María de la O, Macrina Rabadán y Benita Galeana y la lucha por derechos de la mujer

 Aurelio Peláez * Tres mujeres guerrerenses son una referencia esencial en la lucha femenina por los derechos políticos y la obtención del voto en México, María de la O, Macrina Rabadán y Benita Galeana.

Macrina Rabadán (Cuetzala del Progreso, 1910-2000) fue la primera diputada federal guerrerense por el Partido Popular Socialista, en el periodo 1958-1961, partido del que fue fundadora.

Benita Galeana (San Jerónimo de Juárez (1907-1995), fue una militante comunista y un ícono de las mujeres en la izquierda en el país, por su participación en la lucha obrera y social, lo que le costó el encarcelamiento en unas 50 ocasiones.

María de la O, Nuxo, Tecpan de Galeana, 1882, tuvo una participación importante en la lucha de Juan R. Escudero, sindicalista y socialista, en Acapulco, a principios de siglo pasado, y con el jefe revolucionario Amadeo Vidales.

A 50 años de la obtención del voto por las mujeres en el país, este 17 de octubre, de estas dos guerrerenses se recuerda la lucha por la obtención de los derechos políticos de las mujeres, proceso que la misma Benita Galeana rescata en un texto autobiográfico (Benita; Galena Benita; Lince Editores; cuarta edición, 1990):

Macrina Rabadán (por Benita Galeana):

 “¿Mujeres luchadoras? ¡Uy, recuerdo que en el sexenio de López Mateos tuvimos una muy valiosa, bonita, de rebozo y pelo largo, así de chongo, bonita, muy valiosa, Macrina Rabadán, creo que fue esposa de un Arenal , ya no me acuerdo de cuál, a lo mejor de Polo, bueno yo la estimaba y que se lanza como diputada por el PPS y perdió, se lanza por Guerrero y pierde y se vuelve a lanzar y otra vez a perder. Vino y me platicó.

“- Mira Benita, que yo triunfé y mira aquí está todo, ve tú las papeletas , mira el bolón de comprobantes y oye me hicieron chanchullo.

“Entonces yo le dije de vacilada:

“-¡Para qué te metiste con el PPS? ¡No está allí el PRI que tiene una maquinaria de hacer diputados y senadores?

“Ésta, púmbale, me creyó, púmbale y púmbale, se fue a meter al PRI y allá va con Ramírez y Ramírez y Rodolfo Dorantes y Rafael Carrillo y otros, toditos del PRI, toditos del PRI, cuando antes eran de los nuestros. Ni tardos ni perezosos, que se van al PRI. Y entonces sí Macrina salió de diputada y puro abrazo y puro triunfo con López Paseos. Pero como era ella de izquierda de corazón, tuvo decisiones muy bonitas, hizo declaraciones preciosas, ella hablaba bonito que todo se le entendía, y defendió a los de Poza Rica, contra La Quina creo, y la querían sacar cuando habló allá arriba y dijo: ‘De esta tribuna no me bajan, sólo muerta, yo lucho por los trabajadores, y si me bajo de aquí es para ir a las prisiones y allí seguiré defendiendo al pueblo’, Bun, bun, bun, ta, ta, ta, vivas, vivas, aplausos, aplausos, bun,bun, bun, así con los piens en el suelo, bun, bun en la cámara, de veras qué diputada más a toda madre, qué diputada que da la pelea por el pueblo. Pero le duró poco el gusto porque a la mujer que va al poder, en las diputaciones no la dejan hacer nada, sólo decir que sí a todo, ella quería luchar, pero le dijeron, los jefes, creo que el mero jefote era Manuel Moreno Sánchez, el del Senado:

“- Nada, nada, usted aquí gana su sueldo y para sus dulces y nada más.

“De allí para el real, a Macrina le entró harta tristeza, bueno siempre, siempre la vi triste, después, nunca garbosa como ella era. Era como yo, a mí nunca me ha gustado la sujeción y a ella la mantuvieron bien sujetada para que no se les fuera a salir del huacal.

“En cambio yo nací fuera  del huacal”.

(Del prólogo firmado por Elena Poniatowska al libro Benita, escrito por Benita Galeana)

Benita Galeana Lacunza.

Es descrita por el Diccionario Biográfico Contemporáneo del Estado de Guerrero, 1940-200, como una “luchadora social”.

“Ingresó al PCM a finales de los años veinte. Contrajo matrimonio con el periodista y miembro del PCM Mario Gil, con quien compartió por 37 años sus convicciones políticas y la militancia en un partido de izquierda clandestino.

