Arturo Martínez Nateras

FABRICA DE LETRAS

  6 de octubre 

 Un año exacto. Los ciudadanos sin mucho ruido decidieron confiarle su soberanía a los candidatos postulados por el PRD. En números redondos el sol azteca por primera ocasión era mayoría legal.

Nadie daba crédito. Mucho menos los candidatos –¿candidotes?–. Los candidotes eran otros. Candidotes resultamos ser los millones de estúpidos que confiamos nuestra soberanía a los candidatos postulados por el PRD.

Yo creí en López Rosas como más de 120 mil electores. En Zihuatanejo (José Azueta), en  Iguala, Coyuca de Benítez, Petatlán… la inmensa mayoría de los ciudadanos decidieron ser gobernados por los postulantes del PRD. No parecía posible. Los siete distritos de Acapulco los ganó este partido. Vacas que hubiesen sido las postuladas, como describió después un clásico de la picaresca política, obtuvieron la mayoría.

El PRI se las vio negras. Perdió la mayoría en el Congreso. El PRD no logró obetenerla a pesar de todos los pesares.

La sociedad, los ciudadanos compartíamos una sensación colectiva de fuerza, de confianza, de poder. Le habíamos dado una pinche sanción electoral a los de siempre. Pero nunca contamos ni con su astucia ni con la mediocridad de los elegidos no priístas.

¿Valió la pena?

Los electores de Acapulco, Iguala, José Azueta, Petatlán, Coyuca de Benítez, San Luis Acatlán, Malinaltepec,  Chilapa, San Jerónimo, Tlalchapa, la fiel Coahuayutla, Alcozahuca, la sempiterna Teloloapan, La Unión…

Puta madre, ni los mismos candidatos se la creían…

¿Valió la pena? Los siete diputados de Acapulco; tantos más para casi llegar a ser mayoría, sueño diluido en la última hora.

El lunes 7 de octubre despertamos como una renovada ilusión de cambio. Poderes compartidos. Congreso amitanado, la mayoría de la población gobernada por ayuntamientos de extracción y mayoría no priísta. Parecía un sueño… Salió del escenario el electorado. Pero apenas volvió al hogar el supremo soberano, y todo se fue al carajo.

El reino de las maniobras volvió a prevalecer y a despojar a la sociedad de poder, esperanzas e ilusiones. El PRD, sus legisladores no han sabido ser ni opción ni oposición. Nunca voy a entender cómo ni por qué, ni para qué fueron incapaces de construir una nueva mayoría, formular opciones de presupuesto y ley de ingresos, de gobierno del Congreso… ¿Qué necesidad de votar a favor de composiciones y funciones excluyentes y ajenas a la soberanía popular? Y las escenas de cheques raros, de acuerdos en lo oscurito pero sobre todo de incapacidad legislativa… Dios no se los va a perdonar.

No parece que haya nada nuevo bajo el sol. La Ley de Ingresos, la cuenta pública, el Presupuesto, el gobierno de la legislatura, todo fue aprobado con el voto a favor de los diputados elegidos por el pueblo inconforme. No se han iniciado ni discutido ni elaborado las leyes del régimen político democrático; no se legisla con la sociedad, no consultan, no proponen si se oponen, no figuran… La nota la obsequió Dimayuga con la ley de la vergüenza… Los legisladores para corresponder a la confianza ciudadana requieren legislar con la sociedad. Aprender a ser oposición y opción. Arrastrar el lápiz pero por encima de todo encabezar la modernización democrática del sistema electoral, político, judicial, financiero, educativo… movilizando y ofreciendo cauces al talento de un pueblo muy sabio, tan maduro para la democracia como calificado para el cambio.

¿Y los alcaldes? ¿Y los ayuntamientos? La nota la han dado los conflictos internos, las miserias de los síndicos, los cabildazos, la percepción ciudadana de la corrupción, el divisionismo, las insanas ambiciones; la opacidad, la falta de lealtad y un sinnúmero de tonterías. En Guerrero compiten los malos gobiernos contra los gobiernos mediocres y perversos. No hay innovación, no hay cambio. Es tan malo el rojo como el amarillo, el pinto como el colorado…

¿Valió la pena la ejemplar revuelta ciudadana del 6 de octubre de 2002?

Estamos a tiempo para aprender, para corregir, para asimilar las lecciones, para entender las razones de la revuelta ciudadana, para corresponderlas, para gobernar bien, para legislar con la sociedad… En julio, en las elecciones federales la suprema soberanía certificó sus mensajes. El PRD ya no obtuvo siquiera la mínima mayoría numérica que le había sido confiada.

El amanecer un año después, la víspera del 2005 no tolera desatinos. Los surianos ya no se van a contentar con poses ni discursos. De los buenos gobiernos, de Ayuntamientos innovadores, transparentes, honestos, democráticos, incluyentes; de alcaldes promotores del cambio local, estatal y federal, dependerá la respuesta ciudadana… Humildad es la palabra de orden

Si los legisladores y los ediles elegidos gracias a aquella memorable revuelta lectoral ciudadana no entienden los mensajes de las urnas, la gente les pasará en febrero del 2005 una factura costosa que probablemente no podrán pagar.

Es mejor que evalúen, afiancen aciertos, localicen equívocos y modifiquen, que se vean en el espejo de la crítica social, de la percepción ciudadana y de la autocrítica.

El 6 de octubre del 2002 vivimos y protagonizamos una jornada inolvidable. La revuelta electoral callada y ordenada fue una lección.

A ti te lo dije PRI. Entiéndelo PRD…

Fue hermoso. ¿Volveremos a vivirlo todos y en todo el estado?

Cajita de Olinalá

El 6 de octubre de 1953, hace ya 50 años quedó formalizada la reforma constitucional que otorgó el voto a las mujeres mexicanas. Faltaba la publicación oficial del cambio. Por fin el 17 de octubre apareció en el Diario Oficial el texto de los nuevos artículos.  Las mujeres son la mitad del mundo, madres de la otra mitad y constituyen el supremo poder electoral. Les propongo conmemorar y festejar con ellas y en ellas el jubileo de la ciudadanía.

Estoy muy presionado por el cierre. Acabo de regresar de Hermosillo. Me muero de ganas de escribir sobre el desarrollo. Hoy Fox y el presidente de la Ford Motors Company anunciarán en Hermosillo, Sonora, la inversión de 2 mil 800 millones de dólares en el programa Futura Ford. Ya les platicaré de la Laguna de Chapala que ha recuperado más de dos metros de agua, pero por ahora ya no puedo más…

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