Quién no vote por él tiene dos opciones: continuidad o el abismo, dice Peña Nieto

Claudia Guerrero / Agencia Reforma

Ciudad de México

A dos días del debate presidencial, el candidato de la coalición PRI-PVEM, Enrique Peña Nieto, seguía engallado y aprovechó el foro que le dio Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS) para lanzarse contra sus adversarios.
Frente a inversionistas, el ex gobernador del Estado de México advirtió que quien no vote por él sólo tiene dos opciones: la continuidad o el abismo.
“El próximo primero de julio, los mexicanos van a decidir lo que va a pasar en los próximos seis años. Creo que de las opciones que se tienen, hay una que representa más de lo mismo, es una opción que no representa cambio; y otra, que genera incertidumbre, podría significar un salto al vacío, al no saber con claridad qué esperamos”, vaticinó.
El priista no se refirió por su nombre a la candidata presidencial del PAN, Josefina Vázquez Mota, ni al abanderado del Movimiento Progresista, Andrés Manuel López Obrador, con quien estuvo a punto de toparse en las instalaciones del Centro Banamex.
Minutos más tarde, en entrevista, Peña Nieto explicó el móvil que lo impulsó a descalificar a sus oponentes.
– ¿Ahora será más frontal?, se le preguntó.
– “Pues a lo mejor, pues traes todavía la sangre caliente del debate”, confesó.
El candidato también utilizó su participación en la reunión nacional de los aseguradores para hablar mal de los gobiernos del PAN.
60 millones de pobres, casi 21 en pobreza alimentaria; el desempleo triplicado, el clima de violencia agravado -con un saldo de 50 mil muertos-; y el peor desempeño económico “de la historia o por lo menos de los últimos 80 años”.
“Si se trata de ir al médico y de tomar los signos vitales del paciente, habrá que observar que México, lamentablemente, en los últimos 12 años, no ha podido aprovechar su gran potencial”, expuso.
Tras el diagnóstico, Peña Nieto se autodescribió como una opción de cambio responsable, que asumirá el liderazgo que requiere el país y que será respetuoso de las diferentes opciones políticas.
“(Una opción) que convoque a la unidad de los mexicanos y no a su polarización”, aseguró.
Pero los representantes de la AMIS no sólo querían conocer “las opciones”, sino saber si el candidato estaba dispuesto a impulsar las reformas frenadas por su partido en la Cámara de Diputados.
– ¿De llegar a la Presidencia, impulsará estas reformas que están pendientes en el Congreso?, preguntó el moderador.
– Llegará el momento de deponer los cuchillos muy afilados y las navajas muy afiladas, porque después del primero de julio tenemos que convocar a todas las fuerzas políticas a que, en unidad, demos impulso a las reformas estructurales que el País necesita”, respondió, luego de afirmar que las reformas dependerán del liderazgo que ejerza el titular del Ejecutivo, con o sin mayoría priista en el Congreso.
Al concluir su participación, el aspirante ofreció una atropellada entrevista en la que titubeó sobre el “conteo acelerado” de votos de la jornada electoral, y sobre los 3 ó 4 puntos del PIB que costará la pensión que prometió para los adultos mayores.

El SNTE no es responsable de educación, dice

El candidato presidencial del PRI, aseguró que a pesar del poder económico del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), el control de la política de ese sector debe estar en manos del gobierno.
“El responsable de la política educativa del país es el gobierno, no el sindicato”, dijo.
Así respondió al ser consultado sobre las cifras que reveló Reforma, en las que se detalla que el sindicato encabezado por Elba Esther Gordillo recibe diariamente en sus arcas un promedio de 6.5 millones de pesos por concepto de cuotas de sus agremiados.