Periódico con noticias de Acapulco y Guerrero

Gil Florente Castellanos

CETEG: una movilización más

 El 10 de junio de este año, la CETEG concluyó las acciones de protesta enmarcadas en la movilización cíclica que cada año realizan sus militantes para dar vigencia a sus propósitos básicos: democracia y más salario.

El movimiento tuvo una duración aproximada de un mes y según Daniel Pano Cruz, secretario de Educación en Guerrero, fue injustificada la pérdida de clases porque al fin de cuentas “no se logró nada”. Sin embargo, los voceros de la Coordinadora dicen que hubo logros importantes en lo social. Veamos:

1.- En el aspecto salarial, la patronal otorgó un incremento de 5.5 por ciento al sueldo base, y 1.5 a las prestaciones, anunciándolo antes del 15 de mayo. El aumento a la percepción base supera en 1.2 por ciento al 4.3 –tope salarial de este año– que fue aplicado en febrero a los docentes del nivel superior y posteriormente a los trabajadores de otros sindicatos. Con la citada diferencia, la administración foxista anuló la demanda de rompimiento del tope salarial y obligó a los trabajadores movilizados a replantear la exigencia de aumento salarial de manera imprecisa.

Desde el año pasado, la Coordinadora omitió en sus documentos y discurso la demanda histórica de incremento salarial del 100 por ciento, sin proponer una tasa porcentual alternativa, o un modelo de recuperación del salario, afectado constantemente por la curva inflacionaria. Por tal razón, la negociación de esta variable ha sido insustancial.

La escala móvil de salarios sería la solución porque recuperaría de manera automática el poder adquisitivo de los emolumentos.

Desafortunadamente en esta como en otras ocasiones la exigencia salarial no ha constituido el eje principal del movimiento. La CETEG evita ser tildada de economicista.

2.- La intención de avanzar hacia la democratización del SNTE tuvo como objetivo específico, esta vez, el debilitamiento del liderazgo de Elba Esther Gordillo. Para conseguirlo, los trabajadores de la educación inconformes realizaron tres acciones significativas: solicitaron al IFE la no aceptación del registro de la susodicha ciudadana, como candidata a diputada plurinominal por su implicación en crímenes de maestros disidentes, incursionaron en las instalaciones del PRI y tomaron el edificio del SNTE.

Con la primera acción multiplicaron la imagen mediática de la dirigente priísta y propiciaron la exoneración pública que sin tardanza le concedió la PGR; con la segunda, ganaron el descrédito de un amplio sector de ciudadanos y, con la tercera, produjeron la división en sus propias filas (los maestros oaxaqueños reprobaron la toma del edificio).

La táctica para alcanzar el objetivo descalificador se convirtió en un boumerang.

3.- El eje principal de la protesta –según la dirigencia cetegista– fue “ la defensa de la escuela pública”. Pero sus defensores se ausentaron 27 días de sus labores, y el año pasado suspendieron un periodo similar por la misma causa, y seguirán interrumpiendo las actividades escolares porque esta demanda se ha convertido en su objetivo principal.

Los maestros disidentes deberían reflexionar sobre este asunto y comprender que el paro de labores escolares es privatizador porque aminora el interés de los padres de familia de seguir inscribiendo a sus hijos en la “escuela de gobierno”. Por esta sencilla razón, aumenta cada año la matricula de los institutos y colegios privados. Luego, los maestros que paran, los que asisten a los juegos magisteriales en calidad  de jugadores o porristas y los aviadores, sin proponerselo, contribuyen a la privatización de la enseñanza. El gobierno solapa esta anomalía, porque a mayor número de padres desalentados que deciden pagar la educación de sus hijos, menor es el presupuesto que destina al ramo educativo. Ello conduce a la privatización de los servicios educativos. Es correcto defender la escuela pública, pero con otros tácticas de lucha y con una práctica docente de calidad.

4.- El resolutivo que Víctor Echeverría reivindica es el de los uniformes. Al respecto el dirigente de  la CETEG dijo: “El movimiento de los maestros obtuvo la autorización de los 25 mil paquetes escolares que estaban demandando los niños de escasos recursos” (El Sur 110603). El acuerdo se pactó el año pasado, pero fue necesaria otra movilización para que se concretara. Faltó negociar la creación de una comisión mixta que diera seguimiento al resolutivo y participara en la distribución.

Cuando se da este tipo de concesiones, el reparto lo hace el DIF agenciándose el mérito. Ahora se lo agenciará el secretario de Educación que ya anunció el “arranque del programa de reparto de uniformes gratuitos”.

5.- Lo que hoy obtuvo la CETEG es una cantidad considerable de horas que se convertirán en plazas de maestros para el medio rural. Por cierto, esta petición alentó la participación de un grupo de estudiantes de la licenciatura en educación de la Unidad 12B de la UPN. No obstante, este minúsculo producto será afectado por las aguas del clientelismo en las que actualmente navega la dirigencia cetegista. Se comenta que el reparto se hará entre los que se movilizaron en la ciudad de México.

Lo que no puede regatearse a la CETEG es el haber culminado su jornada de lucha con optimismo y sin deserciones, pese a las amenazas administrativas, expresadas mediante la fiscalización de escuelas, la retención de cheques y la emisión de ordenes de aprehensión. La invalidación de estos actos punitivos habla de la capacidad de negociación local que tiene la Coordinadora; circunstancia que le permite conservar su estatus de organización sindical representativa del magisterio democrático guerrerense. El debate serio para superar vicios y errores y una praxis regulada por los principios  la fortificarían. Es necesario implementarlos para evitar que el esfuerzo de los trabajadores de la educación participativos, se convierta en una movilización más.

468 ad