Ingresa a la Academia Mexicana de la Lengua el sinaloense Elmer Mendoza

Jorge Ricardo Nicolás / Agencia Reforma

Ciudad de México

Elmer Mendoza, el contador de historias salpicadas de personajes del crimen organizado, de políticos corruptos, de hombres tramposos y de mujeres hermosas, ingresó formalmente a la Academia Mexicana de la Lengua (AML).
Lo hizo con un discurso en el que reivindicó el habla popular. “Ándese paseando”, fue la frase que repitió, que se repite en sus seis novelas, para demostrar la emoción y la preocupación de ser ahora miembro de la AML.
“Me gusta contar historias de cierta manera: caótica quizá, incómoda quizá, pero viva; dejar que las palabras lluevan sobre la línea y que escurran, ensucien, limpien u oscurezcan la página, la pantalla o el sueño”, afirmó.
Después, el autor de Balas de plata hizo un recuento de los principios que han marcado su trayectoria literaria: superar a James Joyce, escribir la línea que jamás nadie haya escrito, tener voluntad de estilo, ver la escritura como un trabajo cotidiano y tomar al toro por los cuernos.
“Tomar al toro por los cuernos es tomar la escritura a pesar de todo”, precisó.
A la ceremonia de ingreso, realizada en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes, asistieron todos los miembros de la AML y la sesión fue presidida por su presidente, Jaime Labastida.
La vida de un escritor es una escalinata donde los peldaños han sido construidos por otros. “Estar allí, y hay que abrir bien los ojos, porque unos los han puesto para subir y otros para resbalar”, dijo.
El discurso de Mendoza fue respondido por el director adjunto de la Academia, Felipe Garrido, quien valoró también la introducción del habla popular, la del Norte, en la obra literaria. “A la lengua la hacen no las academias sino los hablantes”.