Acusa López Rosas al gobierno estatal de tráfico de influencias con Sedesol

 * Desestima el alcalde las declaraciones del delegado de la Semarnat Octavio Klimek sobre la contaminación de las playas

 Adalberto Valle * El alcalde de Acapulco, Alberto López Rosas, mostró el martes su desacuerdo con las dependencias federales Semarnat y la Sedesol dependencias federales y señaló que hay “tráfico de influencias” del gobierno del estado que “está cabildeando mucho” la aceptación del programa Pensión Guerrero.

“Lo que haga o deje de hacer la Semarnat, si no toma en cuenta a la autoridad municipal no tiene caso que me ocupe de ella”, señaló López Rosas, luego del informe de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, que planea efectuar un par de monitoreos a la bahía de Santa Lucía, mientras que llamó “audaz” al subsecretario de Programas y Proyectos de la Secretaría de Desarrollo Social, Miguel Székely Pardo, quien el lunes dio el visto bueno al programa Pensión Guerrero, que lleva a cabo el gobierno del estado en Acapulco.

En entrevista con los medios de información, tras dar el banderazo con el que la Policía Preventiva Ecológica inició sus actividades en el municipio, López Rosas aclaró que su postura no es de “desafío” hacia la Semarnat y al preguntarle sobre la contaminación del río de la Sabana que denunció el delegado de dicha dependencia, Octavio Klimek Alcaraz, respondió que “no voy a polemizar, las aguas pertenecen a la federación, los canales son áreas federales y a nosotros nos toca evitar que los residuos sólidos lleguen al mar”.

En este sentido, mencionó que antes de la actual temporada de lluvias el gobierno a su cargo llevó a cabo un programa de desasolve y limpieza general en cauces y arroyos durante un mes, aunque reconoció que “sí llegó basura, pero no en los mismos volúmenes que en años anteriores”.

Respecto a la controversia iniciada por su gobierno hacia la aplicación de Pensión Guerrero –que en estos días lleva a cabo su segunda entrega de recursos a personas mayores en Acapulco–, mencionó que “va bien, tenemos nueva fecha de audiencia, hemos aportado todos los elementos aprobatorios y vamos a esperar la audiencia final para pasar a la resolución”.

Pero al hacer referencia a la aprobación del programa por parte de Székely Pardo, quien informó en Chilpancingo que Pensión Guerrero recibiría un incentivo de 9 millones de pesos, comentó:

“Me parece una audacia dar una opinión sobre un asunto que está en litigio. Yo no sé si se malinterpretó y si dijo lo que publicaron los medios. Pero no es muy responsable emitir una opinión en este momento. Me hace pensar que el gobierno del estado está cabildeando mucho ante la federación. Espero que no llegue ese cabildeo a la Suprema Corte para tratar de obtener una resolución favorable”.

Señaló que “hay un tráfico de influencias del gobierno del estado y nos tratan de espantar que si se resuelve a nuestro favor, se pone en peligro Pensión Guerrero”.

Añadió que no pusieron la controversia contra el Congreso del estado que aprobó dicho programa “sino sobre el procedimiento, no sobre la entrega, el programa está a salvo, pero tendrían que modificar el procedimiento o ¿a poco a ustedes no les causa pena ver a tanto anciano en rayos del sol haciendo largas filas?” –preguntó a los reporteros.

Agregó que es un programa desarticulado, improvisado y que más parece un acto de mendicidad que de justicia social”.

Alberto López Rosas dijo que es inaceptable que el gobierno del estado haya hecho un programa ignorando al Ayuntamiento porteño.

“Yo no voy a admitir que la autoridad sea borrada por móviles políticos. Tengo una representación y la voy a defender”, mencionó, aunque al cuestionarle si René Juárez Cisneros lo había ignorado respondió que “no quiero hacer señalamientos”.

Comienza operaciones la Policía Preventiva Ecológica

El presidente municipal encabezó el martes el acto con el que se puso en marcha la Policía Preventiva Ecológica, que tuvo lugar en lo que fue el corralón de Tránsito que se ubica en la calle Cañada de los Amates de la colonia Cumbres de Figueroa, predio que fue “recuperado” por el ayuntamiento para establecer ahí “un pulmón” para ese núcleo habitacional.

