Planta el gobernador a 46 alumnos en riesgo de reprobar que fueron invitados a reunirse con él en Casa Guerrero

Jacob Morales Antonio

Chilpancingo

El gobernador del estado, Ángel Aguirre Rivero, desairó a 46 estudiantes en riesgo de reprobar que habían sido invitados por la Secretaría de Educación Guerrero (SEG) a un encuentro en la residencia oficial Casa Guerrero, para estimularlos a seguir estudiando.
Por la tarde, fue difundida una fotografía por la dirección de comunicación social del estado, donde se muestra a los estudiantes sentados con mochilas y útiles escolares junto al gobernador del estado.
Los estudiantes de secundaria y primaria, de diferentes partes del estado, fueron invitados según señalaron padres de familia, para reunirse con el gobernador, pero una vez que arribaron a la puerta tres de Casa Guerrero, la mañana de ayer, los encargados de seguridad les comentaron que no había agendado ninguna actividad.
Los padres, molestos por la respuesta de los guardias de seguridad, denunciaron el hecho en los noticieros radiofónicos matutinos de la capital. Minutos después, personal de la SEG los trasladó al conjunto turístico Jacarandas, donde desayunaron.
Ahí llegó la secretaria de Educación, Silvia Romero Suárez, quien argumentó a los padres que hubo falta  decoordinación de las autoridades educativas, que no fue culpa del gobernador que los niños no fueran recibidos por él.
Como consolación, la secretaria ofreció llevar a los estudiantes con ayuda de autos particulares al museo interactivo La Avispa, les obsequió una mochila y paquetes de útiles escolares. También ofreció que el martes próximo se daría el encuentro, pero los padres reclamaron por los viáticos que ellos habían sufragados para venir a la capital, sin embargo, por la tarde fueron recibidos por el mandatario.
El señor Luis Enrique Ramírez Galicia relató que se trasladó desde antier con su hijo a Chilpancingo, en su carro particular, para poder estar con el gobernador. Dijo que gastó alrededor de mil pesos en gasolina y comidas, además durmió con el menor en una gasolinera, porque no tuvo para pagar un hotel.
Lamentó por la mañana que las autoridades “matan las ilusiones a los niños, porque vienen con la emoción de conocer en persona al gobernador del estado, y seguir adelante con sus estudios, por el bajo promedio que tienen”.