Repunta la inseguridad en Chilpancingo pese a la presencia de la Policía Federal

*Da su testimonio un ciudadano secuestrado de su propia casa por hombres armados. No denuncia debido a la desconfianza en las autoridades policiales, dice. Aseguran los empresarios de la Canaco que tienen conocimiento de al menos 13 secuestros en lo que va del año. Han disminuido los efectivos de seguridad en la capital, informa la Coparmex

Zacarías Cervantes

Chilpancingo

A las 6 de la tarde del lunes 2 de junio, Jorge estaba parado en la puerta de su casa, cuando tres hombres con pistolas llegaron de improviso, uno de ellos lo empujó hacia dentro y los tres desconocidos entraron a su casa en tropel, lo pusieron contra la pared mientras se encapucharon. Después de que cerraron la puerta por dentro, apuntándoles con sus armas juntaron a toda su familia.
A todos los metieron en la cocina, en donde los sometieron. Uno de los delincuentes se quedó parado en la puerta apuntándoles con su pistola, mientras que los otros dos comenzaron el saqueo de todo lo que había de valor.
Jorge pensó que era un simple robo, pero estaba equivocado. Los hombres armados, además de que se llevaron alhajas, dinero en efectivo, celulares, computadoras y algunos aparatos eléctricos, también se lo llevaron a él secuestrado.
Afuera de su casa los esperaba una camioneta del servicio mixto de transporte público, con otro hombre al volante y, un poco más retirado, cerca de la esquina, había un Tiida color arena. De ambos vehículos Jorge no alcanzó a observar mayores características. A él lo subieron violentamente al Tiida custodiado por dos de los delincuentes y el tercero abordó la camioneta Mixta en la que se fue junto con el cuarto hombre que estaba al volante.
Cinco días después, su familia alcanzó a reunir un millón y medio de pesos de los 3 que le pidieron por su libertad.
Jorge narró su testimonio al reportero después del mediodía del 11 de junio, el mismo día en que dos hombres armados secuestraron al empresario hotelero Rigoberto Payán Mejía y después de una conferencia de prensa en la que un grupo de empresarios encabezados por el ex presidente de la Cámara Nacional de Comercio (Canaco), Pioquinto Damián Huato y el ex síndico municipal y también empresario, Víctor Manuel Martínez Toledo, denunciaron el incremento de la violencia y la delincuencia en la capital y acusaron que existen vínculos de la Policía Federal con el crimen organizado.
Jorge, apenas tenía cuatro días de que había sido liberado y dijo que no presentó denuncia por temor, pues sospecha que quienes lo secuestraron tenían contacto con elementos de alguna corporación policiaca, “uno de ellos se comunicaba con alguien, vía radio, por medio de claves, y otro habló de que ya habían pasado una patrulla sin problemas”.
Además, dijo que lo amenazaron: “ya ves, dimos con tu casa sin problemas, conocemos a cada uno de tu familia, tenemos fotos de todos ellos y tú no quieres que les pase nada, ¿verdad?”
El día que narró su caso, (el 11 de junio), Jorge anunció que abandonaría la ciudad junto con su familia. Dijo que se iría a otro estado en donde tiene familiares. El lunes 16 de junio, al pasar cerca de la casa de donde fue secuestrado la tarde del 2 de junio, se alcanzó a leer un letrero en la fachada de la segunda planta. Con letras rojas decía: “Se vende o se renta”, y luego el número celular al que los interesados se pueden comunicar.
El testimonio de Jorge es un ejemplo de la violencia que se ha incrementado en los últimos dos meses en Chilpancingo, sin que nadie haga nada por impedirlo.
El ex presidente de la Canaco, Pioquinto Damián Huato, quien ha encabezado la inconformidad de su sector en contra de la inseguridad que se vive en la capital, informó que los empresarios tienen conocimiento que sólo en Chilpancingo se cometieron en lo que va del año 13 secuestros y que la mayoría de ellos no fueron denunciados ante la Procuraduría de Justicia del estado, por lo que no trascendieron a la opinión pública.
