Presentan queja en la Codehum por el asesinato del presunto secuestrador

 * Familiares piden que se investiguen los hechos ocurridos en Tonalapa del Río

 Eduardo Albarrán Orozco, corresponsal, Iguala * Familiares de Rodrigo Martínez García, uno de los presuntos secuestradores y asesinos del joven Alfredo Almazán Martínez, se presentaron ante el coordinador de la Comisión de Defensa de los Derechos Humanos en la Zona Norte, Policarpo Gatica Ramírez, para solicitar su intervención y que se investigue la forma en que fue asesinado en el interior de su domicilio el supuesto plagiario.

Inocente Martínez Garrido, padre del supuesto secuestrador asesinado; Francisco y Felipe Martínez García, hermanos; la esposa Candelaria Torres Salgado y su sobrina Alicia Delgado Dimas, se presentaron ayer al medio día a las oficinas de la Codehum ubicada en un edificio del centro de la ciudad para entregar un documento de dos cuartillas en el que se indica que se interpone una queja en contra del procurador de Justicia del estado, Jesús Ramírez Guerrero; de los agentes del Ministerio Público del municipio de Teloloapan; de la Policía Judicial del Estado y en contra de quien resulte responsable, “porque consideramos que estos funcionarios son los directamente responsables del crimen que se cometió en contra de nuestro ser querido Rodrigo Martínez García”.

Se señala en el documento que después de haberse enterado del secuestro y crimen en contra del joven Alfredo Almazán y de que en los medios se involucraba a Rodrigo Martínez, “le preguntamos a Rodrigo acerca de este hecho y él negó haber participado”.

Se señala que después del crimen del hijo de oreros, Rodrigo Martínez siempre estuvo en su casa en la comunidad de Tonalapa del Río “haciendo su vida normal en el pueblo y realizando trabajos de albañilería en su propia casa”, entre otros trabajos.

Aseguran que durante ese tiempo, los policías judiciales hicieron varias visitas al pueblo, pero nunca detuvieron a Rodrigo “seguramente la policía visitaba al pueblo para preparar el crimen”.

El 17 de julio alrededor de las 6:30 de la mañana llegaron elementos de la Policía Judicial al domicilio de Candelaria, esposa del supuesto secuestrador, preguntando por Rodrigo. Los hombres iban fuertemente armados y viajaban otros más en varios vehículos, mismos que avanzaron hacia el pueblo. Dice el texto: “10 minutos después se escucharon dos balazos de pistola, estos los escuchó Candelaria y Alicia Delgado”.

Debido a los disparos salieron los vecinos y “dijeron que a Rodrigo lo habían matado en su casa y varios hombres lo sacaron arrastrando por la calle para llevárselo en un carro porque minutos después todos desaparecieron, seguramente ya iba muerto porque llevaba dos balazos uno en el corazón y otro en la barbilla, su muerte fue instantánea”.

Agregan los familiares del supuesto secuestrador de Alfredo Almazán Martínez, Rodrigo Martínez García, que los elementos de la Policía Judicial del Estado rompieron cristales y volaron la cerradura de la puerta del lugar donde dormía Rodrigo.

Además de que hicieron diversos destrozos y se robaron objetos de valor como algunas alhajas y 20 mil pesos, así como maletas con ropa nueva.

Señalan que para borrar las huellas del crimen, los judiciales limpiaron la sangre de Rodrigo con ropa de su esposa Candelaria. Ropa que fue tirada por los policías en la carretera, a cerca de 100 metros del lugar del crimen. Esta ropa la conservan como una prueba.

Los familiares aseguran que Rodrigo no podía accionar un arma porque padecía de cáncer en la mano izquierda.

Además se indica que si los policías iban con la intención de detenerlo “hubieran rodeado la casa tomando en cuenta que ellos eran muchos y bien armados” para aprenderlo y presentarlo ante un juez, “pero está claro que la intención era asesinarlo, tomándolo por sorpresa dentro de su habitación”.

En este documento que se entregó a la Codehum se asegura que se encontró un cascajo de calibre 38 súper.

Ese mismo día se trasladaron a la agencia del Ministerio Público de Iguala para preguntar del paradero de Rodrigo y el agente del MP les informó que el caso lo estaba atendiendo directamente el procurador, Jesús Ramírez Guerrero.

Rodrigo dejó en orfandad a cuatro menores, dos de su primera esposa, Socorro Leyva y otros dos de Candelaria Torres.

Tanto el papá como los hermanos de Rodrigo son trabajadores en Estados Unidos.

En uno de los párrafos del documento se indica que “por el presente pedimos su apoyo para que este crimen no quede en la impunidad y se aplique la ley a los asesinos de nuestro ser querido además pedimos que no se siga matando a los presuntos delincuentes señalados en el caso de Alfredo Almazán Martínez”, lo anterior porque se sabe que los familiares de Almazán Martínez ofrecieron 100 mil pesos por la muerte de cada uno de los supuestos secuestradores y asesinos de Alfredo Almazán.

También solicitaron el apoyo del gobierno del estado con recursos para que los huérfanos puedan estudiar y alimentarse.

Del documento se enviará una copia a la Comisión Nacional de Derechos Humanos y a la Comisión Interaméricaa de los Derechos Humanos.

En este acto de entrega del documento los acompañó Feliciano Ortiz Delgado, quien dijo ser familiar de Rodrigo Martínez García.

Ortiz Delgado demandó del procurador y el gobernador de Guerrero, Jesús Ramírez Guerrero, y René Juárez Cisneros, que “controlen a los judiciales para que no haya represalias en contra de los familiares del supuesta secuestrador ultimado de dos tiros en su casa el 17 de julio.

Aseguró que “no es aplicando la ley de la selva y haciéndose justicia de propia mano como se resuelve el problema de la criminalidad”.

Por su parte el coordinador de la Codehum en la zona norte, Policarpo Gatica Ramírez, recibió el documento y aseguró que se le dará el trámite correspondiente conforme a la normatividad.