Bloquean comuneros del municipio de Coyuca el acceso al Palacio Municipal

 * Demandan servicios de agua potable y transporte integrantes de la OCSS, Frente Popular Tierra Digna y de la Organización Comunal de San Martín Tixtlancingo * No soy rehén de nadie, dice López Rosas

 Adalberto Valle * Los comuneros de localidades cercanas a Coyuca de Benítez, que el martes pidieron una audiencia con el alcalde, Alberto López Rosas, bloquearon ayer el acceso al Palacio municipal por poco más de cuatro horas y después fueron recibidos por el presidente, quien se comprometió que en ocho días daría una respuesta a sus demandas, respecto al servicio de agua potable y transporte.

Luego de que el martes a las 13 horas, unos 40 campesinos, integrantes del Frente Popular Tierra Digna, de la Organización Comunal de San Martín Tixtlancingo y de la Organización Campesina de la Sierra del Sur, fueran al Palacio municipal en busca de un encuentro con López Rosas, al no ser recibidos por el alcalde, “por falta de tiempo en la agenda”, decidieron quedarse a dormir en las instalaciones del ayuntamiento y este miércoles, después de 30 horas de permanecer en ese lugar, intentar nuevamente hablar con el primer edil.

Los planteamientos eran que se distribuya agua potable en esos lugares, que se retribuya a los lugareños, porque según dijeron, “se traen el agua a Acapulco del manantial El Chorro”, además de que manifestaron su inconformidad por el impedimento de que el transporte que viene de la Costa Grande llegue al centro de la ciudad.

A las 9 horas de ayer, los comuneros, encabezados por Héctor Ponce Radilla, César Tapia López y Benigno Guzmán Martínez decidieron bloquear la puerta de entrada al edificio municipal, impidiendo el acceso a empleados y personas que acudieron al ayuntamiento a efectuar alguna gestoría o trámite, quienes debieron ingresar al inmueble por la parte de atrás.

La respuesta que dieron las autoridades municipales que negociaban con los inconformes, como la secretaria general, María de la Luz Núñez y el director de Gobernación municipal, Alfonso Calderón, es que serían recibidos por el alcalde el jueves 2 de octubre.

Los comuneros se negaron a levantar su manifestación e incluso ingresaron hasta la puerta de entrada que va a dar a las oficinas, pero enseguida retornaron al punto en que se encontraban y volvieron a encadenar la reja.

Cerca de las 13 horas llegaron al Palacio unos 40 policías preventivos, entre ellos unos 10 con equipo antimotines, para participar en caso de que se les requiriera.

En ese momento, el diálogo entre autoridades y manifestantes subió de tono.

“Hay libertad de manifestarse, pero no libertad de cerrar y evitar que la gente venga a hacer sus gestiones y no lo vamos a tolerar”, dijo María de la Luz Núñez.

“Tenemos un día aquí y no nos reciben”, respondió Héctor Ponce.

“El presidente puede recibirlos hasta el próximo jueves (2 de octubre)”, reiteró Núñez Ramos, mientras los policías se mantenían en alerta.

Fue entonces cuando se llegó a las acusaciones. “Se quiere reprimir como en Atoyac (de donde Núñez Ramos fue presidenta municipal).

“Hijito de Vicario”, respondía la secretaria general, mientras se retiraba de la puerta.

“Que lo diga de frente, en la cara”, reclamó Benigno Guzmán.

Después de varios intentos de diálogo, Alfonso Calderón les informó que serían recibidos en el transcurso del día por el presidente, reunión que ocurrió poco antes de las 7 de la noche y que duró alrededor de 15 minutos, según Héctor Ponce, con la propuesta de Alberto López Rosas de llegar a una solución y que se volverían a reunir el jueves 2 de octubre al medio día.

Mientras estaba bloqueado el acceso, en entrevista, Alberto López Rosas, señaló que no es “rehén de nadie”.

“Ellos pretenden ser recibidos sin audiencia, de manera arbitraria, violenta, yo no estoy para eso. Estoy gobernando con mucha tranquilidad y responsabilidad. Esas son acciones del pasado”.

–Dicen que tienen más de un mes solicitando la audiencia…

–Las doy todos los días. No me oculto. He dialogado con todos los sectores. Traen un problema de Coyuca de Benítez. He dialogado tres veces en las últimas semanas con el alcalde de Coyuca de Benítez. Hay un magnífico nivel de conversación. Son afanes protagonistas y no estoy para eso. Hay mucho trabajo.

–Piden seis minutos para entregar su petición.

–Cuando los tengamos con gusto se los damos.

–¿Se podría actuar legalmente contra quienes están bloqueando la entrada?

–Yo no parto de supuestos. Que se manifiesten. No necesito de agresiones para recibir a los ciudadanos. Pero me parece que no tienen razón de ser. Yo no uso la fuerza pública. Esa es para vigilar y contrarrestar el hampa.