Aprueban comuneros el reinicio de los estudios de factibilidad de La Parota

 * Se reúnen unos 200 campesinos en los jardines de Protur con funcionarios estatales, de la CFE, diputados y del ayuntamiento * Opositores al proyecto reclaman que era una reunión informativa y no resolutiva

 Karina Contreras * En una reunión informativa que terminó en asamblea comunal, campesinos de comunidades pertenecientes al municipio de Acapulco, aprobaron por “mayoría” la “anuencia para que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) continúe con los trabajos de campo, que van encaminados a realizar los estudios para conocer si es factible la instalación del proyecto La Parota”.

En tanto el coordinador del proyecto, Víctor Hugo Chávez Chávez, informó que a más tardar en una semana se reiniciarán los trabajos de estudios de factibilidad que fueron suspendidos desde el 28 de julio cuando comuneros inconformes llevaron a cabo un bloqueo.

La reunión, que se llevó a cabo en los jardines de Protur, comenzó al mediodía y al lugar llegaron unos doscientos campesinos de comunidades acapulqueñas como Agua de Perro, Altos del Camarón, Los Guajes, Sabanillas, Xolapa, Agua Zarca, San José Cacahuatepec, Arroyo Verde, Campanario, Las Parotas, Rancho Las Marías, Garrapatas, Pochotlaxco, El Arenal, El Carrizo, Las Joyitas, Cruces de Cacahuatepec y Los Hilamos, entre otras.

Los funcionarios que estuvieron presentes fueron el secretario de Gobierno, Luis León Aponte; el secretario de Gobernación, Rey Hilario Serrano; el síndico Fernando Donoso Pérez; el diputado y presidente de la comisión especial para el proyecto, Gustavo Miranda Añorve; los diputados Marco Antonio de la Mora y Arturo Martínez Pérez. También el subsecretario de Asuntos Agrarios, Esaú Tapia Abarca y el secretario general del ayuntamiento de San Marcos, Silvino Rodríguez.

Las intervenciones

Aunque la invitación entregada a las comunidades acapulqueñas era para dar información sobre el proyecto, en dicha reunión se votó para aprobar la continuación de los estudios preliminares por parte de la CFE, con esto, los cinco municipios involucrados dieron su anuencia.

La reunión inició con una aprobación del orden del día y en donde en el punto cuatro se especificaba “la solicitud a los campesinos presentes en la reunión para que la CFE continuara con los estudios” y en el cinco se precisaba que se tomarían los acuerdos.

Primero la CFE presentó diapositivas de lo que significará el proyecto, las áreas afectadas, las carreteras, las comunidades y los modelos de casas que se construirían.

Luego vinieron las intervenciones de los asistentes y durante su turno el comunero e integrante del Consejo de Comunidades Inconformes, Marco Antonio Suástegui, (quien asistió a título personal y no como representante de ese Consejo que en reunión previa había determinado no participar en el encuentro), reclamó que la CFE deje de lado a los campesinos y los trabajos se los den a foráneos. Luego reiteró que lo que ellos necesitan es apoyo al campo “pero de otra manera” no con un proyecto como el de La Parota.

El coordinador del proyecto, Víctor Hugo Chávez Chávez, respondió que de los 250 trabajadores que estaban laborando en los estudios, 200 eran comuneros.

Otra intervención, fue la de Juan Gallegos González de Colonia Guerrero, quien cuestionó a las autoridades el por qué hasta ahora se procupan por informar.

Al responder, el secretario de Gobierno, Luis León Aponte, culpó al ex coordinador, Carlos Pérez Aguirre de que “nunca tuvo la atención de informar qué se estaba haciendo en tierras de Guerrero”.

Posteriormente, el comunero de Garrapatas y también integrante del Consejo de Comunidades Inconformes, Felipe Flores, manifestó su rechazo al proyecto y a vender sus tierras.

Recalcó que la CFE dice puras mentiras y dijo que si otros municipios ya aceptaron el proyecto, pues que se lo lleven allá.

Luego tocó el turno al comisariado de los Bienes Comunales de Cacahuatepec, Cresencio Jerónimo Aparicio, quien pidió a los comunero permitir que se terminen los estudios, ya que eso no significará que aprueben el proyecto. Además, propuso convocar a una asamblea a los campesinos de la zona para determinar si se aprueba o no la continuación de los estudios.

