El gobierno, dispuesto a atender recomendaciones de la ONU: Gálvez

 Zacarías Cervantes, corresponsal, Tlapa * La representante de la oficina de asuntos indígenas de la Presidencia de la República, Xóchitl Gálvez, reconoció que en México existe mucho rezago en materia de violación a los derechos humanos de los indígenas pero que existe la voluntad del gobierno federal para atender las recomendaciones que haga el relator especial de la ONU, Rodolfo Stavehagen.

“México invitó al relator precisamente porque tenemos el compromiso de mejorar la situación de los derechos humanos de los pueblos indígenas, pero ustedes saben que en esto están involucradas autoridades municipales, estatales y federales e incluso cacicazgos locales que muchas veces tienen ahí grupos que presionan a los grupos indígenas”, dijo la funcionaria federal.

Xóchitl Gálvez fue entrevistada en el helipuerto de esta localidad a donde acompañó al relator especial de la ONU, Rodolfo Stavenhagen, quien se reunió aquí con representantes de organismos no gubernamentales de derechos humanos, dirigentes de organizaciones indígenas y de organizaciones sociales para conocer testimonios y denuncias sobre violaciones a los derechos humanos de los indígenas.

Dijo que la visita del relator especial de la ONU a Tlapa –quien no tenía previsto visitar Guerrero– “era un reclamo muy importante de las organizaciones indígenas de la Montaña para que conociera algunos documentos y algunas opiniones de violaciones a derechos humanos de esta región y creo que, en ese sentido, tuvo una reunión bastante exitosa”.

Indicó que el gobierno federal trata de influir en todos los que tienen que ver con la violación a los derechos humanos “porque sabemos que hay mucho rezago en esta materia y lo primero que tenemos que hacer es reconocer donde están los problemas para poderlos enfrentar”.

Indicó que por ello el gobierno mexicano ofreció todas las facilidades y la logística al relator especial de la ONU para que se pudiera desplazar a los lugares que visita.

Xóchitl Gálvez dijo que en Guerrero al gobierno federal le interesa específicamente el tema de la Policía Comunitaria “sobre esto se tiene que trabajar para legislar”, adelantó y dijo que también preocupa la denuncia reiterada de los indígenas con respecto a la militarización “ese es otro tema que hay que tratar a fondo”, dijo.

“México tiene toda la voluntad de enfrentar de cara estos problemas y la violación a los derechos humanos en general”, añadió.

Y dijo que si el gobierno invitó a Rodolfo Stavenhagen “es porque estamos dispuestos a aceptar las recomendaciones e instrumentarlas, sus opiniones no deben ser letra muerta porque el trabajo del relator es muy extenuante como para no tomar en cuenta lo que está sugiriendo”.

Los reporteros le preguntaron si el gobierno federal también tiene voluntad porque se esclarezca y se castigue a los responsables de la masacre de El Charco, pero evadió: “No es un tema que yo conozca, seguramente el relator se lo tratará directamente al presidente porque tendrán la oportunidad de reunirse con él”.

Y del caso de la masacre de Aguas Blancas señaló que este es un caso del fuero común “y muchas veces aunque quisiéramos no podemos meter las manos”.

La funcionaria federal dijo que aunque el gobierno federal quiere hacer mucho no puede avanzar porque “son rezagos de 510 años, de toda una cultura de discriminación en nuestro país y no va ser fácil cambiarla, no sólo es una misión del gobierno federal, estatal o municipal sino también de la misma sociedad”, señaló.