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Las mujeres, las más afectadas por la presencia militar en Barranca Bejuco

* A las indígenas que sólo hablan el idioma me’paa, los soldados les hacen preguntas en español, que ellas no entienden * Temerosas de más agresiones, demandan en una asamblea que se retire el Ejército

Maribel Gutiérrez, enviada, Barranca Bejuco (tercera parte y última) * Ante la presencia de soldados en esta comunidad de la región me’paa del municipio de Acatepec, son las mujeres las más afectadas por la violencia y el miedo, y el caso extremo fue la violación a Valentina Rosendo Cantú, de 17 años, madre de un bebé de 3 meses, quien tiene aún en el rostro las huellas de la violencia que sufrió el 16 de febrero.

Por eso, son las primeras en denunciar y pedir que el Ejército se vaya de aquí.

Ellas hablaron en una asamblea de la comunidad, el domingo 3 de marzo, cuando recibieron la visita de dirigentes de la Organización Independiente de Pueblos Mixtecos Tlapanecos, encabezados por su coordinador, Arturo Campos Herrera. Dijeron que desde que están los soldados en esta área, hace un mes, ellas viven con miedo, y más desde que que pasó lo de la joven Valentina Rosendo Cantú.

El miedo sigue: El sábado 2 de marzo, efectivos militares dispararon sus armas a cinco metros de distancia de la casa de Lucio Morales Cruz, cuando se encontraba sola su tía, que sintió el primer disparo como una agresión directa, sin ningún motivo. Aterrorizada, la señora entró a la casa y cerró la puerta.

Desde los primeros días de febrero, cuando llegó un agrupamiento del 41 Batallón de Infantería a las cercanías de Brranca Bejuco, municipio de Acatepec, las mujeres se sintieron en peligro. Viven con temor a salir de sus casas y no pueden hacer normalmente sus labores como recolectar leña, acarrear agua o lavar en el río. Y se encerraron totalmente porque no pueden salir al campo ni al río desde el 16 de febrero, cuando supieron la agresión que sufrió Valentina.

Desde el 27 de febrero, cuando la asamblea de la comunidad decidió pedir apoyo a la Organización Independiente de Pueblos Mixtecos y Tlapanecos, con sede en Ayutla, para presentar la denuncia ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos y pedir apoyo a organizaciones no gubernamentales, están al pendiente, en el centro del pueblo, con la mayoría de los hombres y los niños, esperando que alguien llegue a ayudarlos.

El domingo 3 de marzo acudieron a una asamblea de la comunidad, en la delegación que se localiza en el centro de Barranca Bejuco, para expresar su miedo y demandar que salga el Ejército de esta área. Una a una en idioma me’paa, hablaron en la asamblea, y pidieron ayuda, principalmente las mujeres adultas.

Denuncias de mujeres

Guadalupe Dircio Alfonso dijo: “Denuncio a los soldados, porque cuando las señoras salimos a traer leña, nos asustan los militares”.

Emilia Morales: “No estoy de acuerdo en que estén aquí los militares, porque nosotros (ella con su familia) sembramos del otro lado del cerro de San Marcos, y cuando están los militares no podemos salir a sembrar.

“Desde que golpearon a Valentina todas las mujeres no salimos y el trabajo en el campo está abandonado”.

María Morales Santiago: “No estamos de acuerdo en que estén los soldados, porque las mujeres de aquí nos espantamos cuando los vemos, porque no hablamos español, y no podemos defendernos si nos dicen algo porque no entendemos. Cuando vemos a los soldados nos vamos corriendo, con miedo, porque los soldados tienen armas. Toda la gente tiene miedo, y más las mujeres”.

Jóvenes y maestros

Fortino Sierra Morales, que también está en la lista de indígenas de esta comunidad acusados por el Ejército de ser encapuchados, dijo: “Queremos que salga el Ejército porque espanta a todos los niños. porque ven a los soldados con armas y como aquí estamos en el monte, no conocemos nada de eso, nunca hemos visto esas armas. Cuando ven gente armada, los niños se espantan y corren.

“Queremos que salga el Ejército porque nos espanta y viola a las mujeres.

“Queremos un gobierno que nos apoye, no queremos que nos viole y nos espante, porque nosotros somos humildes”.

Ricardo Sierra Morales lo respaldó: “Yo también quiero que se salgan los soldados, porque los niños y las señoras se espantan.

“Se espantan porque llegan picudos con las armas. Hablan puro español y nosotros no sabemos lo que dicen, por eso corremos cuando los vemos. Por eso, cuando llegan los militares ya no salimos a trabajar”.

El maestro Eloy Rea Vicario explicó: “Muchos alumnos viven lejos de la escuela. Cuando están los militares no vienen a la escuela porque tienen miedo de salir de sus casas”.

También maestro, Jesús García, dijo: “Los maestros pedimos que salga el Ejército porque todos aquí tienen miedo”.

El maestro Zenón García, habló en la asamblea: “Nos afecta que estén los soldados, porque aquí son humildes, no entienden español, y con lo sucedido (a Valentina) tienen miedo.

“Los soldados llegan a decir: ‘yo soy la ley’, pero no la cumplen, sólo vienen a perjudicar a la gente en esta comunidad. Por lo que ha pasado, es mejor que se retiren, y que se vayan a donde no hagan daño”.

En respuesta, el coordinador de la Organización Independiente de Pueblos Mixtecos Tlapanecos, Arturo Campos, indígena mixteco, manifestó en la asamblea su apoyo “para exigir que salga el Ejército de toda la zona indígena porque en nada beneficia a la gente, al contrario, perdemos días de trabajo porque no podemos salir al campo”.

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