Entrevistado este 19 de junio, declaró que se había pensado que a partir del 1 de marzo cuando la Policía Federal se hizo cargo de la seguridad en la capital, habían disminuido los delitos de alto impacto, como el secuestro, la extorsión y el cobro de derecho de piso por parte de la delincuencia organizada y que se habían aumentado los de bajo impacto como asaltos y robos a casas habitación.
Sin embargo, añadió que a cuatro meses de que la Policía Federal está a cargo de la seguridad, se han incrementado casi al doble los secuestros, extorsiones, cobro de derecho de piso y asaltos, “se llegó al extremo de que los delincuentes agarraban cuadras o calles extorsionando a los comerciantes en serie, con toda impunidad”.
Por su parte, el presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), Jaime Nava Romero, informó el 17 de junio que de los aproximadamente 500 efectivos de la Policía Federal que se hicieron cargo de la seguridad a partir del 1 de marzo, solamente 100 permanecen en Chilpancingo.
Al respecto, comerciantes del centro de la ciudad, denunciaron que son precisamente los policías federales que se quedaron los que han comenzado a cometer “todo tipo de desmadres, sin control alguno, sin que podamos acudir con nadie puesto que ellos son enviados de la ciudad de México y parece que aquí no tienen jefes y actúan con toda impunidad”, denunció un comerciante mueblero.
Consultados por la situación de violencia, los comerciantes denunciaron, asimismo, que, simultáneamente, a partir de la semana pasada la banda criminal que llegó a hacerse cargo de la plaza, “aumentó al doble la cuota” y se quejó que nadie, ni el gobierno federal, estatal o municipal, se hace cargo de garantizar la seguridad al sector de comerciantes, que son los que más están resultando afectados con el aumento de la delincuencia.
“Al contrario, pareciera que las autoridades le están dando una cuota de poder al crimen organizado y por eso actúan con total impunidad. Si es así que nos digan, para que ya no paguemos impuestos y mejor pagamos la cuota a los delincuentes, pero no podemos estar pagando doble”, dijo el mismo mueblero.
Otro comerciante que vende ropa, denunció que el problema es que “ahorita ya no sabemos quién es el responsable de la ciudad; si el gobierno federal, estatal o municipal, no sabemos a quién recurrir, tal pareciera que vivimos en tierra de nadie y en la que sólo vale la ley de la selva”.
Explicó que, por ejemplo, el martes 17 de junio, a las 10:30 de la noche, tres jóvenes fueron atacados a navajazos en la calle Emiliano Zapata, cerca del centro de la ciudad, por hombres que también llevaban armas de fuego.
“Los jóvenes gritaban pidiendo auxilio, pero ninguna corporación policiaca llegó a brindarles ayuda”. Aseguró que uno de los lesionados se encuentra grave en el hospital Raymundo Abarca Alarcón.
Mientras tanto, la Procuraduría General de Justicia del Estado, continúa con la tónica de no proporcionar datos del número de los delitos que se cometen, principalmente el de secuestro.
El miércoles 18 de junio, el procurador de Justicia Iñaki Blanco Cabrera, sólo informó que los resultados en materia de combate al delito de secuestro que ha tenido la Fiscalía Especializada en la Investigación y Combate a dicho ilícito, son: la detención de 353 personas de enero de 2013 a la fecha, así como la desarticulación de 57 bandas de secuestradores y el rescate de 170 víctimas durante la misma temporalidad.
“Cabe destacar, que durante el 2013 se resolvieron 135 casos de secuestro y 112 en lo que va de 2014, haciendo un total de 247 secuestros resueltos, cifra que no necesariamente guarda correspondencia (con) las víctimas liberadas, toda vez que dentro de las investigaciones se ha logrado establecer la participación de los probables responsables en más hechos delictivos, algunos de los cuales no han sido denunciados, empero se tiene acreditado que sujetos u organizaciones participaron en los hechos”, informó el procurador en conferencia de prensa en Acapulco.