Pedirán al GMD que les regrese la playa, anuncian restauranteros de Puerto Marqués

Salvador Serna

Restauranteros de Puerto Marqués informaron ayer que negociarán directamente con directivos de Grupo Mexicano de Desarrollo (GMD) para exigir la devolución de la franja de playa, porque cinco negocios ya cerraron de forma definitiva por el desvío de las corrientes marinas a causa de la construcción que llamaron “Marina de la Muerte”.
“Las personas que estuvieron en el plantón del muelle de playa Majahua no tienen nada que ver, no son restauranteros ni nada. Es una vil mentira que sean afectados. En realidad somos nosotros los verdaderos afectados por la construcción de la Marina de la Muerte. Somos 26 restaurantes del tercer bloque y cinco ya cerraron”, señaló el concesionario del restaurante María de Jesús, Agustín Calixto García, durante una reunión en el restaurante Lucerito, a la que asistieron  26 micro, pequeños y medianos empresarios.
“Queremos la franja de playa de regreso, nuestra petición a las autoridades gubernamentales es negociar directamente con Grupo Mexicano de Desarrollo para compensar el daño”, dijo.
Hace una semana, obreros de GMD reiniciaron los trabajos de la Marina Majahua, en Puerto Marqués.
Por su parte, los líderes de los dos grupos inconformes con la edificación del atracadero se acusan mutuamente de recibir dinero, ya sea de empresarios o del gobierno para permitir que las obras se reanuden.
Los restauranteros informaron ayer que seguirán con sus protestas, pues insisten que la construcción del muelle ocasionó el desvío de las corrientes marinas y se tragó la franja de 6 metros de arena donde antes ponían enramadas, mesas y sillas para el esparcimiento de los turistas.
Por su parte, el dueño del restaurante Lucerito, Humberto Castrejón, dijo: “queremos entrevistarnos con el ingeniero Manuel Ortiz, de GMD, tiene que conocer realmente a los verdaderos afectados. Los demás son líderes caciques que se han aprovechado del pueblo de Puerto Marqués. Estamos en crisis, no tenemos recursos para pagarle a Zofemat los 95 pesos de metro cuadrado. Que las autoridades no se dejen engañar, aquí estamos los afectados, los turistas ya no comen en nuestros negocios porque no tienen playa para recostarse y comer. Ya tenemos congoja porque se avecina el tiempo de lluvias”.
Por parte del GMD, los restauranteros indicaron que hay varias propuestas de solución como la creación de 40 puestos de trabajo en el muelle, además de un recurso económico que se entregaría a más de 100 personas que se mantuvieron en el paro.
Otra alternativa es que por medio de un estudio supuestamente realizado por la UNAM o el Instituto Politécnico Nacional (IPN), se determinen los efectos ocasionados por el muelle y establecer las indemnizaciones correspondientes, pero a decir de los gastronómicos inconformes dicho estudio no existe.
“No hay nada de nada. Ni investigadores de la UNAM ni el Politécnico eso no es cierto. Lo único cierto es que ya cerraron los restaurantes Charly Brown, Caracolito, Pulpo. Elizabeth y Paikos porque desapareció su franja de arena. Ya estamos llegando al grado de vender comida como fonda, como si fuera comida corrida con tal de sobrevivir, eso no es justo”, finalizó Calixto García.