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Prevén daños a la salud si se instala una antena celular en Chilpancingo

* Debaten en comisión del ramo del Congreso local 

Ezequiel Flores Contreras, corresponsal, Chilpancingo * El presidente de la Comisión de Salud del Congreso local, Reyes Betancourt Linares, reconoció que en la legislación sobre la instalación de antenas de empresas de radiocomunicación “existen lagunas” que se deben cubrir para salvaguardar la salud de la población.

El legislador priísta declaró lo anterior durante una reunión en la sala José Francisco Ruiz Massieu del Congreso local entre funcionarios del gobierno estatal y federal, regidores del ayuntamiento capitalino y ciudadanos de esta ciudad que se oponen a la instalación de una antena de telefonía celular de la empresa Pegaso, que encabeza Alejandro Burillo.

En la reunión el subdirector de comunicación de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), José Luis Álvarez Ríos, defendió la instalación de la antena del grupo Pegaso dijo que se esta cuestionando la instalación de una antena que tiene una radiación de 40 watts, mientras que un foco genera de 60 a 100 watts y una plancha llega a emitir hasta 500 watts, y nadie se alarma o deja de usar focos y planchas, expresó el funcionario federal

El comentario de Alvarez Ríos provocó la inconformidad de los vecinos del Barrio de San Mateo quienes el día de ayer pidieron al alcalde capitalino, Saúl Alarcón Abarca, la clausura definitiva del proyecto de instalación de la antena de radio comunicación, obra que se hace en un lugar del tradicional barrio de esta ciudad.

Por su parte un equipo de médicos y químicos que acudieron a la convocatoria de la comisión de salud del Congreso local mencionaron que la radiación de la antena  puede contribuir al incremento de enfermedades como el Alzheimer, cáncer, irritabilidad, hipertensión y otras complicaciones potenciales en la salud.

Sin embargo reconocieron que la Organización Mundial de la Salud (OMS) aún no tiene un estudio confiable de los males que provocan en las personas los efectos de las ondas electromagnéticas.

Ante el señalamiento Betancourt Linares dijo que actualmente no se ha legislado en torno a la posible regulación de la colocación de antenas de empresas de radio comunicación, y reconoció que existen “lagunas” en la ley federal de telecomunicaciones que deben cubrirse, “si se quiere contribuir con la salvaguardar de la salud de la población”.

El presidente de la comisión de derechos humanos del poder legislativo, Rómulo Reza Hurtado, dijo que si bien la proliferación de empresas de telefonía celular representan una opción para el consumidor también puede representar una posible alteración en la salud de las personas y se sumo al rechazo de la instalación de la antena de Pegaso en el barrio de San Mateo.

Mientras que Sergio Barrera Hernández, presidente de la federación médica de Guerrero expresó que aún no se ha comprobado si la radiación generada por las antenas de telefonía celular tienen efectos nocivos en la salud, por lo que para poder tener una postura clara se tiene que delimitar bien sobre “qué marco jurídico se estaba hablando”, pues como en otros casos en la que las leyes no expresan de manera clara un asunto concreto se presta a la interpretación personal de la ley.

El regidor de ecología del Ayuntamiento de Chilpancingo, Arturo Alvarez Angli, afirmó que la postura de la comuna capitalina es “mantenerse del lado de la población” y no exponerla a sufrir alguna complicación en su salud por lo que planteo la reubicación de la antena de telefonía celular en un sitio alejado de la zona urbana.

El director de protección al ambiente de la Procuraduría de Ecología del gobierno estatal, Alderían Jiménez Varela, dijo que el grupo Pegaso deberá esperar el resultado de un estudio de impacto ambiental que de manera clara asegure que no va a causar daños en las personas para que instale sus antenas en Chilpancingo.

Tulio Manuel Pérez Calvo, miembro del  Consejo de Urbanismo del estado de Guerrero se mostró a favor de que las antenas de radio comunicación sean reubicadas en zonas alejadas de la ciudad y agregó “a lo mejor se nos enoja el señor Burillo pero sabemos que esa antena no va a ser la única, después va a venir otra en el barrio de San Antonio, en San Francisco, en las colonias populares y después en cualquier lomita, por eso debemos dejar claro que no se debe comenzar ninguna construcción hasta que no esté autorizada por las autoridades”.

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