Se imponen vecinos toque de queda en Chilapa y Zitlala ante la violencia del crimen organizado

*Decomisa la Procuraduría siete vehículos, armas de fuego, cargadores, chalecos tácticos y teléfonos celulares, informa

Redacción

Tras dos días de balaceras en Chilapa, el primero entre sicarios y el segundo entre éstos y además con la Policía Estatal, en las cabeceras municipales de Chilapa y Zitlala (que se encuentra a 15 minutos en automóvil de Chilapa) se decretó un toque de queda desde el medio día de ayer de manera virtual, desde las redes sociales lo anunciaron y ya no salieron de sus casas.
Ayer la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) informó que en la víspera fueron decomisados siete vehículos, armas de fuego, cargadores, chalecos tácticos y teléfonos celulares. Además de que un menor de edad lesionado por arma de fuego fue puesto a disposición de las autoridades.
Desde las primeras horas del martes hasta las 12:00 del día hubo tiroteos entre grupos antagónicos armados que dejaron a cuatro civiles armados y dos taxistas locales muertos, según reportes de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE).
El miércoles por la noche en un nuevo enfrentamiento de más de una hora a las afueras del Ministerio Público en el distrito Judicial de Álvarez, en el centro de la ciudad, la PGJE reportó a seis civiles y un policía estatal muertos, y ayer se supo que hubo uno más.
Entre el martes y el miércoles sumaron 14 fallecidos por impactos de armas de fuego.
La noche del miércoles, las autoridades educativas comunicaron que se suspendían labores y clausuras de fin de cursos en todos los centros educativos de la región.
Ayer, al mediodía se generó una psicosis colectiva por detonaciones de armas de fuego en calles céntricas de esa ciudad y corrió el rumor de que un nuevo enfrentamiento armado se suscitaría a las 3 de la tarde en las calles de Chilapa y en la cabecera de Zitlala, entre grupos de la delincuencia organizada que se disputan la zona.
Durante el día se instalaron retenes de Fuerza Estatal y del Ejército en las afueras y en las calles céntricas en donde decomisaron una camioneta sospechosa con vidrios polarizados y abandonada en el centro.
Los negocios en toda la ciudad cerraron sus cortinas y el servicio de transporte urbano y de taxis locales suspendieron servicio, lo que generó que las calles quedaran desiertas.
La población, en general, se refugió en sus casas, decretándose un inédito toque de queda desde el mediodía. Durante el día y hasta no se registraron enfrentamientos.
En tanto, el alcalde priista de Chilapa,  Francisco Javier García González por la noche emitió un segundo comunicado en el que niega que se haya decretado un toque de queda en la cabecera.
Al mismo tiempo pidió por segundo día a la ciudadanía evitar salir de sus casas “como medida precautoria social y para facilitar los trabajos operativos de las corporaciones de seguridad”.
Llamó a valorar la información que se difunde en las redes sociales “para no dar credibilidad a todos los rumores y evitar caer en pánico o psicósis”.
“Somos un gobierno que actúa de manera responsable dentro del ámbito de nuestra competencia, la policía preventiva está dando atención a las llamadas de auxilio de la ciudadanía”.
Dijo que las estrategias de combate a la delincuencia las aplica el Ejército, la Policía Estatal y la Municipal.
“Sociedad y gobierno debemos hacer frente de manera responsable a este clima de inseguridad que está empañando los grandes atractivos turísticos y el gran bagaje tradicional y cultural de la Ciudad”, menciona.
Aseguró que con la ayuda del gobierno estatal y federal se va a superar la “crisis de seguridad, volveremos hacer una comunidad pacífica y tranquila, donde nuestros hijos puedan transitar libremente”.
“Ayúdanos, no generes pánico y haz tu denuncia anónima responsablemente”, pide.
Un día antes el alcalde llamó a los medios de comunicación a no caer en especulaciones y acusó a la agencia Proceso de perjudicar su imagen. Adjudicó los hechos de violencia a “ola de violencia que se extiende desde la capital del estado, y han empañado el clima de tranquilidad y paz social del municipio de Chilapa de Álvarez”.

Era de Chilpancingo el policía muerto en el segundo enfrentamiento de Chilapa, informan

El agente de la Policía Estatal Denis Noé Vargas Marín fue quien perdió la vida en el enfrentamiento contra sicarios la noche del miércoles en Chilapa.
La Secretaría de Seguridad Pública (SSP) informó que en el enfrentamiento hubo siete civiles muertos, entre ellos un taxista, un policía y no como lo señaló la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) que fueron seis y un agente policiaco.
Según información del Servicio Médico Forense (Semefo), Vargas Marín tenía 25 años, era de Chilpancingo y pertenecía a la Unidad de Fuerzas Especiales (UFE).
Los otros siete muertos, entre ellos un taxista, se encuentran en calidad? de desconocidos.
El miércoles por la noche ocurrió un enfrentamiento en las calles del centro de Chilapa en donde murieron siete civiles, ?entre ellos un taxista, y un policía de la Fuerza Estatal y cuatro agentes resultaron heridos y están hospitalizados. Un día antes hubo seis muertos en enfrentamientos y ejecuciones, entre ellos una mujer. (Luis Blancas /Chilpancingo).