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No han resuelto el traslado de testigos de Jehová de Capulín Chocolate

 * Los rechazan en otros poblados de Marquelia y Azoyú porque las comunidades temen conflictos políticos o religiosos

 Ezequiel Flores Contreras, corresponsal, Chilpancingo * Este día se cumple el plazo para que los testigos de Jehová abandonen la comunidad de Capulín Chocolate, municipio de Marquelia, para evitar un enfrentamiento con los grupos católicos del poblado. Sin embargo, hasta el momento la autoridad municipal no ha conseguido un terreno para reubicar a las siete familias, informó Javier González Juárez, dirigente del PRD en ese municipio Costachiquense.

Entrevistado vía telefónica, González Juárez dijo que existe la posibilidad de que los testigos de Jehová se nieguen a salir de la comunidad de Capulín Chocolate ante la falta de un lugar en dónde vivir, de esta forma se estaría violando el acuerdo firmado entre autoridades locales, municipales y estatales el 17 de septiembre en donde los testigos de Jehová aceptan salirse del pueblo y el ayuntamiento a proporcionar un terreno para reubicarlos.

González Juárez señaló que el síndico del ayuntamiento de Marquelia, Donaciano Mayo González, informó que solicitaron permiso de las autoridades ejidales de tres comunidades para que en sus tierras se instalaran las familias desplazadas de Capulín Chocolate, pero se negaron por temor a que se repita la misma historia, es decir que se presenten conflictos religiosos o políticos.

Las comunidades que se negaron a recibir a los testigos de Jehová son dos que se ubican en la franja costera y una perteneciente al municipio de Azoyú: La Barra de Tecoanapa, Chapultepec y Carrizalillo, en esta última el comisario le dijo al alcalde de Marquelia, René González Justo, que “prefería que le mandaran una bomba a los testigos de Jehová”, expresó el dirigente perredista.

“A nosotros nos queda claro que el gobierno municipal y el estatal no están atendiendo el conflicto, hace falta voluntad para solucionar las cosas y esto podría provocar un enfrentamiento”, indicó González Juárez.

Los testigos de Jehová tienen claro que este día tienen que salir, las autoridades municipales tuvieron tiempo considerable para buscar un terreno neutral pero no lo han hecho a pesar de que existen lugares como Las Peñitas o Playa Tortuga, en donde el alcalde de Marquelia puede ofrecer un terreno a los desplazados “porque son suyas las tierras”.

El asunto es responsabilidad del gobierno municipal: Bataz

Por su parte, el subsecretario para Asuntos Religiosos de la Secretaría general de Gobierno, Javier Bataz Benítez, deslindó al gobierno del estado de la responsabilidad de solucionar el conflicto en Capulín Chocolate y aseveró que la autoridad municipal es la encargada de buscar un lugar para reubicar a los desalojados, “nosotros simplemente estamos coadyuvando para que exista respeto y tolerancia entre los grupos antagónicos”.

Bataz Benítez confió en que este día que se cumple el ultimátum para los testigos de Jehová ambos grupos den prioridad a la razón y aseveró que estarán a la expectativa de lo que suceda hoy en esa comunidad de la Costa Chica ubicada a 40 minutos de la cabecera del municipio de Marquelia.

Señaló que este conflicto tiene su origen en un problema de tipo jurídico debido a que los hermanos Martín y Prisco Bautista Santiago interpusieron una demanda en contra del comisario de Capulín Chocolate, Luciano Vázquez Nava, el secretario de la comisaría, Nicolás Clemente Valdez y del representante de bienes ejidales, Magdaleno Ramos Hernández por los delitos de allanamiento de morada, intento de robo y daños en propiedad ajena, por lo que se integró la averiguación previa ALT/SC/01/29/03.

Luego de que agentes judiciales ejecutaron la orden de aprehensión en contra de los representantes de bienes ejidales, el conflicto comenzó y ahora se involucró hasta las ideas religiosas, afirmó el funcionario estatal.

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