Ordena el alcalde de Chilpancingo cerrar accesos del ayuntamiento

 Zacarías Cervantes, corresponsal, Chilpancingo * Por el temor de que los habitantes de Petaquillas, inconformes con la elección de comisario volvieran a ocupar el Palacio Municipal como ocurrió el domingo pasado, el alcalde Saúl Alarcón Abarca ordenó ayer cerrar todos los accesos del inmueble después del mediodía.

El cierre de inmueble generó la inconformidad de los ciudadanos que acudieron a efectuar trámites y en protesta bloquearon desde afuera para impedir la salida de quienes ya se encontraban dentro del edificio.

El alcalde ordenó cerrar los accesos después de que comenzó la sesión del Cabildo donde se discutió el conflicto por el comisario municipal de Petaquillas. Los regidores finalmente acordaron la realización de un plebiscito para determinar si la mayoría de los pobladores están de acuerdo en una nueva elección de comisario.

El acuerdo es también en el sentido de que si la minoría está en contra de una nueva elección o la mayoría se abstiene de votar, se da por hecho que están de acuerdo con los comisarios Lorenzo Antaño Ríos y su suplente, Esteban Santos Hernández, que son quienes de acuerdo a la elección de hace un año deben de representar la comisaría municipal.

Sin embargo, los perredistas manifestaron su desacuerdo con esta propuesta porque ellos sostienen que en asamblea la mayoría de los habitantes de Petaquillas eligieron el sábado pasado como comisario propietario a Constantino Ruano Hidalgo y a su suplente Armando Casarrubias Silva.

A pesar de la inconformidad de esta parte, el Cabildo acordó la realización del plebiscito el domingo próximo.

Durante la sesión de Cabildo se generó otro conflicto debido a que el alcalde ordenó cerrar todos los accesos al Palacio Municipal para impedir que los inconformes volvieran a ocupar el inmueble como ocurrió el domingo pasado cuando retuvieron al comisario propietario y suplente que apoyan los priístas.

Esto provocó la inconformidad de medio centenar de ciudadanos que acudían a realizar trámites o pagos de servicios y espontáneamente se organizaron y desde afuera impidieron la salida de quienes ya se encontraban dentro del inmueble entre ellos público y empleados.

La protesta obligó la salida del director de Gobernación, Francisco Javier Ortega, quien explicó el por qué se cerraron las puertas y comisionó a algunos de sus agentes para que por comisiones o de a uno por uno fueran introduciendo a los ciudadanos para que realizaran su gestoría.