Cambian al jefe de la jurisdicción sanitaria de Tlapa; nombran a Armando Viveros

 Zacarías Cervantes, corresponsal, Chilpancingo * El jefe de la jurisdicción sanitaria de Tlapa, Genaro Juárez Silva finalmente fue removido de su cargo y en su lugar, la titular de la Secretaría de Salud, Verónica Muñoz Parra, designó a Armando Viveros.

Mientras tanto, los trabajadores que iniciaron desde febrero pasado acciones de protesta en contra de Juárez Silva volvieron ayer a protestar en esta capital en las instalaciones de la Secretaría de Salud esta vez para inconformarse por la designación de Armando Viveros y para insistir que se corrijan las irregularidades que venían denunciando.

Juárez Silva informó que desde el viernes de la semana pasada dejó el cargo de jefe de la jurisdicción sanitaria que venía desempeñando desde hace cuatro años.

Su remoción ocurrió luego que desde el mes de febrero pasado un grupo de trabajadores empezó a denunciar irregularidades administrativas solapadas por Juárez Silva entre ellas personal que cobraba sin trabajar y otros que recibían viáticos sin realizar actividad alguna.

Juárez Silva quien desde hace 15 días había presentado su renuncia a la titular de la dependencia Verónica Muñoz Parra, informó ayer lunes que el viernes de la semana pasada “por instrucciones superiores” dejó la jefatura y en su lugar fue designado Armando Viveros quien se venía desempeñando como coordinador de enlace.

Sin embargo, para los trabajadores inconformes su separación del cargo no fue suficiente y ayer un grupo de ellos volvió a trasladarse a esta capital y realizó una protesta afuera de las oficinas centrales de la Secretaría de Salud y posteriormente se reunieron con funcionarios de la dependencia.

A diferencia de reuniones anteriores, cuando pedían la presencia de los reporteros, esta vez fueron ellos quienes cerraron la puerta de la sala de juntas y les impidieron el paso.

Esta vez se molestaron por la designación de Armando Viveros como nuevo jefe de la jurisdicción sanitaria y exigieron que salgan de la nómina dos trabajadores que, según los dirigentes, cobran sin trabajar.