Denuncia el diputado Ramiro Alonso hostigamiento por parte de la PFP

 Gregorio Urieta, corresponsal, Ciudad Altamirano * El diputado local por el PRD, Ramiro Alonso de Jesús denunció acciones de hostigamiento de parte de enviados de la Policía Federal Preventiva, corporación policíaca a la que denunció ante el Congreso local por abuso de autoridad.

Vía telefónica, Alonso de Jesús informó que hasta su domicilio en Morelita, municipio de Tlapehuala, han llegado enviados de la PFP que le han dicho que “ya le pare, que me estoy metiendo en un pedo muy grueso”, con la denuncia que interpuso ante el Congreso del Estado, ante la Secretaría de Gobernación y ante a Secretaría de Seguridad Pública, ante las que expuso el abuso de autoridad de que fuera objeto por parte de agentes de esa corporación hace dos semanas, cuando circulaba por el bulevar de Altamirano, al ser golpeado, esposado y encerrado en el centro de detención que la corporación tiene en sus oficinas de Altamirano.

Ramiro Alonso realizó una reunión el pasado sábado en la casa club de los rotarios de Altamirano, y a ella convocó a todos los ciudadanos que hayan sido maltratados o extorsionados por esa corporación por poseer vehículos de procedencia americana. Logró reunir a 12 personas que aseguraron ser extorsionadas por los agentes policíacos, y con ellos el diputado local se dirigió a las oficinas de la PFP para plantearles las demandas, además de que ratificó su demanda penal ante el agente del Ministerio Público Federal en contra de los efectivos de la PFP.

Indicó que “a raíz de eso es que he recibido la visita de dos o tres malandrines que me dicen que ya le pare, que me estoy metiendo en un pedo muy grueso, pero te aseguro que voy a seguir esto hasta donde tope”, dice el diputado perredista.

–¿Y qué te dicen o te piden?

–Que están investigando mi forma de vida y mis antecedentes. Me llegó un tipo que dice que es abogado y que él va a proceder. Yo me pongo a su disposición, que me investiguen lo que quieran, lo que tengo lo he obtenido honestamente, saben a lo que me dedico, en fin.