Acusan a preventivos de exceso de fuerza y abusos en una detención

* Los detenidos me atacaron, rompiéndome la camisola, informa una agente que acudió al llamado de auxilio

Alfredo Mondragón * Agentes de la Policía Preventiva, al mando del comandante Samuel Tacuba Vargas, golpearon “excesivamente” a tres jóvenes la noche del miércoles en la colonia Los Lirios y les causaron lesiones que requieren “supervisión médica de especialistas”. Dos de los arrestados, por los golpes causados con los rifles AR15 están a punto de perder un ojo cada uno.

A pesar de ello, los tres están presos y a disposición del Ministerio Público de Renacimiento, acusados de resistencia de particulares, insultos a la autoridad, allanamiento de morada, intento de homicidio y amenazas en agravio de vecinos que aún no comparecen.

El dictamen médico de Servicios Periciales de la Procuraduría, a cargo de Gregorio Apreza, urgió al agente del MP a enviar a los detenidos ante médicos debido a que las lesiones que presentan en los ojos “requieren atención de especialistas, o puede haber pérdida de córneas”.

Luego de 16 horas de detención, el abogado José Sánchez Sánchez tomó la defensa de los acusados y aseguró que tras un análisis de la averiguación previa “nos dimos cuenta que fabricaron todos los delitos y les sembraron dos cuchillos para justificar los excesivos golpes que les dieron; dos están a punto de perder un ojo porque los golpearon con los AR15”.

José Sánchez acusó: “siguen cometiendo abusos de autoridad contra la ciudadanía, y quiero decirte que en esta administración ni un solo policía ha sido sancionado por abusos de autoridad; están impunes”.

El abogado adelantó que presentará una demanda penal y una queja ante la Coordinación Regional de Defensa de los Derechos Humanos contra el comandante Samuel Tacuba Vargas y los agentes Ana Luisa Zúñiga Palma, Mario Hilario Guadalupe, Jorge Camacho Díaz, Heladio Hernández Cruz y Sabás Palacios García, de la patrulla 047, por los delitos de abuso de autoridad, exceso de la fuerza pública y lesiones.

José Sánchez explicó que sus defendidos fueron detenidos porque han tenido “problemas juveniles” con David Mendiola Hernández, de 17 años, cuya madre, Hilda Hernández Ayala, “dio dinero a los policías para que detuvieran a mis clientes y los golpearan salvajemente”.

Los detenidos, entrevistados ayer en los separos de la Policía Judicial del Estado (PJE) de Renacimiento, dijeron que iban caminando por la calle principal de la colonia, luego de asistir a una fiesta de 40 días de nacida de una bebé, cuando de pronto los policías de la patrulla 047, “sin decirnos nada, nos detuvieron, esposaron y nos empezaron a golpear arriba de la patrulla”.

La señora Rufina Matilde Abarca, madre de Oliver, confirmó que los policías llegaron y, sin mediar palabra, “los empezaron a golpear, les caían como zopilotes de tres contra uno; yo les pedía que no los golpearan y un preventivo me dio un cachazo en la cabeza. Los vecinos, les gritaban que ya nos los golpearan; ¿usted cree que si mis hijos fueran delincuentes los vecinos pedirían por ellos?

El agente del Ministerio Público (MP), Cristino Ruiz Guzmán, constató que el detenido Ramiro Manzano Luna, de 31 años de edad –quien quedó inconsciente y a quien le metieron el cañón del rifle en la boca–, tenía hemorragias en el ojo izquierdo; moretones en el pómulo izquierdo y heridas internas en la boca; una herida de cinco centímetros en el bíceps izquierdo, moretones en el abdomen y huellas de patadas en las costillas y en la espalda.

También comprobó que César Eduardo Manzano Luna, de 27 años, presentaba hemorragias en el ojo izquierdo, golpes y moretones en ambos cachetes, abdomen, espalda, piernas y brazos. Por último, Oliver Mendoza Matilde, de 19 años, presenta fractura en el tobillo derecho.

Según el parte informativo de los policías preventivos del módulo de la colonia Los Lirios, la señora Hilda Hernández, de 43 años, solicitó auxilio con el argumento de que tres personas se habían introducido a su domicilio, ubicado en calle Juan R. Escudero de la colonia Amadeo S. Vidales, “tratando de matar con cuchillo en mano a mi hijo David Mendiola, de 17 años, y a mi hija Lorely Mendiola, de 24 años”, por lo que la agente Ana Luisa Zúñiga Palma acudió al lugar de los hechos.

Según la policía, “tres sujetos salían de la casa de la señora y me atacaron, rompiéndome la camisola; solicité auxilio a mis compañeros, que llegaron en la patrulla 047 y fueron sometidos, porque se sintieron apoyados por los vecinos, que quisieron quitarnos los detenidos a la fuerza”.

En el oficio de la puesta a disposición del MP, los agentes consignaron a los detenidos bajo los cargos de homicidio en grado de tentativa, allanamiento de morada, amenazas y resistencia de particulares, pero los civiles agraviados ayer a las 18:00 aún no declaraban ante la autoridad ministerial.