“Esto era un albergue de vehículos chatarra, pero ya lo recuperamos y vamos a hacer lo mismo con otros predios”, comentó López Rosas en su intervención, luego de ser recibido con un porra por los niños Inspectores Ecológicos que integran el Primer Cabildo Infantil, quienes a la voz de “agua melón y papaya, el presidente nunca falla”, dieron la bienvenida al alcalde porteño, quien llegó con poco más de media hora de retraso al evento, planeado para comenzar a las 11 de la mañana.

Según la información entregada por Comunicación Social municipal, la Policía Preventiva Ecológica ayudará a mantener las “condiciones libres de contaminación y obtener a mediano plazo la certificación internacional ISO 14 mil para Acapulco, que da el aval de calidad ambiental”.

Este cuerpo policiaco será dirigido por el ex subdelegado de la Profepa, Genaro García Jaimes, quien estará al mando de

40 agentes (seis de ellos, mujeres) “capacitados en áreas como recursos naturales, zona forestal, fauna silvestre, impacto ambiental, ilícitos administrativos y delitos ambientales”, con subordinación directa de la Secretaría de Protección y Vialidad.

La Policía Preventiva Ecológica contará con cuatro unidades modelo Tracker 2003 de doble tracción y usarán uniforme con camisa verde militar y pantalón beige.

En el acto, López Rosas informó también que el próximo viernes llegarán nueve unidades “totalmente nuevas” para la recolección de basura, con lo que “reforzarán” esa labor en las partes altas y así “no haya pretexto de los ciudadanos porque no pasa el camión”.

“Abajo tenemos a los Policletos y a la Ecológica en las partes altas, con unidades propias para encaramarse y ahora tendremos más camiones de basura para que no se contaminen los cauces”, recalcó el presidente porteño.

En el boletín oficial se expone también que los policías “irán puerta por puerta con la población que está a orillas de cuencas y arroyos, advirtiendo lo que no está permitido hacer y aplicar sanciones a quienes reincidan en prácticas nocivas”.

Añade que “a diferencia de la dirección de Ecología, la Policía Ecológica estará en constante vigilancia en las zonas de conflicto natural y social. Ambas dependencias trabajarán conjuntamente para la protección del medio ambiente”.

Por su parte, Genaro García Jaimes señaló en su discurso que Acapulco “creció sin planeación”, que “no hubo un plan de infraestructura urbana”, con lo que se abusó de la ecología.

“Pero no es tiempo de lamentarnos, sino de sumar facultades y en base a las leyes ambientales atacar el problema. No somos una policía improvisada, estamos capacitados. Está basada en las leyes del Plan de Gobierno municipal”.

Al dirigirse a los asistentes, el primer Síndico municipal, Fernando Donoso Pérez, agradeció a quienes colaboraron en la conformación de esta policía Ecológica “profesionalizada”, resaltando al delegado de la Semarnat, Octavio Klimek Alcaraz –quien no asistió al evento–, al regidor y presidente de la Comisión de Ecología, Alejandro Carabias Icaza; al director de Ecología municipal, Miguel Balleza García; a la defensora de la isla la Roqueta, Robin Sidney y a la “periodista y protectora ambiental” Manú Dornbierer.

El alcalde estuvo acompañado por los síndicos Fernando Donoso Pérez y Marcial Rodríguez Saldaña; por la secretaria general del Ayuntamiento, María de la Luz Núñez Ramos; así como por los secretarios Rossana Mora Patiño de Desarrollo Social; Antonio Valenzuela Valdez de Protección y Vialidad; Jorge Juárez Soto de Obras Públicas; por el director de Turismo, Roger Joseph Bergeret y el de Ecología, Miguel Balleza García.

También asistieron, el director de Capama Jesús Flores Guevara; de Tránsito, Roberto Abizaid; de Saneamiento Básico, Israel González Nava, así como regidores de la comuna porteña, mientras que por la iniciativa privada estuvieron el presidente de la Asociación de Hoteles y Empresas Turísticas de Acapulco (AHETA), Rafael García-Pimentel y el presidente de la Coparmex, Jorge Bajos Valverde.