Ni el Paulina pudo afectarnos, aseguran colonos del campamento Emiliano Zapata

 * Sin servicios y en viviendas de láminas de cartón habitan más de 160 familias en ese lugar, considerado de alto riesgo, se observó durante un recorrido de El Sur * Las construcciones fueron selladas por Protección Civil por el peligro que representan

 Karina Contreras * A pesar de que viven en la colonia considerada como de más alto riesgo, los habitantes del campamento Emiliano Zapata advirtieron que no abandonarán sus hogares, “porque no tienen dónde ir”.

Ubicada por Pie de la Cuesta –entre el Pedregoso y San Isidro–, ese asentamiento irregular está considerado por la Dirección de Protección Civil municipal como zona peligrosa en la próxima temporada de lluvias y huracanes, que empieza el 15 de mayo, e incluso las más de 160 casas tienen los sellos que así lo señalan. Esto porque las viviendas están construidas en la ribera de un canal lleno de rocas y en parte alta.

La viviendas de esa colonia, como la mayoría de los asentamientos irregulares, están hechas de láminas de cartón y huesos de palma; hay contadas casas de material. Además no cuentan con los servicios básicos, como agua o drenaje.

Los vecinos toman la luz de un transformador de la colonia San Isidro, mientras que los baños son de trozos de telas y construidos en el cauce natural del canal. Las calles son de terracería.

La colona Elvira Carvajal dijo a El Sur que personal de la dirección de Protección Civil ha ido dos veces a la colonia, y les han pedido que colaboren con los simulacros. A lo que ellos han respondido que sí, pero que no abandonarán sus hogares.

Dijo que su terreno –ubicado a orilla del canal– se lo están vendiendo en 9 mil pesos una persona llamada Carlos Rubén C. Guillén, aunque no sabe si le va entregar escrituras.

Aunque conoce que es zona de alto riesgo indicó que se quedarán allí porque no tienen dónde ir, ya que son gente humilde.

Esto porque en un oficio, el encargado de Protección Civil, Sabás de la Rosa Camacho, les pide que “por este medio una vez más se les comunica que deberán abandonar este lugar en el cual residen, con el fin de prevenir lamentables hechos”. Más adelante les informa que esos terrenos no pueden ser utilizados para casa-habitación por ser “irregulares”.

Y en cada una de las viviendas pegó una calcomanía donde dice: “zona de alto riesgo”.

Mientras que Guadalupe Zepeda Chamú dijo que ellos tampoco abandonarán su casa –donde habitan desde que invadieron el 8 de febrero de 2001–, además de que en las últimas lluvias no ha pasado nada.

Incluso –señaló– tampoco se vio que esa zona fuera afectada durante el huracán Paulina, ya que cuando cayeron como “paracaidistas” no había ni rastros, sólo monte y animales ponzoñosos.

En un terreno de 10 por 15 metros, Guadalupe Zepeda tiene construida una casa de madera con lámina de cartón.

Por otra parte, comentó que ellos, aunque son paracaidistas, quieren pagar sus lotes, por lo que piden a las autoridades de la Corett o Invisur su intervención, ya que son amenazados por quien se dice dueño, Carlos Cueva, de que los va a desalojar, cuando nunca ha presentado un papel que lo avale.