Asisten cientos a la apertura de la Feria del Pozole y el Mezcal en Chilpancingo

Rosendo Betancourt Radilla

Chilpancingo

Una acartonada inauguración de la Feria del Pozole y el Mezcal fue rescatada por una amplia participación de cientos de vecinos de Chilpancingo, que degustaron diferentes tipos de la bebida y sazones del tradicional platillo de la región centro del estado.
Acudieron 11 pozolerías de las más tradicionales de Chilpancingo, aunque faltaron las de las comunidades que rodean a la capital y son reconocidas por su exquisitez en los guisos, como cuando fue la primera versión de esta feria.
En la séptima edición la violencia puso el sello, pues una casa pozolera de las más tradicionales no pudo asistir porque tiene a una persona secuestrada. El pago del rescate y las negociaciones con el crimen los tiene descapitalizados y desmoralizados, explicó uno de los participantes en la feria, quien pidió guardar el anonimato.
El organizador, Luis Edgardo Acevedo Rendón; el representante de la Secretaría de Desarrollo Económico del gobierno del estado, Húber Hernández Pineda, y la directora de Turismo del municipio, Claudia Jorge Román, no pudieron informar sobre la cantidad de recursos que da al municipio o al estado la venta de pozole y de mezcal.
Entrevistado al respecto, el director general de Comercio Base y Artesanías del gobierno del estado, Húber Hernández Pineda, reconoció: “Aún no se institucionaliza la Feria del Pozole y del Mezcal, la intención es que rinda frutos económicos a quienes lo promueven, pero no ha sido así”.
El funcionario dijo que desconoce las cifras de ingresos por exportaciones en artesanías, pero aseguró, sin dar cifras, que “Guerrero es uno de los estados con mayor producción artesanal, exportamos muy bien la cajita de Olinalá”. Ante la insistencia, recordó: “Nuestra mayor exportación de artesanías es la plata de Taxco de manera internacional, pero ahorita está pasando por una situación crítica, sigue siendo la mejor desarrollada. Después tenemos las artesanías de Olinalá, porque empezamos a meterle laminado de oro, lo que está teniendo mucha aceptación en el mercado extranjero”.
En cuanto a la bebida tradicional del jueves en la capital, dijo que “el mezcal está en pleno auge. Estamos armando una marca para que se exporte, la marca es Identidad Guerrero, es una marca que incluye lo que se produce en Guerrero para venderla en el extranjero bajo la certificación del gobierno”.
Una vez más, no pudo dar una cifra en cuanto a la cantidad de recursos que entran a la entidad por este tipo de exportaciones y se excusó: “Es que esa no es un área o los datos que yo maneje”, pero se comprometió a buscar la información y darla a conocer.
Expresó que la producción artesanal en la entidad es de tan buena calidad para exportación “que estamos pensando en convertirla en industrial”.
“Tenemos convenios con tiendas comerciales a donde entran nuestros productos, la idea es promover productos de calidad a través de la marca Identidad Guerrero, queremos penetrar en los mercados  internacionales”, agregó.
Mientras, en la feria del pozole, que está en las instalaciones de la feria de navidad y año nuevo, se observaron a cientos de comensales degustando lo que se ofrecía. Uno de los expendedores de mezcal, Marcos Godínez Jiménez, desbordaba energía y ofrecía una prueba a cada persona que pasa, una prueba consiste en probar los tres diferentes tipos de mezcal, todos deliciosos.
A la cuarta copa, la mayoría de los que hicieron la prueba acceden a compra un litro de mezcal por 100 pesos el natural, 140 el de damiana y 140 el de nanche; el medio litro está en 50 pesos y si se lo piden, el vendedor se toma una copa con el que compra.
–¿cómo haces para no emborracharte?– se le preguntó.
–Sí me emborracho, pero me emborracho tranquilo, yo sé tomar el mezcal; vengo de una familia de mezcaleros, yo soy la cuarta generación de productores que hacemos el mezcal con pasión, ahí ponle que somos los mescaleros de Avecanor.
Este mezcal ya se exporta a Estados Unidos y China, en México tiene un convenio con la cadena comercial Soriana y está en pláticas para vender el producto en Liverpool, explicó. El mezcal que vende está certificado internacionalmente, produce 10 mil botellas al mes y sus principales consumidores son los municipios de Chilpancingo y el Distrito Federal, la graduación de su mezcal está en 35 grados de alcohol y es muy bueno, con un suave sabor a maguey.
Otro productor reconocido internacionalmente, tiene una menor producción, Aureliano Alcaraz Valentín de la comunidad de Tlanipatla, Zumpango. Su mezcal tiene un sabor más intenso a maguey que se impregna en la copa en la que sirve y en el paladar, es excelente. El litro de mezcal lo vende también en 100 pesos.
El productor en mayor escala observó: “Cada reto es como una oportunidad de crecer, nunca hay nada difícil, en el camino me he encontrado con muchas barreras y todas las he saltado, para mí no hay nada que sea un problema”.
–¿Quién lo ha apoyado?
–He tenido financiamientos desde mi casa, mis familiares, varios municipios, varios gobiernos del estado, gobiernos federales, lo que se te ocurra es a donde he acudido a pedir financiamientos, esto es lo que hago.
El productor de menor escala, dice que sólo busca vender el producto, agradece la invitación a esta feria y recordó que “dicen que sólo nos invitan a los certificados, yo sólo puedo decir que hago el mezcal como me han enseñado, hacer el mejor mezcal”.
Es poca la gente respecto de ocasiones pasadas, relata la dueña de la pozolería Olinalá, Griselda Patrón Sánchez: “Nos fue mejor hace dos años. El día de la inauguración llegaron danzas y mucha gente, todas las pozolerías se llenaron, pero hoy también nos fue bien, sólo que fue porque tenemos clientes asiduos, pero nos faltaron las danzas”.
En su negocio ofrecieron elopozole, pozole verde y blanco, de pollo o de cerdo, según el gusto de los clientes.