“Se educó en la lucha política y en el ejercicio de su militancia, dio muestras de entereza y solidaridad social. Fue vendedora ambulante en su estado natal y en la ciudad de México trabajó en cabaret, circunstancias que le permitieron tomar conciencia de clase y de género, convertirse en una luchadora social a favor de los derechos sociales de los humildes y los marginados le costó el encarcelamiento en más de 50 ocasiones. Sus actividades trascendieron las fronteras de México y fue invitada por Fidel Castro para que visitara Cuba”.

Maria de la O:

Nace el 11 de enero de 1882, en la población de Nuxco, municipalidad de Tecpan. “Huérfana de madre a los 11 meses y abandonada por su padre, pasa al cuidado de sus tías quienes la envían a la escuela primaria y a los 17 años se casa con Antonio Rodríguez, funcionario del poder judicial.

“Hacendosa e inteligente, convierte su trabajo de secretaria del esposo en escuela de intenso aprendizaje de cuestiones legales. Junto a él como agente del Ministerio Público y como juez de primera instancia en Acapulco, conoce las injusticias que sufre el campesino, interpretándolas bajo el ángulo del socialismo cristiano que profesa Rodríguez. Ambas circunstancias serán definitivas en su vida futura.

“A la muerte de su esposo, en 1922, toma la determinación de continuar la defensa de los campesinos pobres por su cuenta. . Se liga al Partido Obrero de los hermanos Escudero

y a pesar de lo insólito que significa en la región que una mujer participe en política y sobre todo en política de izquierda, su prestigio se extiende por toda la Costa Grande. El represivo sistema moral predominante impide a las mujeres participar abiertamente en cualquier actividad, al menos que lo desarrolle a la sombra del marido o una vez perdido éste. En cierto sentido su viudez le sirve para incorporarse a la actividad política intensa.

“Después de organizar los funerales de los hermanos Escudero, se entrevista en varias ocasiones con los Vidales  (seguidores de Amadeo Vidales) para decidir quién estaría al mando de las organizaciones escuderistas: partido, liga y cooperativa. Aunque el acuerdo recae en Baldomero, ella funge como segunda dirigente, sobre todo en Acapulco, ya (Feliciano) Radilla controla las zonas rurales”.

María de la O aporta armas al movimiento de los Vidales y da refugio a perseguidos políticos, entre ellos líderes obreros como Samuel Romero y David Flores del POA, antes de ser asesinados por pistoleros del gobernador Guevara.

Con el cardenismo ingresa al Partido Comunista, crea la Unión Fraternal de Mujeres Trabajadoras de Acapulco el 17de junio de 1937. En su programa de lucha habla dl combate a la carestía, en pro de la alfabetización de las mujeres, “colaborar con las autoridades” y “luchar contra centros de vicio, sobre todo los que están fuera de la ley”.

El 25 de febrero de 1941  como militante del PC crea el Frente Unico de Lucha, y señala a la huelga como el arma más efectiva de los trabajadores.

En el proceso electoral de 1946, María de la O y su grupo de mujeres apoyan a  a Miguel Enríquez Guzmán, “de buena fe, sanas y honestas, como todos los militantes comunistas del estado”.

Elegido Miguel Alemán como presidente María de la O  y su grupo, de siglas FPPM,  “dan la batalla al modelo mexicano de desarrollo instaurado por el alemanismo.  Integran comités electorales, lanzan candidatos cuyos triunfos no son reconocidos(resultando además perseguidos) y cuando Celestino Gasca en nombre del henriquismo promueve el levantamiento armado, en contra del gobierno, el grupo de María de la O rechaza esa línea  y en asamblea celebrada el 19 de octubre de 1952 decide mejor lanzar candidatos a diputados locales

“María de la O, decepcionada como los demás partidarios del cambio social, vuelve al trabajo político de alcances más inmediatos y locales. A veces raya en la simple actividad asistencial: escuelas, campañas de alfabetización, de difusión cultural, etcétera. Destaca, sin embargo, su intensa actividad  en la organización de los colonos  inmigrantes en las zonas  aledañas de Acapulco, que forman en terrenos invadidos, las colonias Progreso y La Laja”.

María de la O muere el 19 de junio de 1956 ( Bonapartismo y Lucha Campesina en la Costa Grande de Guerrero; Gomez Jara, Francisco; editorial posadalo de María de la O tomado de las páginas 127 a 135).