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Los ex preventivos de Teloloapan fueron cesados por faltas graves: Flores Salgado

 Oracio Lagunas Ramírez, Corresponsal, Iguala * La indisciplina, faltas graves al reglamento, pendientes con la autoridad judicial y motivos familiares fueron las causas de la salida de los ex policías de Teloloapan que ahora piden la destitución del director de Seguridad Pública, Demetrio Montes.

“A estos policías ya se le había llamado la atención en más de una ocasión por su forma de conducirse al interior de la corporación, como el ingerir bebidas alcohólicas en horas de servicio y abandonar su puesto de trabajo”, reveló Moisés Flores Salgado, secretario general del Ayuntamiento de Teloloapan.

El director de Seguridad Pública, cargo que asumió hace apenas unos meses, tras la salida de su antecesor, Pedro Zarco Lezma, refirió que el motivo fundamental por el cual se dio de baja a Miguel Serafín Juárez, fue porque el viernes de la semana anterior, no sólo se insubordinó contra su superior inmediato, Ramón Llanos Vázquez, sino que también lo golpeó y amenazó con matarlo en los días posteriores.

“Esta situación es la que llevó a su servidor a determinar su salida inmediata”, reveló el funcionario vía telefónica.

Mencionó los casos de Efrén Zarco Lezma, hijo del anterior director de Seguridad Pública, quien renunció el servicio tras la salida de su padre, pero en ese momento no expuso los supuestos casos de corrupción que ahora sostiene.

En el caso de Cristóbal Vázquez Ramos, a los pocos días del relevo en seguridad pública, “se presentó a la oficina, entregó su pistola y dijo que se retiraba del servicio y se regresaba a su natal Atoyac, después nos enteramos que la Policía Judicial del Estado lo buscaba pero desconozco por qué motivos”, añadió el funcionario.

Por su parte Flores Salgado, informó que el problema comenzó con la llegada de Zarco Lezma a la dirección de Seguridad Pública, quien trajo de la Costa Grande a casi el 90 por ciento de los policías.

“Al principio todo estaba bien, pero al paso del tiempo los familiares del director empezaron a confrontarse y nosotros como funcionarios creímos necesario resolver el problema, por lo cual se determinó el cambio de mando en esa dependencia”, dijo.

Tras la llegada del capitán retirado del Ejército, Demetrio Montes a Seguridad Pública, nos informó de probables casos de corrupción por parte de los policías y de inmediato se habló con algunos de ellos, sobre todo con aquellos que se les encontró tomando en horas de trabajo, dormidos o abandonando su puesto sin previa autorización.

Citó el caso de Miguel Serafín Juárez, quien el viernes pasado, tras recibir su orden de salir, se retiró de la comandancia pero regresó más tarde, entre 9 y 10 de la noche, el problema es que discutió con el segundo comandante y lo golpeó, y fue detenido, por lo cual fui llamado de emergencia.

El problema no paró ahí, refiere el secretario general del ayuntamiento vía telefónica, sino que además, frente a mí, amenaza a sus superiores. “Aún así lo conmino a tranquilizarse; pero con la condición que se le pague, porque ya no tenía previsto regresar a la corporación y se le liquidó conforme a la ley; pero el lunes y martes me entero que sacan sendos desplegados donde anuncian casos de corrupción al interior de seguridad pública, lo cual me sorprende aún más”.

Desde el punto de vista del funcionario, si los ahora ex policías sabían de la corrupción que imperaba en Seguridad Pública, ¿por qué hasta este momento lo dan a conocer?, ¿o será que ellos también estuvieron involucrados y ahora se quieren lavar las manos?, se pregunta Flores Salgado.

“Su despido, de Miguel Serafín, fue para evitar mayores problemas, pero no me preocupa el documento signado por siete de 70 policías, porque muchos de ellos salieron por problemas que ellos mismo ocasionaron”.

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