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Presidentes de países cafetaleros ofrecen encabezar negociaciones sobre tarifas

* En la reunión de la OIC, el presidente de Colombia advirtió que de no llegar a un acuerdo entre países productores y compradores de café, aumentarán la inmigración ilegal, el narcotráfico y el terrorismo

Arturo Martínez Núñez, colaboración especial para El Sur, Cartagena, Colombia * En el 40 aniversario de la Organización Internacional del Café (OIC), los presidentes de Colombia, Álvaro Uribe, de Brasil, Luis Ignacio Lula da Silva y de Honduras en representación de Centroamérica, Ricardo Maduro, ofrecieron encabezar personalmente, las negociaciones con los países compradores de café y con los industriales del ramo, para intentar una salida a la crisis del aromático.

Gabriel Silva, gerente de la Federación Nacional de Cafeteros de Colombia, dijo que los caficultores han perdido más del 60 por ciento de sus ingresos y que el mercado libre había fallado a los productores del grano.

Mencionó que en la reunión que se celebra aquí están puestas las esperanzas de millones de familias alrededor del mundo. “Los cafeteros de todo el mundo hemos seguido todas las recetas que desde los organismos internacionales nos han sugerido y el resultado es catastrófico”.

Pidió al presidente Lula que utilice su influencia global y su gran compromiso social, para encabezar al sector.

Añadió que “el egoísmo y la miopía volverán para impactar al mercado de los consumidores”.

Ricardo Maduro dijo que no se trata únicamente de subir el precio del café, sino de llegar a acuerdos duraderos entre los compradores y los productores.

El presidente de Brasil, Lula, mencionó que el problema de los precios es responsabilidad de las tarifas arancelarias y del puñado de empresas que controlan el mercado. Dijo que es muy importante que los países compradores levanten las tarifas sobre las importaciones de café industrializado, para lograr que el valor agregado se quede en los países de origen.

Planteó: “Tenemos que llegar a un comercio justo, donde cada parte gane un poco, principalmente los productores y los trabajadores”.

Álvaro Uribe pidió a los compradores que por un momento guardaran sus calculadoras y buscaran acuerdos con los productores. Mencionó que de no llegar a un acuerdo, aumentarán la inmigración ilegal, el narcotráfico y el terrorismo. Recordó que durante años en Colombia, la zona cafetera fue la “barrera de defensa democrática”.

Por último, dijo que la “gran revolución productiva” que necesita la industria es el impulso a los cafés especiales: orgánico, bajo sombra y de origen.

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