Ninguna cifra de la violencia en el primer informe del edil de Atoyac

 Francisco Magaña, corresponsal, Atoyac de Álvarez * En su primer informe de gobierno, el alcalde Germán Adame Bautista destacó que el suyo era un gobierno democrático y plural, que acudía ahora a rendir cuentas no sólo por obligación constitucional, sino porque es una práctica saludable.

En este municipio donde se suceden continuos hechos de violencia que causan la muerte de ciudadanos –de los cuales el alcalde no dio cifras– Adame Bautista dijo sin embargo que la sociedad sólo podrá avanzar con un desarrollo humano y profundo y equitativo en la medida que día a día se brinde mayor seguridad al ciudadano durante sus actividades cotidianas, ya que la paz y el orden público influyen directamente en el crecimiento del individuo.

Mencionó que en la consolidación democrática buscan romper prácticas de paternalismo e intereses de grupos.

Expresó que no deben desaprovechar esta oportunidad de la nueva composición política, deben de exaltar lo que les une y soslayar lo que los separa.

Dijo que no es un beneficio personal ni de grupo es un beneficio de la sociedad que espera de sus líderes y representantes políticos respuestas a sus problemas cotidianos.

Reconoce que fue un año difícil porque se conjugaron situaciones nuevas, resultado de la libertad de participación política que nunca antes se habían vivido en el municipio con otros que son producto de viejos esquemas de hacer política.

Expresó que “no es posible hablar de democracia, desarrollo y justicia, en tanto la mitad de la población municipal continúe marginada de las oportunidades que le permitan una integración plena en los procesos de la vida nacional, y no existen argumentos válidos para justificar los niveles de discriminación a que todavía están sujetas las mujeres y son inaceptables los casos de mujeres víctimas de la violencia y el maltrato”.

En la rendición de cuentas el alcalde explicó que en finanzas públicas la demanda social resulta imposible atenderse en su totalidad en el corto plazo debido a la fragilidad financiera y a la capacidad de pago de la población, ya que los ingresos propios municipales fueron de 2 millones 382 mil 100 pesos, de las participaciones el ayuntamiento sólo recibió 16 millones 986 mil 423 pesos, mientras que los egresos fueron de 17 millones 644 mil 55 pesos y por gastos de operación 1 millón 752 mil 315 pesos y por concepto de servicios generales 3 millones 415 mil 930 pesos.

Dijo que el gasto de obra publica ascendió a 16 millones 93 mil 414 pesos provenientes del fondo para la infraestructura social municipal y en el programa de seguridad publica se erogaron 12 millones 65 mil 317 pesos destacando que a los 97 policías se les incrementó el sueldo de mil 600 a mil 800 pesos quincenales.

Una de las mayores demandas de los atoyaquenses –dijo– por fin se está haciendo realidad con el respaldo y la fortaleza del gobernador y mencionó que se logró una inversión directa estatal en el encauzamiento del arroyo Cuitero y la construcción del boulevard la Y-Atoyac, así como la rehabilitación de la carretera Atoyac-Paraíso, las cuales generan impactos económicos y sociales en el municipio.

En asistencia social con la unidad especializada para la asistencia y prevención a víctimas de violencia intrafamiliar se abrieron 202 expedientes y se efectuaron 202 inspecciones domiciliarias, y orientaron 415 asuntos declarados al Ministerio Público 14 y el médico legista suministró 40 dictámenes.

Un grupo de ocho mujeres de la Asociación de Colonias y Pueblos del Estado de Guerrero de manera tímida en la parte final de las filas –en la que había casi 400 invitados– intentaron manifestarse, pero después de que les dieron despensas desistieron y se retiraron.

En el acto participó en representación del gobernador René Juárez Cisneros, titular de la Secretaría de la Mujer, Sandra Belkis Ocampo Hernández. Y en representación del Congreso del Estado asistió el diputado local, Elías Salomón Radilla. También acudieron a la convocatoria el presidente de Tecpan de Galeana, Jesús Orbe Torres y el director del Fibazi, Alejandro Bravo Abarca.