A petición de regidores, cancela Tránsito cien infracciones por más de 60 mil pesos

* Tres ediles del PRI y uno del PRD, implicados, dice

Jorge Nava * En un solo día –el 28 de noviembre del año pasado– regidores de la comuna solicitaron y obtuvieron la cancelación de un centenar de boletas de infracción emitidas por la Dirección de Tránsito, que, sumadas a 9 canceladas por el titular de la dependencia y 5 que no procedieron, equivalieron a 63 mil 289.45 pesos, que no ingresaron a las finanzas municipales, denunció el presidente de Autotransportes Coordinados de Acapulco, Porfirio Alvarado Romero.

En copias de documentos oficiales, que el dirigente transportista distribuyó entre reporteros durante una conferencia de prensa, consta que entre los implicados, el primer lugar lo ocupa el edil perredista Javier Secundino Sánchez, con 61 peticiones; el segundo, con 25, el priísta Julio César Bello Vargas; le siguen el también regidor por el PRI, Francisco Villa Pérez, con 9; tras él está el propio director de la dependencia, Salvador Melesio Montiel, con igual número de cancelaciones, y el último lugar lo ocupó el regidor del PRI, Raúl Ramírez Gallardo, con cuatro.

Así, el número de boletas canceladas asciende a 108, 99 de las cuales lo fueron por petición de los ediles.

El transportista consideró que esa actitud de los regidores no resuelve los problemas del municipio, sino que los empeora.

Hizo énfasis en que la autoridad municipal tolera la corrupción de los agentes que piden dinero a los choferes del transporte público con el fin de no sancionarlos, en lugar de aplicar el Reglamento con “todo el rigor” de la ley.

Por otra parte, el transportista aprovechó para advertir que si el secretario general de la Unión de Choferes del Valle de la Sabana, Eleazar Hernández Camacho, lleva a cabo la protesta que tiene pensada para el 15 de este mes, para exigir concesiones, no dudará en presentarse con abogados de su organización para demandarlo ante el Ministerio Público por daños y perjuicios, porque afectará a terceras personas, y más en una temporada “pésima”.

Estas movilizaciones, consideró Alvarado Romero, ocasionan pérdidas a la economía del puerto, pues deterioran su imagen.

De por sí hay poco turismo, dijo.