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Detiene la PJ en Costa Chica al agente que mató al cónsul Philippe Delmotte

* El director de la corporación, Ricardo Leonel Coronel, lo presenta a la prensa * Fueron disparos accidentales, dice el detenido

Alfredo Mondragón * El policía Auxiliar del Estado (PAE) Bulmaro Loreto Olayo, que el 1 de enero mató de dos balazos al cónsul de Francia, Philippe Delmotte Carrade, fue detenido la mañana de ayer por agentes de la Policía Judicial del Estado (PJE) en el interior de una huerta en San José de las Palmas, municipio de Cuautepec, en la región de la Costa Chica.

La detención del ex militar ocurrió a las 8 de la mañana y corrió a cargo del comandante de la PJE en la colonia Zapata, Mario Cruz Gallardo y un grupo de agentes, en cumplimiento de una orden de aprehensión dictada por la juez cuarto de lo penal, mediante el oficio número 1, de fecha 4 de enero, informó en conferencia de prensa ayer por la tarde, el director de la corporación, Ricardo Leonel Coronel.

Entrevistado en los separos de la PJE del sector central, Loreto Olayo, de 37 años de edad, negó haber ingerido bebidas embriagantes con su compañero Vidal Ramírez Valverde el día los hechos, e indicó que la muerte del empresario fue accidental porque Delmotte Carrade había tenido un desencuentro con el capitán de meseros de su restaurante y luego arremetió en su contra e intentó desarmarlo. El francés “estaba borracho y drogado”, dijo.

El ex militar reconoció haber trabajado con el extinto cónsul de Francia desde hacía nueve meses, y que la pistola calibre .38 especial, que portaba durante el incidente, era “de cargo”, porque él era agente de la Policía Auxiliar del Estado (PAE).

También señaló que Delmotte Carrade, trataba “muy mal” al personal. “Era muy déspota, muy culero; él me dijo que nosotros los mexicanos somos una bola de mierdas, muertos de hambre; que él en su país es un poderoso”, dijo.

El policía homicida explicó que en la madrugada del primero de enero, el cónsul de Francia había “salido mal” con el capitán de meseros, Adolfo de los Santos Reyes. “Entonces llegó enojado, tomado, drogado, hasta la puerta principal, donde yo estaba cuidando, y me cacheteó. Me di la vuelta; él me quitó la pistola; me dijo que me iba a matar; forcejeamos y disparé accidentalmente. Fue un accidente”, relató.

Tras haber matado al cónsul de Francia, Loreto Olayo huyó a pie hacia la “sierra por el monte” de la colonia Jardín Azteca, dijo. Negó haber tomado bebidas alcohólicas o droga alguna la madrugada del primero de enero, porque “no nos regalaba ni un refresco; no estaba borracho, inclusive me pueden hacer el antidoping; ni siquiera fumo cigarros”.

Luego reveló que al haber laborado como agente de seguridad del hotel del cónsul, se percataba que éste “se metía cocaína; siempre nos trataba mal, incluso anteriormente ya tiene tres averiguaciones por otros de seguridad que los quiso matar, pero no procedieron porque decía que era muy poderoso. Trataba muy mal al personal, era muy déspota, muy culero, los corría como correr a un perro. Me quedó a deber toda mi quincena; esa noche fui a trabajar para ver si me pagaba, porque quería comprarle algo a mis hijos”.

Según la primera versión del crimen, Delmotte Carrade fue asesinado de dos balazos calibre .38 especial la madrugada del Año Nuevo en el patio de su hotel Hacienda Vayma Resort, ubicado en Pie de la Cuesta, por el agente de seguridad Loreto Olayo, porque lo reprendió por haberlo sorprendido cuando ingería bebidas embriagantes en horas de labores, junto con el policía Ramírez Valverde, que nada hizo por detenerlo.

El cónsul francés recibió dos balazos, uno en la tetilla izquierda y otro en el hombro a la altura de la clavícula izquierda, aproximadamente a las 2:30 de la madrugada del primero de enero, y fue trasladado herido por personal del hotel a la Unidad de Medicina Familiar número 9 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), ubicada en la avenida Cuauhtémoc, donde fue atendido por el médico de guardia Mario Vázquez Salazar. Pero falleció a las 4:00 de la mañana, víctima de hemorragia interna.

El dos de enero, el director general de la Policía de Hoteles y Empresas, dependendiente de Secretaria de Seguridad Pública del gobierno del estado, Juan Manzo Orañegi, mediante un comunicado de prensa intentó deslindar a la corporación a su cargo del asesinato del cónsul de Francia e informó que el homicida Loreto Olayo había causado el 16 de junio del 2001 por abandono de empleo y que su cómplice “nunca formó parte” de la Policía Auxiliar del Estado.

Manzo Orañegi manifestó su disposición de “facilitar toda la información que se requiera en las investigaciones del caso a fin de aprehender a los responsables”.

El agente de seguridad privada Bulmaro Loreto Olayo, de 27 años de edad, originario de Cuautepec, Guerrero, en la región de la Costa Chica, fue soldado durante cinco años en el Ejército, adscrito al 56 Batallón de Infantería, con sede en la Novena Región Militar en Cumbres de Llano Largo, con la matrícula 3407112.

Loreto Olayo tiene su domicilio en avenida Cerezos número 3, de la colonia Jardín Palmas, y es hijo de los campesinos Antelmo Loreto Chino y Julia Olayo Rosario. Nació el 27 de enero de 1964 y sólo terminó la secundaria en la escuela técnica número 66 con un promedio de seis de calificación.

El agente cómplice –que nada hizo por detenerlo–, Vidal Ramírez Valverde, era su compadre y vecino, pues vivía en la misma colonia y calle, pero en la casa marcada con el número 2. Ambos fueron contratados por Delmotte Carrade por medio de la agencia de colocaciones Man Power, ubicada en Plaza Cuauhtémoc, propiedad del contador público Isidro Navarrete.

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