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Comerciante acusa al comisario de El Cayaco de intento de despojo

 Adalberto Valle * La comerciante Marcela Guatemala Jijón acusó al ex comisario del ejido de El Cayaco, Alberto Avila Rosales y al hermano de éste, el actual comisario del lugar, Pablo Avila González, de querer quitarle un predio de su propiedad.

En la redacción de El Sur, Marcela Guatemala aseguró tener “todos los papeles” que acreditan que es dueña de un terreno de mil 227 metros cuadrados que se ubica sobre la carretera que va de Cayaco a Puerto Marqués, frente a El Coloso, donde tiene su vivienda y su negocio, un lavado de autos.

Narró que en 1999 adquirió junto a su esposo Abelardo García Montiel “una propiedad debidamente escriturada, que colinda con el ejido de Cayaco”, lo cual ya lo comprobó en la Procuraduría Agraria y en la dirección de Desarrollo Urbano y Obras Públicas del ayuntamiento de Acapulco.

Indicó que en el 2001, Alberto Avila Rosales y “gente con machetes quisieron reclamar el predio” y que les “tenía que dar dinero para seguir ahí”, pero como no accedió a su petición, desde entonces comenzaron a molestarla.

Dijo que en este mes fue personal del Plano Regulador de la dependencia municipal a hacer mediciones por la gestión de la construcción de una calle por parte del actual comisario de Cayaco, Pablo Avila.

Ante esto, presentó los documentos que avalan la propiedad ante la dirección del Plano Regulador, al mando de Juan Dillanes, quien según Marcela Guatemala comprobó que ella es la dueña con base a los documentos que presentó, por lo que tal vialidad ya no fue llevada a cabo.

“Ahora he sido difamada de haber adquirido la propiedad de forma deshonesta, con favores sexuales al director del Plano Regulador, Juan Dillanes”, dijo.

Marcela Guatemala señaló que sólo habló en una ocasión con Dillanes para exponer el caso y lo hizo acompañada de su abogada, Elizabeth Pacheco Guerrero, quien fue testigo de lo anterior.

Por último, Antonio Talavera, esposo de Marcela Guatemala dijo que los Avila Rosales se dedican a invadir predios para luego venderlos y hacer negocio, por lo que ambos pidieron la intervención de las autoridades correspondientes.

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