La inducción al voto de priístas, entre las irregularidades en Chilpancingo

* Pocos votantes y retraso al instalar casillas

Zacarías Cervantes, corresponsal, Chilpancingo * La apertura de las mesas receptoras del voto para la elección interna del PRI estaba prevista para las nueve de la mañana, pero la presidenta de la que debía instalarse en la sección 1268 para atender a seis secciones más, Leticia Masón Flores, no llegaba a las 10 de la mañana.

Había confusión entre el resto de los integrantes de la mesa quienes no sabían qué hacer en casos como estos. Mientras, los votantes, algunos con prisa, pedían saber si les correspondía emitir su voto allí, pero no había quién les informara.

A esta mesa, ubicada frente a la clínica del ISSSTE, acudió el gobernador a las nueve de la mañana para emitir su voto, pero al no encontrar a nadie se retiró. Más tarde, aquí mismo votó el dirigente estatal del PRI, Juan José Castro Justo.

Lo ocurrido en esta casilla se repetía en las demás. En la mayoría, la apertura de las mesas se normalizó casi a las 11 de la mañana, pero la confusión de los priístas continúo durante toda la jornada por la falta de información previa sobre la ubicación de las mesas.

Las irregularidades más frecuentes de la jornada en la que se eligió al presidente del Comité Ejecutivo Nacional del PRI, fueron la instalación tarde de las casillas, la poca afluencia de votantes, la inducción al voto, la confusión de los votantes con respecto a la ubicación de la casilla en la que deberían de emitir su voto y la inasistencia de los presidentes en algunas mesas receptoras.

En la mesa de la sección 1237, en donde se concentró la votación de otras seis secciones y que se ubicó en la calle Zapata esquina con Madero en el centro de la capital, también se abrió casi a las 10 de la mañana y su presidente no llegó por lo que el cargo tuvo que ser improvisado por algún priísta.

En el municipio de Chilpancingo se instalaron 14 mesas receptoras, de las cuales ocho se instalaron en esta capital y seis en comunidades rurales. Las que se instalaron en esta capital, con excepción de la 1236 que se instaló en la colonia Vista Hermosa y de la 1217 de la colonia Guerrero, se abrieron después de las nueve y media de la mañana.

El priísta José Isabel Hernández Rivera quien ha votado en la sección 1226 y en esta ocasión le correspondía en la 1225 que se instaló a la Alameda Granados Maldonado, dijo que trabaja en una tienda de ropa en esta capital y que pasó a emitir su voto a las 9 y cuarto pero que como aún no estaba instalada la casilla tendría que retirarse y que ya no votaría más tarde porque no le permite el horario de su empleo.

El presidente de la Comisión Estatal para el Desarrollo del Proceso Interno de Elección del Comité Ejecutivo Nacional, Roberto Torres Aguirre reportó a las 11 y media de la mañana que la jornada se desarrollaba sólo con lo que consideraba “los incidentes menores propios de cualquier proceso electoral”, como la instalación tarde de algunas casillas, la confusión de los ciudadanos con respecto a la ubicación de su mesa receptora y rechazó que la inasistencia de los presidentes de las mesas receptoras se haya sido repetida en varias mesas, pues sólo reconoció el caso de la mesa 1268 en donde Leticia Masón Flores, la presidenta que no asistió, fue sustituida por Víctor Hugo Carbajal Cabrera.

Torre Aguirre dijo que en ningún caso se improvisó a presidentes, “los integrantes de las mesas ya saben que hacer en estos casos y están debidamente preparados para designar a un presidente si éste no llega”, explicó.

Casi al mediodía el ex aspirante a la candidatura del PRI para la alcaldía de Chilpancingo y simpatizante de la fórmula Roberto Madrazo-Elba Ester Gordillo, Víctor Martínez Toledo, fue sorprendido por reporteros cuando inducía el voto a ciudadanos que acudían a votar a la casilla 1237 ubicada a unos cuantos metros de la plaza cívica Primer Congreso de Anáhuac.

Allí, una de sus seguidoras le preguntó: “Señor ¿qué hago con la gente?”. El empresario le respondió: “Esa gente no va a votar aquí, llévatela a otra casilla en la camioneta”. Uno de los reporteros presentes le preguntó: “¿Es la operación acarreo?”. Entre bromas, Martínez Toledo le respondió que “sí, estamos pagando 10 pesos por voto”.

Antes, Martínez Toledo fue visto por el fotógrafo Eric Chavelas cerca de esa misma urna, dando indicaciones a un ciudadano sobre por cual fórmula votar.