Guido Rentería

Los precandidatos

(Segunda parte)

En algunos periódicos locales de Acapulco se publicó una fotografía donde aparecen Luis Walton y Max Tejeda en un evento social a beneficio de un grupo de niños desamparados; ahí los dos saludan haciendo una letra w con los tres dedos en medio de la mano.

La publicación de esta foto donde aparecen un priísta destacado con un panista distinguido, puso nerviosa a mucha gente. En respuesta, al día siguiente se publicó una foto del gobernador en reunión de “unidad” con sólo cuatro de los precandidatos priístas a la alcaldía de Acapulco, incluyendo al ganador del proceso.

Sin duda alguna, el candidato mejor posicionado en este momento es Alberto López Rosas, tiene ya muchos meses de trabajo previo y ha sabido venderle la idea a los acapulqueños de que él es igual a cualquiera de ellos; hace tres años la presencia de Zeferino Torreblanca impidió que fuera el candidato por el PRD y presionado se tuvo que hacer a un lado no de buena gana, pero se tuvo que disciplinar, él sabe que tiene muchos enemigos dentro del PRD y es probable que en los próximos meses éstos comiencen a atacar para debilitar su posición. Las encuestas lo ubican siempre en los primeros lugares. Su relación personal con el actual alcalde de Acapulco no es muy buena.

Alberto Mojica parece ser el Rey Midas de todos los precandidatos, pues ha gastado en publicidad una cantidad impresionante de dinero, aunque también la ha aprovechado para publicitar su negocio y así podrá justificarse y decir que no ha rebasado los topes de precampaña que se había fijado inicialmente el PRD. Por esto ya ha recibido algunos extrañamientos de los propios perredistas quienes lo acusan de que “alguien” le está dando financiamiento económico, en el pasado proceso electoral tuvo suerte de que se cayera la coalición PRD-PAN, gracias a esto pudo llegar a la diputación local.

Si la coalición hubiera funcionado no estaría en el Congreso. Por su intensa campaña de publicidad, los acapulqueños ya lo conocen y lo ubican, aunque esto no quiere decir que forzosamente vayan a votar por él. A nadie se le olvida que fue director de Turismo en la época del priísta Rogelio de la O Almazán y ahora es un flamante neoperredista.

Hasta ahora en su actuación en puestos públicos no hay nada rescatable de lo que pueda presumir, en el sentido de haber proporcionado una aportación valiosa para el municipio o para el estado.

Cárlos Alvarez Reyes, ex presidente del Frente Cívico de Acapulco y tesorero municipal con licencia, sin duda alguna, uno de los mejores precandidatos por su preparación técnica y por su brillante actuación en la Tesorería Municipal, sin embargo, le ha faltado mayor desarrollo político y le pesan mucho las acusaciones en su contra que lo señalan como el delfín de Zeferino Torreblanca Galindo. Sus probabilidades de llegar son pocas, él sabe y es probable que sea un buen diputado local en la próxima legislatura, tal vez dentro de tres años se le vuelva a presentar una buena oportunidad.

Benjamín Sandoval Melo, destacado maestro universitario con gran conocimiento sobre cuestiones turísticas, aunque ha demostrado interés, no ha realizado mucho activismo político por conseguir la candidatura a la Presidencia Municipal por su partido. Muchos dicen que antes de que concluya el proceso de selección de los precandidatos declinará a favor de uno de ellos para darle fuerza. Podría ser un buen funcionario para el próximo gobierno municipal.

David Augusto Sotelo, actual diputado federal quien tuvo el acierto de cabildear ante el Comité Ejecutivo Nacional del PRD y hacer amigos, sus intensas participaciones en la tribuna del Congreso federal hicieron que los reflectores lo alumbraran, sin embargo, a nivel local ha participado muy poco, lo que le resta muchas posibilidades de poder sobrevivir a la encuesta, aunque es probable que se alíe con alguno de los grupos que participan en esta lucha.

A pesar de que los perredistas piensan volver a ganar el municipio de Acapulco, esta vez les costará mucho trabajo poder lograrlo, la gran división que existe entre las tribus perredistas dificultará que puedan trabajar juntos para lograr esta meta.

El PRD nacional intentará echar toda la carne al asador pero los perredistas locales defenderán sus pequeños cotos de poder y vendrá la debacle para este partido ya débil de por sí.

Prueba de ello es el ajuste de cuentas que le aplicaron a Rosario Herrera para sacarla de la jugada y parece ser que el próximo en la lista será René Lobato quien no ha sabido hacer un buen papel para unificar a su partido. En estos momentos esta más preocupado por amarrar una candidatura o sobrevivir a los ataques de sus enemigos del PRD.

Es posible que en cualquier momento haga su aparición en el escenario político local Félix Salgado Macedonio y se dedique atacar a uno de los precandidatos que es su enemigo. El sable que su opinión pesa y puede causar conflictos haciendo ruido en este proceso de elección interna del PRD.