Campañas más cortas, menos caras y más vigilancia a partidos, temas de consenso

* Viable, la reforma electoral: Carlos Ugalde

Aurelio Peláez * El nuevo presidente consejero del Instituto Federal Electoral (IFE), Luis Carlos Ugalde, dijo que en el tema de reformas político electorales en México hay más convergencia que en otros, como el de las reformas económica o de la política social, y esbozó temas que consideró comunes en los actores políticos, como “que las campañas duren menos tiempo, hacer las campañas menos caras, hacer que los requisitos para formar partidos políticos tengan más capacidad de garantizar la representatividad (y) tener mayores atribuciones la autoridad electoral para fiscalizar a los partidos políticos”.

El presidente del IFE dijo lo anterior al participar ayer como conferencista en la 31 Convención Nacional del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF), que se realiza en Acapulco. Ahí, a pregunta sobre acuerdos en cuanto a la reforma electoral, Luis Carlos Ugalde señaló que “yo considero que eso puede ser viable. Recordemos que ahora estamos en un esquema un poco diferente del de hace dos o tres años cuando se estaba discutiendo la refundación del Estado mexicano. El propio tema de la discusión en aquellos años, ustedes recordarán, era la reforma del Estado. Yo opiné, cuando estaba de investigador, que formular un debate en estos términos lo hacen viable por su naturaleza, porque son tantos temas que ahí si empieza a generar mucho universo. Creo que acotarlo a estos cuatro o cinco puntos muy fundamentales sí puede permitirnos en el 2006 que tengamos una elección menos complicada, menos cara y de más calidad”.

IFE, institución de alta credibilidad

Los ejecutivos de finanzas recordaron que la integración del actual IFE fue impugnada por el PRD: “¿Esto resta fortaleza y credibilidad que requiere? –interrogó un asistente.

–De ninguna manera le resta credibilidad al IFE –contestó–. El IFE es la institución pública con más credibilidad que hay en México y esto es un activo no del IFE sino del país en un momento donde hay instituciones debilitadas, donde hay procesos inacabados de reforma”.

Así, contó, “la Suprema Corte de Justicia tiene una alta credibilidad y ese es uno de los principales activos del país; el IFE es otra institución que puede servir como eje de estabilidad y por lo tanto esa credibilidad no es un activo nuestro sino de la sociedad mexicana. Segundo, la elección del nuevo Consejo General del IFE estuvo sometida a un proceso de controversia sobre su procedimiento pero esa es una controversia sobre el procedimiento de elección no del IFE. Es muy importante distinguir sobre esa discusión”.

Agregó: “A mí me han preguntado de manera reiterada y yo he dicho que primero no puedo opinar sobre asuntos del Congreso (de la Unión), que es un órgano autónomo. De la misma manera que yo exigiré que nadie opine sobre nuestra propia autonomía. Segundo, es un proceso que el Congreso decidió tener hace muchos años, no es de ahora, es un procedimiento mejorable, creo yo”.

Crisis de credibilidad de partidos

Entre los comentarios hechos a Luis Carlos Ugalde, estuvo uno que señaló que la credibilidad de los partidos que va a la baja: “Efectivamente, la credibilidad de los partidos y de los políticos y de los Congresos en México y el mundo están en un nivel bajo y eso es muy preocupante. Como ustedes ven, en las encuestas de percepción y ese es un dato descriptivo, no valorativo. Ustedes observan que hasta arriba se encuentran los maestros, se encuentra el Ejército y el IFE –digamos como personas, imágenes e instituciones— son las de más alta credibilidad. Hasta abajo se encuentran los policías, el Congreso y los partidos. Ese es un hecho, es un dato”.

Preguntó: “¿Qué significa eso? Significa muchas cosas, pero lo más importante es que en un momento de cambio democrático en donde el Congreso juega ya un papel tan importante, donde los partidos juegan o deben jugar ese papel, si no cuentan con la credibilidad social eso delimitará su funcionamiento y ese es un hecho en todos los países del mundo. De manera paralela, los partidos políticos en México son partidos políticos fuertes, en el sentido de que son los canales únicos de acceso a puestos de elección popular, que tenemos en México un sistema no fragmentado en donde hay aproximadamente 3.6 partidos políticos sumando un índice que realmente mide cuáles son las fuerzas, polos reales de poder. En México tenemos 3.6 partidos aunque en realidad son 6 partidos, pero el tamaño de ellos es muy breve, por lo tanto estamos en un sistema de partido entre 3 y 4 que en mi opinión es funcional para un grado de estabilidad moderada que es el que tenemos en México”.