Marcial Rodríguez Saldaña

La alternancia política en Guerrero

 Concluidas las distintas interpretaciones de los resultados electorales del 6 de julio, en el país y en Guerrero, las pesimistas, las optimistas, las que consideran que ganó el abstencionismo (sin tener ningún diputado), los análisis de prospectiva política deben orientarse a la conformación de la nueva Cámara de Diputados a nivel nacional y en el estado al proceso electoral que se avecina, la sucesión de gobernador.

La alternancia política es una característica consustancial a los regímenes democráticos, no podría considerarse a un sistema democrático si sólo un partido político permaneciera en el poder, pues la democracia electoral implica que los electores tengan al menos dos opciones a elegir, y que los competidores tengan las mismas condiciones y posibilidades de ganar una elección.

En el país la alternancia política se ha presentado originalmente a nivel municipal, luego en las entidades federativas, en la Cámara de Diputados y en la Presidencia de la República en las elecciones del año 2000. En el caso de los gobiernos de los estados casi la mitad han pasado por el fenómeno de la alternancia, faltan algunos como Guerrero en donde los principales municipios ya viven este proceso, sin embargo en el estado no se ha podido lograr el cambio de régimen.

Frente al proceso de sucesión gubernamental, rumbo a la elección que se llevará a cabo el primer domingo del año 2005 ¿cuál es el camino que hay que recorrer? El balance electoral constatado por los resultados más recientes como la elección local del 6 de octubre el 2002, en donde en la votación para ayuntamientos el PRD superó ligeramente al PRI y en la elección para diputados federales el PRI obtuvo un margen de aproximadamente 2.6 por ciento arriba el PRD, indica que hay en Guerrero una polarización de fuerzas en estos dos partidos, una cerrada competencia, en donde cualquiera puede ganar.

La tendencia política nacional es hacia la alternancia, por ello en Guerrero, la alternancia debe verse como una etapa necesaria para la democratización del estado, los verdaderos demócratas debemos tener la clara visión de que en términos de compromiso democrático, el objetivo electoral consiste en ganar la gubernatura en el 2005.

Para cumplir este propósito, deben cubrirse varias etapas entre las que considero indispensables:

a) Tener una balance objetivo de la situación electoral del estado, ni pesimismo ni optimismo, realismo político, para nada considerar que el PRD tiene ya ganada la gubernatura.

b) Estar abiertos a que dentro del PRD haya una política incluyente para participar como precandidato, no cerrar la participación a dos o tres que hayan hecho abiertamente proselitismo preelectoral y con serenidad analizar quien podía ser el mejor candidato.

c) Acordar en el PRD un procedimiento de consenso entre los aspirantes para la selección del candidato; aquí existe un riesgo grave si algún precandidato se aferra a determinado método de selección, que le dé alguna ventaja interna y que algún otro precandidato no comparta, lo cual apuntaría a una fractura y derrota anticipada.

d) El PRD debe tener humildad democrática, la realidad electoral indica que es la principal fuerza política que puede competir contra el PRI, pero debe llamar a todas las fuerzas políticas democráticas del estado, partidos, agrupaciones sociales y civiles, asociaciones y ciudadanos para impulsar y construir el más amplio frente y alianza para la alternancia en Guerrero, bajo un proyecto común de gobierno y compromiso de inclusión de todas estas fuerzas en el gobierno de alternancia.

En la transición democrática y específicamente para lograr la alternancia, nadie sobra, todos son indispensables. El PRD ha competido electoralmente con algunos partidos en Guerrero con quienes en otros estados y municipios del país ha tenido alianzas y han logrado ganarle al PRI, como en Michoacán, Distrito Federal y Xalapa.

La tradición autoritaria y muchas veces represiva del régimen priísta en Guerrero, debe unir como una sola fuerza a todos aquellos que han luchado históricamente por el cambio, no hacerlo así, sería actuar con mucha mezquindad e irresponsabilidad y a favor de la continuidad de un sistema que se ha combatido. Vamos a ganar la gubernatura en el 2005, con un equipo de políticos profesionales, responsables, con experiencia y buenos resultados de gobierno que ponga fin a un régimen construido sobre la base de cacicazgos, envuelto en la corrupción institucionalizada, impunidad e ineficiencia y comience un nuevo proyecto social que de cause a las demandas mas nobles y justas de los guerrerenses.