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Jesús Araujo define al PRI como un partido de mafias y cúpulas caciquiles

* Se manifiesta contra “el uso de la violencia represiva” en el próximo proceso electoral “que tradicionalmente la ha manejado el PRI con fuerzas parapoliciacas o policiacas”

Aurelio Peláez * Jesús Araujo Hernández dice de entrada no tener ningún interés “por dedicarle algún juicio” al PRI, partido al que “dejé totalmente desde el 2000, eso es historia”. Pero el nuevo presidente en el estado de Convergencia por la Democracia no se resiste a definir a su ex partido como un “partido de mafias”, donde “mandan las cúpulas caciquiles” y que se encuentra en “un profundo proceso de desintegración y resquebrajamiento”.

En entrevista en la Casa de Campaña del candidato a la presidencia municipal por Convergencia por la Democracia, Luis Walton Aburto, Araujo, quien fuera presidente del Tribunal Superior de Justicia durante los gobiernos de Rubén Figueroa Figueroa y Rubén Figueroa Alcocer, y dirigente estudiantil en los años setentas afirma que la nueva organización de la que asumió la dirigencia se convertirá en un actor político en la entidad.

Los priístas, metidos en su controversia

–¿Cómo ve ahora al PRI?

–Yo estoy preocupado por las tareas políticas, a los que yo estoy dedicado, que es el partido Convergencia por la Democracia. No tengo ya interés por dedicarle algún juicio. Habrá en su momento algunas opiniones, porque así lo reclame la realidad de la participación política de todos los partidos, pero como un testigo de su actividad interna yo realmente estoy muy lejos.

Araujo Hernández afirma sin embargo ver al PRI en “un profundo proceso de desintegración y resquebrajamiento”.

–¿Como enemigo para Convergencia?

–No lo creo. Lo que se trata es de que las mejores personas, los mejores aspirantes, los guerrerenses más significados, son los que deben de tener el apoyo de los partidos políticos. Aquellos (los priístas) están metidos en su controversia.

–¿Es ahora un partido de caciques?

–Yo caractericé así mucho tiempo atrás. Yo lo califiqué como un partido de mafias, de coyunturas, de poder superior, que no era exactamente el anhelo popular. Por eso falló, y por eso le pegamos los mexicanos el 2 de julio pasado.

–¿Que hay que hacer para ganarle al PRI?

–Esa es una tarea política que obedece a un proceso que se está iniciando. Ahí hay una serie de tareas muy complejas, desde la estructuración inclusive de los cuadros que representarán tanto a candidatos como a partidos, en cada una de las casillas, hasta el grupo de abogados que defenderá jurídicamente el voto de los acapulqueños y de los guerrerenses.

–¿Sabe cómo ganarle Araujo al PRI?

–Yo tengo alguna experiencia, yo he sido dirigente en su momento del partido (el PRI) en el Distrito Federal, no es la primera tarea a la que yo me voy a enfrentar, y ganamos, le ganamos al PAN en aquel tiempo. Entonces esto va a ser un nuevo ensayo, pero ya en mi estado.

–¿De quién es el PRI en Guerrero, de Figueroa, de René Juárez?

–Eso lo pueden explicar mejor los priístas, pero por lo que se ve ahí mandan cúpulas caciquiles que están perfectamente caracterizadas. La misma candidata a la dirigencia nacional del PRI, Beatriz Paredes, fustigó fuertemente como autócratas internos del partido tanto a Rubén Figueroa Alcocer, como al propio Angel Aguirre. Creo que ahí está una respuesta muy clara. Yo no podría aumentar más de lo que ellos mismos están diciendo, y creo que eso explica todo.

–¿Esta competencia electoral cómo la ve?

–Espero que sea en paz, que sea legal, que sea constitucional, que sea objetiva, que haya certidumbre, que haya sobre todo respeto al voto del ciudadano. Aquí está enterrado ya pero hay que estar atentos al todos los vicios a los que concurría el PRI para triunfar: el carrusel, los desayunos, las dádivas, como si fueran miserables los electores. Quiero puntualizar algo que es para mi fundamental, el derecho al voto, que es una prerrogativa de los mexicanos, fundada en el artículo 35 de la Constitución General de la República. Convoco a la ciudadanía guerrerense que no se deje influir por ese tipo de actos que pervierten y que inclusive prostituyen la conciencia civil. Para tener una mejor democracia necesitamos limpieza, para poder optar después de la democracia política, por la democracia económica, por la democracia social, por la democracia cultural, necesitamos proceder en limpio desde hoy.

Que no se trate a los guerrerenses como mendigos

Araujo, de 62 años, recuerda entonces tener “cuarenta años siendo protagonista de lucha social. En esos cuarenta años estoy convencido que la única forma de depurar el sistema es luchando con limpieza, respetando la dignidad de los guerrerenses, no tratándolos como mercenarios ni como mendigos. Los guerrerenses son hombres y mujeres dignos y así deben de tratarlos en este proceso”.

–¿El PRI se ha convertido en esta etapa en el partido de las despensas y de láminas?

–Eso inclusive hasta constituye un delito. Hay un catálogo especial de delitos electorales, que también vamos a denunciar en su momento.

–¿Hay algo que rescatar en el PRI?

–No, ya el PRI no es mi preocupación. Debe ser preocupación de las autoridades electorales, porque en el PRI como en otros partidos ineficaces, hay una inversión muy fuerte de dinero que proviene de los impuestos que contribuimos los mexicanos. Los partidos que no funcionan como entidades de interés público, que no sean sanos, deben desaparecer, y a lo mejor el PRI es candidato a ello.

Sin embargo, convocó “a los buenos priístas que se tienen que separar de esa organización a que se vengan a Convergencia por la Democracia. Aquí van a tener ideales, aquí van a tener objetivos, aquí van a tener tareas concretas que van a permitir elevar la condición social del estado”.

–¿Convergencia se va a convertir en un actor más de la vida política.

–Convergencia será un partido de la constante búsqueda del mejoramiento de la sociedad. Las actividades electorales que son en cierto modo la obligación fundamental porque lo marca el artículo 41 de la constitución, no agota la lucha política. La podría agotar, siempre y cuando la problemática que tienen en este momento estuviera resuelta y quizá ni así, porque eso abre otro capítulo de lucha social y política. La política es cíclica y vamos a seguir avanzando por mejorar esta sociedad.

–Si es cíclica ¿qué riesgo hay de regresar a un escenario de violencia política?

–Eso es lo que tenemos que evitar. Vamos a pugnar porque no sean las reyertas, ni siquiera el uso de la violencia represiva, que tradicionalmente la ha manejado el PRI, sea el que en este momento ensucie un proceso electoral. Ninguna fuerza parapoliciaca o policiaca tiene justificación alguna en el proceso electoral. Aquí las autoridades que van a realizar esta tarea, son única y exclusivamente las que se designe el Consejo Estatal Electoral.

–¿Y cómo se siente, con cuerda para esta etapa?

–Con fuerza. Como decía mi amigo don Luis Pérez Meza, el cantor del Barzon: todavía pinta el viejo.

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