Héctor Manuel Popoca Boone

 Aguas con el agua

 Fenómeno distinguible en el siglo XXI será la creciente escasez de agua y por tanto, los graves conflictos sociales, económicos y políticos que de ello se deriven. Estos problemas también serán de carácter globalizado.

Las disponibilidades de agua en el planeta son disímiles de continente a continente. Situaciones críticas existen ya en el Medio Oriente y en Africa del norte con disponibilidades por habitante de aproximadamente mil 247 metros cúbicos por año, cuando en América del Norte es de 18 mil 742 o de los 23 mil 103 que todavía tiene América Latina.

El Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente concluye que los problemas en torno del agua, hoy en día, constituyen una importante fuente de tensiones sociales y políticas entre las naciones. Y el organismo World Watch afirma que ni los gobiernos ni la comunidad internacional están preparados para conjurar los disturbios sociales y los conflictos exteriores, incluso guerras, como resultado de la penuria del agua.

La disputa, entre diversos países por el uso de las aguas del Río Jordán en Medio Oriente o para no ir muy lejos la querella sostenida por Estados Unidos y México en torno al agua del Río Bravo, dan cuenta de la internacionalización del conflicto y de la necesaria multilateralidad que requieren las soluciones. Dentro de nuestro país, las disputas entre estados, municipios y comunidades por el agua y su uso, son más frecuentes e intensas; por ejemplo, los Estados circunvecinos al Distrito Federal, ven como cada día el agua de sus ríos son canalizadas para saciar la sed de la megalópolis y les son devueltas como aguas negras recicladas.

La escasez del agua se ha convertido en la principal limitación para la sustentabilidad de las ciudades y su crecimiento; lo mismo pasa para la producción agropecuaria en muchas zonas del mundo. Crecimiento poblacional, generación de alimentos, así como la oferta y demanda de agua, usos, consumos y contaminación de la misma, son las variables críticas que no guardan proporción ni correspondencia entre ellas.

Los números nos indican que todavía el agua disponible en el mundo alcanza para todos los seres humanos, pero la distribución de la misma y su uso es por mucho desigual, inequitativa y con alto grado de contaminación de la misma. Poco más de mil millones de personas no tienen acceso a suministros de agua para su consumo humano Y otros mil 700 millones de personas carecen de agua para su uso personal extensivo. Para el año 2027, la ONU estima que un tercio de los habitantes del planeta sufrirán falta de agua en forma crónica. Estas estimaciones ayudan a explicarnos por qué el agua es ya una variable importante en la estrategia geopolítica de la globalización, como recurso medioambiental escaso y disputado.

PD1. El arribar un político a una diputación, escondido debajo de las enaguas de una mujer, es una manera abyecta de lograrlo. Tal procedimiento deleznable, iniciado en Guerrero en pasadas elecciones a diputados locales, parece ser que está haciendo escuela. ¿Por qué nos empeñamos en vulnerar la dignidad de las mujeres de esta forma?

PD2. Es cierto que Guerrero es pobre y requiere de mucha mayor inversión pública y privada. Pero no menos cierto es que no todo depende de los necesarios recursos económicos. Es condición indispensable, más no suficiente. Cuando desterremos del seno de los gobiernos y del pueblo la corrupción, la impunidad, la simulación y la irresponsabilidad en nuestra forma de ser, pensar y de hacer, estas tierras del sur serán otras, muy otras.