. Se filtra del encuentro a la prensa y ya.

Pero ayer, Carlos Alvarez se incomoda por la presencia de la prensa. Quizá, porque en su segundo encuentro, no quiere tocar el tema del respaldo reciente que la madre del alcalde Zeferino Torreblanca dio a la precadidantura de Alberto López Rosas. De improviso, al ver reporteros, se levanta y se va.

Y es que, se suponía que Alvarez era el candidato cercano al grupo de Torreblanca, el Frente Cívico de Acapulco y su familia incluida. Ya un día antes, en breve entrevista con reporteros, Torreblanca había señalado que de su parte no había línea ni para su padre ni para su madre, y que a través de ellos –por su apoyo a algún precandidato– no enviaba mensaje alguno.

Ayer por la mañana también, despachando a sus anchas a todo lo largo del Sanborns Café, frente a la Universidad Americana, se encontraba el precandidato perredista Alberto López Rosas. Eran las 11 del día y ya llevaba cuatro reuniones privadas en ese lugar. Pasaba de mesa en mesa. Antes de llegar allí, llevaba una entrevista a las 7 de la mañana para Televisa, un desayuno de trabajo en el restaurante 100% Natural y un café en el Sanborns del Centro, a donde tenía previsto regresar, para tener una reunión con los trabajadores administrativos del restaurante.

Al Sanborns de la Americana llega el equipo de prensa del candidato del PRI Ernesto Rodríguez Escalona, que preside el ex funcionario de Comunicación Social en los gobiernos de José Francisco Ruiz Massieu, Rubén Figueroa y Angel Aguirre, Miguel Angel Hernández Albarrán.

Es sitio de reunión de la nueva clase política del PRD, de universitarios y de periodistas, y en donde el rumor más inocuo tiene albergue en el diálogo: que Zeferino Torreblanca va a imponer a Carlos Alvarez como alcalde; que Félix Salgado sí va a contender por la candidatura del PRD; que Mojica va a respaldar a Ernesto Rodríguez; que Mojica es el candidato de René Juárez; que López Rosas sería candidato por otro partido…

La política permea todos los diálogos de los locales, que conviven al lado del turismo de Semana Santa. El PRI, cuyos códigos antaño dominaban en las mesas, pierde espacio en el debate, en el chisme de café. No en balde, es el PRD y su candidato, Zeferino Torreblanca, quien ganó la Presidencia Municipal de Acapulco. Y el costo se paga. Por lo menos, en el chisme de café.

468 ad