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El ex guerrillero Ramón Campaña no se arrepintió de su lucha, dicen en el funeral

* Recuerdan la trayectoria del fundador de las FRAP

Teresa de la Cruz, corresponsal, Chilpancingo * “La relación con Ramón no era fácil, él era, como una biznaga, por fuera se protegía de una gran coraza, pero quien llegaba al centro encontraba materia prima para producir interminables relaciones de amistad”, dijo ayer durante el sepelio del ex guerrillero su cuñada, Esperanza Hernández Arciga.

Cerca de las 11 de la mañana de este martes 23, seguido de un contingente de familiares y amigos, el cuerpo del ex integrante de las Fuerzas Revolucionarias Armadas del Pueblo, Ramón Campaña López, partió de la casa de su hermano Alfredo Campaña hacia el Panteón Central de esta capital.

Ya en el panteón casi al medio día los familiares rodearon el cuerpo de quien durante su juventud fue disidente de la Federación Estudiantil de Guadalajara así como uno de los fundadores de las FRAP y que murió a los 67 años la tarde del sábado a consecuencia de un infarto.

Ahí mientras su esposa y compañera dentro de las FRAP, Trinidad Cueva Torres no separaba la mirada de Ramón Campaña López dentro del ataúd de madera, la cuñada del ex guerrillero, Esperanza Hernández Arciga, dio las palabras del último adiós aunque destacó que “no se puede perder a alguien que hemos querido y de quien recibimos grandes lecciones de vida y mucho menos si esa persona es Ramón”.

Aunque indicó Hernández Arciga que “la relación con Ramón no era fácil, ya que él era como una biznaga de las que crecen en las zonas desérticas debido a que por fuera se protegía de una gran coraza cubierta de espinas necesaria para soportar las peores adversidades, pero quien sabía llegar al centro se encontraba con un material suave, materia prima para producir interminables relaciones de amistad”.

Puntualizó Hernández Arciga lo que “nos queda sin duda alguna son las cosas que cada uno ganamos de él (Ramón), entre ellas la unidad familiar, el amor por los niños, así como su increíble memoria y su gran capacidad discursiva con la que recordábamos las anécdotas familiares como un cuento que deseábamos escuchar una y otra vez”.

Señaló la también esposa de Juventino Campaña, que se caracterizaba por su “su enorme facilidad para relacionarse y hacer amigos ya que junto con su esposa Trini vivieron en varios lugares en donde rápidamente se incorporaban con los  vecinos y se interesaban por sus problemas”.

Manifestó Hernández Arciga que el fundador de las FRAP quien fue beneficiado con la Ley de Amnistía en 1983 “conocía sobre medicina alternativa, el uso de yerbas, el tratamiento para cada enfermedad, mantenía un amor por la naturaleza”.

Más adelante enfatizó Hernández Arciga que fue “su capacidad de lucha y su gran preocupación por las condiciones de vida de los demás lo que lo llevó a incorporarse a la lucha armada en el México difícil de los años 70”.

Ante el grupo de personas que mantenían la mirada fija, acgregó: “Aún hoy hace unos días dijo a un reportero: no me arrepiento de lo que hice porque nuestra lucha fue justa porque queríamos el socialismo y si volviera a nacer haría las mismas cosas”.

De ahí que pidió Hernández Arciga  rendir homenaje a los compañeros que lo antecedieron en el camino y enlistó al ex militar quien fue también desaparecido,  Pablo Reichel Bauman; David López Valenzuela asesinado en la cárcel de Guadalajara en acción preparada por Miguel Nassar Haro, a los desaparecidos por la Dirección Federal de Seguridad (DFS), Orozco Guzmán Camilo y Salvador Rivera Delgadillo.

Nombró también a El Gallo (a quien sólo conocían por el sobrenombre) que murió en el enfrenamiento del kilómetro 40 en Juanacatlán, Jalisco; así como Mayoral, ex militar desaparecido, y de manera especial dijo Hernández Arciga se rinde un homenaje “a nuestro compañero Armando Campaña Meza quien fue asesinado por la Brigada Blanca y la DFS en el hospital de la zona militar después de haber caído herido en Guadalajara, Jalisco, el 19 de agosto de 1977”.

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