Agregó que “algunos líderes quieren obtener un provecho de los que les toca a los afectados” y añadió que eso ha confundido a la gente, por lo que pidió que no se dejaran engañar por esos líderes.

El miembro de la Organización Campesina de la Sierra del Sur (OCSS), César Suárez Martínez, quiso intervenir pero a gritos los comuneros se opusieron porque dijeron que no pertenecía a ningún pueblo comunero.

Las siguientes participaciones fueron de apoyo al proyecto, e incluso la del diputado y presidente de la comisión especial, Gustavo Miranda Añorve dijo que “que es una oportunidad para el desarrollo”.

Otra de las inquietudes que manifestaron los comuneros fue que nadie les garantizaba que la CFE, efectivamente, pagaría los gastos por las tierras pero además de que no tardara años, como han sucedido con otros proyectos. “Nosotros garantizamos el pago en forma justa y somos responsables”, respondió el secretario de Gobierno, Luis León Aponte.

Una votación no programada

Luego de las intervenciones, un empleado de la CFE anunció la votación que determinaría si la CFE continuaría o no con los estudios de factibilidad.

Y al inquirir si los comuneros estaban o no de acuerdo con la propuesta, un mayor número de ellos gritó que sí, mientras que los menos, dijeron que no.

Inmediatamente uno de los comuneros de apellido Salgado tomó el micrófono y le recordó al secretario de Gobierno, Luis León Aponte, que esa reunión –según la invitación que él mismo firmó– era nada más para dar información y que nunca se había hablado de votar acuerdos.

Un tajante León Aponte le respondió que fue una asamblea legal y por lo tanto los acuerdos tomados eran válidos. Agregó que respetaba la postura que tenían, y dijo que esperaba que guardaban respeto por “el bien de todos”.

Señaló que en la democracia se aceptan los acuerdos de mayoría, y que ahí así habían sido tomados. Es una “asamblea democrática” y son válidos los acuerdos, sentenció y dio por terminada la asamblea.

Pide “apoyo”el comisario ejidal de

El Campanario a Chávez Chávez

Ya en entrevista León Aponte dijo sobre los opositores que seguirán dialogando con ellos y que el Consejo de Comunidades Inconformes tiene que presentarles mejores alternativas para que en un momento determinado fijen su postura.

Cuando se le preguntó acerca de que harán responsable al gobierno del estado si hay violencia entre los comuneros, León Aponte señaló: “Usted, oyó el grito de una persona que se caracteriza por ser radical –en referencia al integrante de la OCSS– y querían romper con la asamblea”.

Insistió que respetaba la postura pero que tampoco permitirían que no se respetara la de los demás.

Advirtió que no “vengan a responsabilizarnos –de enfrentamientos–, ya que los señores están acostumbrados a usar la violencia para poder en contra de todo y a favor de nada”.

Mientras que el coordinador del proyecto, Víctor Hugo Chávez Chávez, comentó que a más tardar en una semana reiniciarán los estudios de factibilidad en el área de la cortina. Sobre la asamblea y la inconformidad de algunos comuneros comentó que se vive en una democracia en donde se respeta la mayoría.

Al finalizar la asamblea, esta reportera escuchó cuando el comisario ejidal de El Campanario, Justino Marín Castillo, pidió un “apoyo” para regresar a la gente que había llevado a un agente de Gobernación, quien le informó de la petición a Víctor Hugo Chávez Chávez, que facilitó el dinero y fue entregado a la autoridad.

Sobre esto se le preguntó a Chávez Chávez si no se podría interpretar como un soborno a las autoridades para apoyar el proyecto a lo que respondió que: “No. Pidió un apoyo porque se le descompuso su vehículo y lo apoyé de mi bolsa, por lo que no veo nada de malo. No hay nada escondido ni secreto, si fuera así nadie se hubiera dado cuenta”, dijo el funcionario federal. Finalmente señaló que espera que los estudios estén en diciembre.

Mientras las autoridades ejidales, municipales y representantes de las comunidades firmaban la minuta de acuerdo donde se autorizaba la continuación de los estudios de factibilidad para el mega proyecto de la CFE en Guerrero, una enorme fila de campesinos esperaba que les sirvieran la comida que consistió en barbacoa de pollo, arroz y frijoles, antes de regresar a sus pueblos.